Capítulo 2

409 25 4
                                    

Ese mismo día ninguna dijo nada más hasta llegar al Internado.Quería gritarle a mi amiga,quería pedirle miles de explicaciones sobre lo que había sucedido,sobre qué estaba sucediendo con ella.¿Desde cuándo se comportaba así? Sin embargo yo no pregunté nada,y ella se mantuvo en silencio.

Incluso viviendo en las mismas cuatro paredes ninguna dijo nada hasta el momento de la cena.Como a las 7 debíamos estar ya en el Internado,a las 7:30 p.m sonaban las Campanadas.Exactamente dos,con un segundo de intervalo entre ellas."Pan y vino",comentó una vez la Directora,refiriéndose a el número de Campanadas.Eran molestas,no tanto por el ruido que hacían,sino porque venía escuchándolas todo el tiempo desde que tenía 6 años.Cinco por la mañana para que despertemos,2 para el desayuno,3 para el final de las clases,2 para la cena,5 para la hora de dormir.

17 campanas en un día.Un día.¿Cómo esperaban que,10 años luego,aún soporte su ruido,que parece haberse incorporado en mi cual virus? Una vez,recuerdo,le dije a Cassie."Vamos a cenar",y ella comentó que la campana aún no había sonado,pero eran exactamente las 7:30 p.m."Genial",pensé,"Ahora incluso las escucho cuando no debería"

Aunque sé que no debería enojarme,pero que me hayan carcomido tanto la cabeza como para oírlas incluso cuando no suenan me puso algo histérica.¿Continuaré oyéndolas incluso cuando salga de aquí,por el resto de mi vida? "Son cosa de orden" Se la pasa diciendo la Directora,cada vez que rumores sobre esos molestos ruidos llegan a sus oídos.

Cuando eran exactamente las 7:30 P.M y las dos Campanadas de costumbre sonaron,Cassie salía de la ducha con una toalla envuelta en su cabello.Intentando no prestarle atención,comencé a darle un vistazo a la habitación en la que había pasado prácticamente toda mi vida.No era grande,aunque tampoco extremadamente pequeña,creo que lo suficiente para dos personas.

No había mucho en ella,no se nos permitía,asegurando que una vida simple era lo que Dios quería para nosotros,demostrándonos que lo material no era lo importante y podíamos ser feliz sin tener demasiados recursos.Dos camas de una plaza,cada una en extremos opuestos de la habitación,con una mesa de luz y una lámpara al lado de cada una.Las mantas que las cubrían eran azules,y sus sábanas blancas,al igual que las de todo el Internado.

Todos teníamos los mismos muebles,espacio y esas cosas,después de todo a ojos de Dios todos somos iguales,pero con el paso del tiempo se fueron haciendo un poco más persuasivos con respecto a qué cosas podíamos tener.En la tercera pared estaba el clóset,no demasiado grande,aunque tampoco era como si tuviéramos demasiadas cosas que meter dentro.

Había una pequeña puerta de madera a un lado del clóset,que daba al pequeño baño,y a un lado de ésta un librero que me había regalado mi padre una vez,cuando cumplí 12,repleto de los libros de ambas.Para finalizar estaba el gran ventanal que llegaba desde el techo hasta el piso,y daba a la pequeña terraza,que era sin dudas mi lugar favorito.

-Escucha,Clove -Dijo,en un tono de voz algo bajo,junto a un suspiro -Siento mucho lo de hoy.Háblame,por favor.

La observé a los ojos,y pude notarla a punto de llorar.¿Qué le sucedía? Ni siquiera habíamos tenido una gran pelea,no era la gran cosa,no tanto como para llorar.Al instante me incorporé de la cama,notablemente preocupada.

-Está bien,en parte no es tu culpa,tú no sabías que ellos estarían allí,¿cierto? -Cuestioné,colocando una mano en su hombro para que no llore.

No respondió,se limitó a cerrar con fuerza los ojos unos segundos antes de volver a abrirlos.Nos observamos unos segundos hasta que sonrió,con cierta tristeza.

-¿Actué mal? -Preguntó,con cierta inocencia en su tono de voz.

Eso era.Algo pareció relajarse dentro de mi,como si un peso se fuera de mi espalda.Mi mejor amiga volvía a la normalidad.Estaba arrepentida por sus acciones de hoy,y eso era bueno.Arrepentirse por los pecados siempre era bueno,así Dios iba a perdonarte.

God help the girl (CLATO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora