Capítulo 13: Juego (pt.2)

71 2 7
                                    

Dos horas antes, estudio de la planta 2.

"Vale, ¿me repites de nuevo cómo pretendes que lo hagamos?"

Yoongi se encontraba desplomado sobre el sofá, su cabeza colgando desde uno de los reposabrazos y sus ojos invertidos mirándome con aura cansada.

Resoplé, recolocándome en el sillón. "No es como pretendo que lo hagamos, es como debemos hacerlo."

Yoongi puso los ojos en blanco, su postura haciendo del gesto algo más cómico de lo que seguramente pretendía. "Yo solo digo que si lo que quieres es hablar con él a solas para enfrentarle..." Gesticuló con las manos como si intentara seccionar la información. "... sencillamente pídele que venga a mi estudio esta noche."

Ahogué una risa de sorpresa. "Claro, sencillo. Si lo que quieres es que nos pillen todos tus amigos." Me incliné hacia delante con ambos brazos reposando en mis rodillas. "¿No crees que sería un poco sospechoso que yo mande a Jimin a verme a solas en tu estudio? Perdón, a vernos a ambos. Después del numerito de miradas que os habéis marcado delante de todos en-"

"Vale, vale, lo pillo, discreción." Yoongi se incorporó, estirándose perezosamente. "Pero sigo sin entender por qué no le puedo decir yo que venga. No sería la primera..." Sus palabras fueron muriendo y miró a un punto fijo en el suelo, las formas en la madera de repente la cosa más interesante para él.

"No sería la primera vez." Suspiré, poniéndome de pie. "Lo sé, Yoongi, si vamos a encarar a ese niñato malcriado no puedes permitir que te afecte tanto..." Se encogió de hombros, aún sin levantar la mirada, y me senté a su lado. "Nos manipuló, Yoongi. No pidió permiso y nos involucró a ambos en su juego. No debes de sentirte culpable por no haberlo visto venir." Resoplé una risa. "¿Cómo podríamos haberlo visto venir? Park Jimin es..."

"Un ángel." Yoongi me miraba ahora con los ojos algo más abiertos de lo normal.

Parpadeé unas cuantas veces. "Sí, exacto, tan angelical que no puedes imaginar que-"

"No, no, un ángel, T/N. Tú le llamabas así, ¿no es cierto? Me lo contaba. Solo a él." Una avalancha de imágenes me asaltó al instante: perfiles sin rostro, conversaciones a través de la web, su nombre favorito... Mierda, ¿por eso no paraba de llamarse así en el ascensor? Menuda imbécil- Espera.

"Las conversaciones." Las palabras escaparon de mis labios. Le miré sonriendo de oreja a oreja. "Yoongi, eres un genio."

No me sorprendió ver que él asentía sin duda alguna en su rostro, habiendo ya llegado a las mismas conclusiones. "Creo que empiezo a entender por qué quieres hacer que se enfrente él solito a su destino en lugar de llevarle de la manita pacíficamente..." Me sonrió de medio lado, sus ojos algo más oscuros. "Venganza. Y si consiguieses las conversaciones que mantenías con él, si averiguamos cuál era su cuenta a través del nombre que usabas para él, ya no tendría forma de negar absolutamente nada. Porque hay cosas que solo él te diría, y si consiguiésemos que lo viese de nuevo..."

"Se vendría abajo." Asentí enérgicamente. "Confesaría sin tener que hacer pregunta alguna, estoy segura."

Su sonrisa se ensanchó, mirándome a los labios fugazmente. "¿Sabes? Ver esta parte tan sanguinaria de ti es extrañamente atractivo."

Me acerqué a él, susurrando las palabras en sus labios. "Quiero que se encuentre perdido. Tan a ciegas como nos ha tenido todo este tiempo. Quiero..."

"Castigarle." Yoongi se lamió los labios. "Pero eso no te compete a ti, ¿no crees, pequeña?"

Me tensé. "Ni se te ocurra negármelo." Casi pude sentir la energía territorial dejando el cuerpo de Yoongi cuando me miró de nuevo a los ojos, los míos duros frente a los suyos. "Puede que haya jugado con los dos, pero es a mí a quien ha estado apunto de poner en el riesgo social más total y absoluto. A quien ha rastreado, investigado, arrastrado hacia aquí por sus caprichos." Me lamí los labios. "Puede que eso me haya llevado a algo que deseo, pero pobre de aquel que intente ser dueño de mi destino."

How to train your sub  {ESP}Where stories live. Discover now