Me quedé congelada en el sitio. Sus palabras aún resonando en mi cabeza. 'Vas a dominar a Jimin.'
No era posible que hubiese dicho eso. No era posible.
No era como si Yoongi no supiese que yo era switch. Claro que lo sabía. Antes de esto, antes de todo esto entre nosotros tres... él no era así. No exactamente. Era la sombra de lo que es ahora. Pero cuando Jimin-
Oh. Jimin.
Recordarlo calló mis pensamientos al instante. Dirigí una fugaz mirada en su dirección por encima del hombro de Yoongi. Seguía en el sofá, pero ya no tenía las palomitas en la mano. Tenía las piernas ligeramente abiertas y apoyadas en el suelo, la cabeza echada sobre el respaldo del sofá, ambas manos sobre su cuello en una posición aparentemente relajada, pero claramente provocadora. No me quitaba la vista de encima. Sus gestos eran suaves, pero su mirada era dura. Penetrante. Me estaba desafiando. Y me estaba ganando.
Sonrió satisfecho, como si supiese lo que estaba pensando. Y Yoongi también parecía saberlo.
"Oh, sé que lo deseas" Volvía a estar detrás de mí, pero esta vez no que tocaba. Solo su voz. "Es decir, míralo. Es prácticamente perfecto. Tan bueno..." Un escalofrío me recorrió la espalda y mi mirada se oscureció. Yoongi pareció notarlo. Una sonrisa en su voz cuando volvió a hablar. "... ¿o no? Oh, ¿no es así, pequeña? ¿No es Jimin nuestro pequeño ángel perfecto?"
Me mordí el labio cuando Jimin cambió de expresión. "No." Prácticamente gruñí. Jimin tragó saliva, comenzaba a cerrar las piernas.
Yoongi ahogó una risa. "¿No?" Puso una mano en mi hombro, apenas rozándolo. "¿Y eso por qué, preciosa?" Comencé a respirar profundamente, cada vez más pesadamente. A estas alturas Jimin se había cerrado completamente sobre sí mismo. Noté sorpresa en su cara. Sorpresa y sumisión.
"¿Acaso sientes que Jiminie te ha engañado? ¿Utilizado?" Asentí con firmeza, un solo movimiento antes de volver a ser de piedra. "Y ¿no crees que merece aprender una lección por ello?" Ante esto último, Jimin apartó su mirada de mí unos segundos para dirigirla unos centímetros más arriba, buscando la de Yoongi. Alertado.
Pero si Yoongi se dio cuenta, no lo demostró en absoluto. "Pues entonces solo queda una cosa por hacer." De nuevo una sonrisa en su voz. "Pero me pregunto si serás capaz de mantener el...control" Noté su mano acariciar la parte interna de mi muslo, y gemí ferozmente, mi cuerpo entero volviéndose a llenar de olas de calor por la alta sensibilidad. Cada poro de mi cuerpo ansiaba mi orgasmo negado. Cerré los ojos, soltando un leve gemido, pero esta vez no fue de placer, sino más bien intentando aguantar las lágrimas de frustración.
Y eso fue lo que bastó.
Al segundo, Yoongi tenía ambos brazos sobre los míos desde detrás, sus labios directamente en mi oído "(T/N), ¿color?" Su voz había adoptado una tonalidad completamente distinta. Abrí los ojos, sorprendida. "Verde."
El segundo pasó. Su voz volvía a su tono anterior. Su sujeción firme. "Oh, ¿de veras crees que puedes con esto, pequeña?" Noté una de sus comisuras curvarse, su boca aún en contacto con mi oreja. "¿Quieres demostrar a oppa de lo que eres capaz?"
Mi atención volvió a centrarse en la nerviosa figura del sofá. "Jimin..." Susurré.
Noté que Yoongi levantaba la mirada hacia él. Se humedeció los labios. "Es todo tuyo."
*click*
Jimin había subido las piernas al sofá, adoptando una postura protectora. Me miraba con cautela desde detrás de sus rodillas. Comencé a caminar en su dirección, lentamente.
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How to train your sub {ESP}
FanfictionEres co-fundadora de una de las iniciativas artísticas más controversiales y famosas de Corea del Sur, con millones de seguidores en todas las redes sociales. Tus proyectos se basan en filmar/entrevistar/indagar en la vida de las personas con las qu...