Capítulo 29: ¿Nos quedaremos?

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El omega azabache se removió, pegándose más al cuerpo del alfa a lado suyo, el calor era agradable y reconfortante. Además, que su aroma a menta le encantaba y le daba tranquilidad

Por otro lado, el alfa ya estaba despierto y sin ninguna intención de levantarse, pues estaba realmente cómodo con el joven a su lado y aquel aroma a canela, y leche endulzada, que mantenía su nariz lo más cerca posible del cuello del omega. También, el poder ver a "su omega" durmiendo, tan delicado y hermoso como siempre, su piel ahora con su color natural, sus esponjosos y nuevamente suaves labios, era una escena tan bella que lo deleitaba, aunque le costará admitirlo en voz alta. Sin embargo, por dentro era mas que consiente de sus sentimientos hacia el omega y lo demostraba, asu manera, claro

Dejo un tierno beso sobre la frente del rubio, esperando que no estuviera despierto, así que cuando se alejó, observó que el omega aún tenía los párpados cerrados, pero ahora una bella sonrisa reducía en su rostro, dándole una imagen muy tierna. Sin más llevo una mano sobre la mejilla del joven omega y con delicadeza comenzó a acariciar aquella zona con su pulgar, mientras lo admiraba

Pues sabía desde el primer momento que lo vio, que era hermoso físicamente y podía llamar la atención de cualquier alfa. Pero, en estos pocos días que convivió con el joven, descubrió que bajo esa fachada de hermosura, también había una persona transparente, lleno de bondad, y con un toqué de inocencia, lo cual lo había resplandecer aún más ante sus ojos, y aquello lo estaba asustando

El calor que les brindaba el sol parecía envolverlos en una cálida burbuja. Los minutos pasaban con calma y finalmente el omega fue despertando con pereza, dando una apariencia tierna, similar a la de un bebe. Aquella vista cautivo al príncipe, quien se quedó atónito con tanta belleza, hasta que fue descubierto por el omega pelinegro

-Príncipe, disculpe, pero ¿Por qué me observa de esa forma? - preguntó Jeon al percatarse, el príncipe, simplemente aclaró su garganta y se colocó de pie evitando hacer contacto visual con el joven

-Pediré que traigan la comida para que desayunemos -anuncio, mientras salía de la habitación

"¿desayuno?" se preguntó Jungkook, observó la ventana y recién fue consciente de que era un nuevo día, de pronto a su mente llego la imagen del omega mayor llorando sobre su hombro, y sin más se puso de pie con la intención de salir, pero después de unos cortos pasos fue interceptado por el alfa que anteriormente salió de la habitación

-¿A dónde vas? -Pregunto al verlo tan apurado

-Yo....

No pudo terminar de hablar debido a que dos criados entraron una bandeja cada quien, que seguramente contenía el desayuno, en silencio las bandejas fueron acomodadas en la mesa y sin más que hacer realizaron una reverencia y salieron de la habitación.

-Comamos -hablo el príncipe, pues tenía hambre, por otro lado, el omega aun no podía comer aquellas raciones completas, pues su estómago aún conservaba un tamaño pequeño en comparación antes de que enfermara

En silencio comenzaron a comer ambos, pero después de algunos minutos el omega se detuvo, dejando los palillos en su soporte y tomando un poco de té. Los segundos pasaron y después de dejar la taza en su lugar el omega no volvió a pronunciar palabra alguna, ni a comer otro bocado de comida, aquello preocupo al príncipe

-Jungkook ¿Te encuentras bien? -pregunto observándolo

-Sí, no tiene por qué preocuparse, es solo que gradualmente estoy acostumbrándome a comer la cantidad que anteriormente consumía -respondió, tratando de aliviar el sentir del príncipe, quien únicamente suspiro

UN CHICO OMEGA EN EL HAREM (VKOOK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora