UN CHICO OMEGA EN EL HAREM (VKOOK)

Capítulo 30: El favorito del príncipe

Pasaron dos días desde aquella pequeña conversación. Pero esos días le sirvieron al joven omega de cabello oscuro para reflexionar acerca de su futuro en aquel palacio, también fueron dos días en los cuales no pudo ver al príncipe heredero y este no lo llamó, lo cual lo preocupaba, justo cuando las cosas estaban bien él tenía que arruinarlo con sus comentarios

                   
Después de algunos minutos llegó SeokJin, el caballo se detuvo y el primero en bajar fue el príncipe NamJoon, Jungkook hizo la respectiva reverencia para después observar confundido como este intentó vanamente ayudar a bajar, pues el omega bajo de un salto, luego de agradecer al príncipe tomo de la muñeca a Jeon y ambos salieron del lugar
                 
El menor de los omegas necesitaba explicaciones, porque hasta donde sabia el omega iba a conocer la tumba de su padre y a darle una pequeña visita. Entonces ¿Que hacia ahí uno de los príncipes? Una vez entraron a la habitación del joven pelinegro finalmente lo soltó, disculpándose repetidamente por su acción

                   
-Hyung ¿Qué sucedió? Pensé que iría solo –hablo curioso el menor

                   
-Y así tenía que ser... pero... el príncipe me siguió –se quejó –Creo que ser entrometido es de familia –dijo molesto haciendo reír al menor, quien lo veía con gracia

                   
-No es gracioso, yo.... -de pronto unos suaves golpes en la puerta de la habitación llamaron la atención de ambos –¿Esperas a alguien -pregunto confundido el mayor, a lo que recibió una negación por parte del omega menor.

                   
Sin más la puerta se abrió, dejando ver a un alfa de tez canela y cabellos ya casi despintados en su totalidad, haciendo que se vea un hermoso dorado que hacía juego con sus ojos verdes esmeralda, junto a las puntas negras que caían sobre la frente del alfa, características de un alfa que el omega conocía bien. En ese instante ambos omegas realizaron una reverencia.

                   
-Jungkook acompañame - habló y sin más salió con el chico tras suyo. En el trascurso del camino ninguno dijo ni una sola palabra, lo cual incomodaba al más joven.
                   
Apenas entraron a la habitación, Jeon observó sus manos, sabía que debía disculparse y es lo que haría, sin embargo, no tenía ni la más mínima idea de con que palabras empezar. Pero después de largos minutos de silencio, decidió hablar

                   
- Príncipe yo... lamento mi comportamiento del día anterior -dijo observando al suelo

                   
Si tan solo hubiera levantado su cabeza hubiese visto la sonrisa del alfa. Sin tiempo que perder tomo la mano del pequeño joven con ternura y lo guío a la cama, en donde se sentaron.

                   
Era extraño, pero la sensación de seguridad y protección que sentía el omega era innegable. Además, de una calidez llenó su pecho

                   
Por otro lado, el alfa sintió a su lobo levantarse, y comenzó a girar en círculos por la felicidad que le daba sentir a su pareja destinada. Por lo que, el príncipe sonrió, esta vez de forma consciente de aquella felicidad que le brindaba la presencia de aquel bello omega.

                   
Con una bella y sincera sonrisa en su rostro acaricio la mejilla del joven en frente suyo, la escena era tierna y "derretía su corazón", era increíble que aquel bello omega había derribado las barreras de sus sentimientos de negación a los mismos hacia el pelinegro. Tomó con delicadeza el mentón del joven y lo elevo, observándolo con una sonría que no abandono en ni por el más mínimo momento. Y sin más, se juntó sus labios a los delgados labios del chico, en un beso lento, que poco a poco el omega siguió.