Estoy hablando con Andrew en el patio mientras mi mamá prepara la cena. Daniel se ofreció a ayudarla.
—Estoy enfermo, Shay. No puedo dormir, apenas puedo comer. Todo me lo recuerda.
Se coloca las palmas en el rostro y llora. Yo paso mi mano derecha por su espalda. Él se incorpora y me abraza.
—Han sido momentos difíciles, mi mamá está en un lugar de cuidado. Despertó, pero ya no es capaz de hacer nada por ella misma. —lagrimas caen por sus mejillas huesudas—. Está en una silla de ruedas.
Mis ojos se llenan de lágrimas. Su madre siempre fue una mujer fuertes que siempre no hacia pasteles y comida cuando pasábamos los días completos jugando, ella me trataba con a su hija… incluso me compraba cosas que no podría comprarle a su hijo porque es niño, y de todo lo que compraba, conseguía uno rosado para mí y uno azul o verde para él.
Lo abrazo por un largo rato hasta que se calma y cuando se aleja, tiene otro semblante.
—Gracias por esto, lo he necesitado por tanto tiempo. —Me mira con nostalgia—. No quiero que estés lejos de mí, Shay. No me importa que solo seamos amigos.
Lo miro a los ojos y se ven sinceros.
—Nunca estoy lejos de ti, solo tienes que llamarme si quieres escuchar mi voz.
—¿Y si quiero un abrazo como el de hace unos minutos, tomo un avión?
Mi mamá aparece en ese momento.
—La cena está servida, pueden entran cuando se sientan listos.
Me levanto y Andrew toma mi mano. Me giro para mirarlo a la cara.
—No tienes que correr, no es una pregunta a la que debas responder.
***
Ya tengo una semana en mi casa, se siente bien pero a la vez extraño porque creo que ya no la siento como mi casa, tenía tanto tiempo que no estaba aquí que me desacostumbre a la orientación de las cosas. Andrew está viviendo aquí, mi mamá está cuidando de él, me contó que lo ha estado acompañando al médico y me dijo que necesita 5 clases de medicamentos para estar calmado, pero desde que yo llegué no los ha tomado. También está haciendo terapias para deshacerse de la culpa que siente por la culpa de su padre, se despierta a mitad de la noche hasta 3 veces por pesadillas de su padre diciéndole que era él quien debería de haber estado al volante.
Tocan la puerta.
—Adelante.
Daniel se asoma. Mis padres no nos dejan dormir juntos así que él duerme en el sótano porque Andrew tiene la habitación de huéspedes.
—¡Hola Shay! —dice Daniel con una sonrisa.
—Hola Dani. Pasa, siéntate.
Hace lo que le digo y me da un beso en la mejilla.
—¿Cómo estuvo tu noche? —pregunta curioso.
—Bien, aunque fría y sin nadie que me abrazara. —digo coqueta.
Sonríe en mi dirección, avanza y se sienta a mi lado.
—¿Está todo bien con Andrew? —pregunta con una leve arruga en el entrecejo.
—Regular, su mamá está mal y está teniendo problemas para dormir.
—Pobre chico. ¿Él fue el que llego cuando íbamos a una cita?
—Sí, es él.
—¿Y tu hermano mayor, está en clases?
—Él es de quien hablaba, Andrew y yo somos hijos únicos así que nos consideramos hermanos.
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Mejores Amigos
Dla nastolatkówAndrew y Shannon inseparables desde que tenían 10 años. En la universidad, decidieron irse a vivir juntos. Todo iba bien hasta un acuerdo que lo cambia todo. No estaban atraídos uno por el otro... hasta esa noche. La amistad se hace difícil cuand...