Somebody to Love

CAP 16

CAPITULO 16
Había pasado una semana desde que Veronica se fue. El clima se había vuelto más cálido y la fría y opaca niebla de Londres se estaba convirtiendo en una sonrojada primavera. Los árboles se volvian más verdes, sus retoños comenzaban a florecer con vívidos pétalos. Se quitaron los abrigos y la gente volvió a llenar las calles.

                    
Jungkook tenía un pañuelo azul atado alrededor de los ojos y las muñecas envueltas con otro pañuelo escarlata que las sujetaba a la cama. Estaba desnudo, retorciendose en la cama de Taehyung, dejando escapar gemidos y gritos jadeantes.

                    
"Mi hermoso ángel" Jungkook escuchó la voz ronca de Taehyung decir. Taehyung besó el pecho desnudo de Jungkook, haciendo pequeños círculos con una mano en la línea de su cintura mientras con la otra metía dos dedos dentro del chico. Jungkook movió sus caderas, un quejido decepcionado dejando sus delicados labios al no sentir fricción.

                    
"T-Taehyung-" tartamudeó, moviendo la cabeza de un lado a otro, frenético. "Nngh- bésame- bbésame-"

                    
"Por supuesto" susurró Taehyung, y lo besó. Jungkook sintió los dedos de Taehyung empujarse más hacia arriba y alcanzar su próstata, gimiendo en el beso, finalmente sintiendo el cuerpo vestido de Taehyung contra su polla. Jungkook se empujó hacia arriba, vergonzosamente necesitado, queriendo nada más que a Taehyung para tocarlo por todas partes.

                    
Había estado con Taehyung todos los dias durante la semana pasada. En el momento en que terminaban sus clases, Taehyung lo recogía y lo llevaba de regreso a su hogar. Jungkook volvía a lo suyo a veces, por periodos cortos, pero Taehyung siempre lo convencía de pasar la noche juntos. Jungkook sentía culpa en el fondo de su estómago por ser tan negligente con Rosie, pero ella había estado demasiado ocupada en el hospital y dormía en el momento en que regresaba del trabajo. Eso, sin embargo, hacía poco por reducir su remordimiento.

                    
Hoy, el sol se había puesto horas antes. La luna se alzaba en lo alto del cielo, poderosa en su aproximación para parecer tan docil pero vigilante. Taehyung le había sonreído a Jungkook al verlo y rápidamente aumentó su excitación ante la idea de estar atado. Jungkook lo había hecho de buena gana, o mejor dicho, con entusiasmo.

                    
"Bebé." Taehyung declaró, necesitado, comenzando a masajear la próstata del chico con sus largos dedos, quien sintió que su cabeza se fulminaba de placer como si le hubieran encendido fuego en la boca del estómago. Los gemidos de Jungkook se hicieron más fuertes y su respiración se hizo más entrecortada. Sus manos permanecieron en lo alto, tirando de sus ataduras, aunque era muy consciente de que las quería puestas. Ver solo oscuridad le hizo apreciar más el tacto, los dedos y la voz de Taehyung.

                    
"Ta-Taehyung." Jungkook gimió, mordiendose el labio con tanta fuerza que se sintió mareado. "Dios- p-por favor-" Jungkook soltó, desesperado.

                    
Taehyung lo calló suavemente. "Eres hermoso así" le dijo, inclinándose a besar su pecho, viendo como sus muslos se apretaban y sus piernas se levantaban involuntariamente ante los pequeños círculos que Taehyung hacía en su próstata. "Que fascinante es verte tan complaciente en mis manos. Estás listo para darme todo" dijo Taehyung, asombrado. "Me has dejado llevar al borde tus sentidos. ¿Confías en mí para hacerte el amor, mi amor?"

                    
"Si." Jungkook exhaló. "Lo disfruto... I-inmensamente. Cuando- cuando tomas el control de mí. Tócame más, por favor. Lo anhelo." Jungkook dijo con los labios húmedos. Taehyung presionó otro beso en sus labios abiertos.

                    
Sacó los dedos de su interior, sosteniendo ambos lados de sus muslos y los levantó, empujando su miembro hacia adentro con bastante rapidez. Jungkook soltó gritos, su sonrojo recordándole a Taehyung la primavera. Su pálido cuerpo como la luna se retorcía contra las sábanas mientras Taehyung lo cogía hasta el fondo.

                                
                    
"No puedo imaginar lo absolutamente devastadora que hubiera sido la vida para ti si no hubieras sentido esto" susurró Taehyung, sonriendo por encima de él, mirando a su chico indefenso cediendo a su rudeza, solo gimiendo y tratando desesperadamente de frotar su polla contra la de Taehyung.

Taehyung vio lagrimas traspasando la tela de la bufanda atada alrededor de su cabeza y las besó. Sabía que no podía ensuciar el cuello de Jungkook con chupetones, a pesar de que tenía muchas ganas de hacerlo. Sus esposas simplemente se interponían en su camino a veces. Taehyung continuó cogiéndose a Jungkook, susurrandole palabras sucias al oído.

Jungkook terminó pronto, quizá demasiado. No se arrepentía de esa humillación, el rubor en sus mejillas hacía evidente lo fascinado que se sentía. Taehyung se vino pronto con eso también, disfrutando de como Jungkook gritó su nombre con su frágil y bonita voz.

Taehyung se sacó el condón y se bajó de la cama para tirarlo a la basura. Se dio la vuelta, regocijandose al ver al chico desnudo, con la espalda arqueada, su cintura luciendo más pequeña que nunca desde ese ángulo, sus muslos apretados y las rodillas hacia el techo. Sus débiles dedos temblaron y las lágrimas continuaron cayendo en cascada por sus mejillas. Movió la cabeza como si se preguntara dónde estaba Taehyung.

"Taehyung?" Preguntó Jungkook, temeroso de su ausencia. Taehyung se acercó a la cama.

"Puedo fotografiar ésto? Me gustaría conservarlo conmigo en todo momento. Para el futuro, tal vez"

Jungkook asintió. "S-si." dijo sin dudarlo. Taehyung tomó su cámara negra con bordes plateados y encendió un cigarrillo, despreocupado. Se paró cerca de la cama, dejando salir humo de su boca mientras hacía clic, fotografiando su belleza.

Taehyung dejó la cámara a un lado y luego se subió para sentarse a horcajadas sobre las estrechas caderas del chico para deshacer los nudos alrededor de sus muñecas y ojos. Una vez que los quitó, Jungkook se llevó las manos al pecho y parpadeó con los ojos húmedos. "Hermoso" murmuró Taehyung, inclinándose y besando sus labios, sosteniendo su cigarrillo sin apretar en una mano. La lengua de Jungkook se movió dentro de su boca, y el mayor se apartó, acostándose a su lado.

"No debería quedarme esta noche" susurró Jungkook mientras Taehyung le pasaba un brazo por la cintura, dejando los restos de su cigarrillo en el cenicero al lado de la cama. Taehyung gruñó.

"Patrañas. Deberías quedarte a pasar la noche, y lo harás." Taehyung dijo, besando la parte de atrás de su cuello. Jungkook se removió en sus brazos y se dio la vuelta para mirarlo. Taehyung sintió un beso en su mejilla.

"Taehyung," dijo suavemente. "He intercambiado menos de 5 palabras con Rosie en mas de una semana. No es justo para ella" mencionó y Taehyung abrió los ojos.

"No dijiste que estaba ocupada con su trabajo?" Taehyung dijo, poniendo su mano sobre la cadera desnuda de Jungkook. "No te preocupes, cariño. Es solo una noche más-"

"Eso es lo que has estado diciendo todas las noches" dijo Jungkook, y se sentó, respirando pesadamente. "No podemos simplemente detener nuestras vidas y pasar todo el tiempo juntos, por mucho que lo disfrute. No podemos fingir que estamos en Francia" Espetó, mirándolo.

Taehyung se sentó y vio como el chico se levantaba de la cama, los pequeños chupetones morados que sus labios habían dejado en la parte interna de los muslos de Jungkook brillaban perfectamente. El chico recogió sus pantalones y se los pasó por las piernas. Taehyung se rió disimuladamente.

"Después de todo lo que pasó esta noche, no crees que mereces un poco de mi afecto? Cariño, solo estoy tratando de cuidarte. Asumí que estarías desconcertado después del sexo que-"

            
                    
"Estoy bien, Taehyung. En serio." Dijo Jungkook, tomando los pantalones que estaban sobre la cama y poniendoselos rápidamente, viendo a Taehyung levantarse después, solo con pantalones y sin camisa, con un cigarrillo nuevo sin encender en la mano.

Taehyung sonrió. "Me hiciste follar contigo y luego decides irte, ¿en serio?" Taehyung preguntó, arrastrando la voz, sus ojos brillando con un toque de molestia.

Jungkook frunció el ceño y sus ojos se agrandaron. "N-no. ¿Por qué dices eso? Tú eres el que sigue insistiendo en que hagamos estas cosas-"

"No actúes como si no te gustara, pequeño. ¿Vas a hacerte el inocente de nuevo? Realmente ya no te queda tan bien" susurró Taehyung, agarrando la muñeca del chico.

Jungkook echó el brazo hacia atrás, luciendo inseguro. "¿Estás enojado conmigo? ¿Por que? ¿Por no evadir mis responsabilidades y sucumbir a esta- esta aventura?" Preguntó confundido. Taehyung lo miró y se rió entre dientes, seco.

"¿Estás bromeando?" Taehyung preguntó en voz baja. "¿Aventura? ¿Es eso lo que soy para ti?"

"¿No es eso lo que somos?" Jungkook le preguntó de vuelta.

"Todo lo que te pido es que te quedes a pasar la noche, y lo estás haciendo parecer como si yo fuera una especie de doncella desesperada que no te deja ir" dijo Taehyung, y Jungkook se burló, incrédulo.

"¡Estás actuando así, Taehyung! ¡Todas las noches que no he estado aquí, me has llamado para pedirme que viniera! Ni siquiera has llamado a tu esposa, lleva fuera una semana entera por visitar a su madre enferma!"

"Como si tu fueras un buen marido. ¿Sabes siquiera lo que disfruta Rosie? ¿Sabes cómo es su trabajo?" Taehyung chasqueó la lengua, sus dedos jugando con el cigarrillo.

"¡Entonces déjame ser un buen esposo! Admito que no trato a Rosie del todo bien, pero fui forzado a casarme, Taehyung. Rosie nunca admitirá lo que hizo. Convenció a mi madre de que la amaba, y solo me dijeron que me iba a casar la mañana del día de mi boda. No he podido superar eso, pero tú... tú elegiste casarte con Veronica. Al menos actúa como tal." Dijo Jungkook, dándose la vuelta para alejarse.

"¿Quieres que actúe como tal?" Preguntó Taehyung, acercándose a él. Jungkook comenzó a bajar las escaleras y Taehyung lo siguió. "¿Es eso lo que quieres, Jungkook? Porque eso haría las cosas muy difíciles entre tú y yo, amor." Taehyung dijo con brusquedad, viendo a Jungkook detenerse junto a la puerta, mirando sus zapatos.

"Sabes que eso no es lo que quiero decir, Tae-"

"Entonces no digas esas cosas" Taehyung gruñó, tomándolo por la cintura, acercándolo más. "No finjas que no dependes de mi afecto" susurró Taehyung contra su mejilla, inclinándose a besarlo. 

Jungkook dejó escapar un sonido de abrupta confusión a través del beso, sintiendo a Taehyung tratando de presionar su lengua dentro de su boca. Jungkook se apartó rápidamente, dejando escapar un suspiro, mirando a Taehyung con desconcierto. Taehyung comenzó a besar su cuello, envolviendo sus brazos alrededor de su cintura.

"Q-que estás-" tartamudeó mientras las manos de Taehyung bajaban hasta su trasero. "TaeTaehyung-" dijo Jungkook, sintiendo a Taehyung abrazarlo con fuerza. "¡Taehyung!" Jungkook dijo bruscamente, empujando al hombre fuera de si.

"¿Que te pasa?" Jungkook dijo, frunciendo el ceño. Taehyung también parecía sorprendido y confundido de si mismo. "¡No puedo pasar todas las jodidas noches contigo!"

Taehyung tragó saliva y Jungkook se puso los zapatos rápidamente, tomando su abrigo. Taehyung parecía desesperado, asustado, con los ojos muy abiertos en una triste expresión de miedo. "N-no te vayas, por favor." Taehyung dijo, suave.

            
                    
"No me quedaré aquí contigo, no ahora." Dijo. Jungkook alcanzó la puerta y Taehyung lo tomó del brazo.

"Lo siento, lo siento, no quise ser tan agresivo. Lo siento de verdad, solo quédate esta noche. Una última noche, lo juro, te prometo que puedes irte después-" Taehyung tartamudeó, luciendo como si estuviera haciendo todo lo posible por mantener la compostura. "Por favor, solo-"

"Taehyung." Jungkook dijo en voz baja, con los ojos muy abiertos por la preocupación. "Duerme un poco, por favor. Llama a Veronica. Lo siento. Te veré después." Dijo y abrió la puerta para salir, cerrándola rápidamente.

Taehyung miró la puerta con los ojos muy abiertos, dándose cuenta de sus pattéicas y ridículas palabras. Que... que desesperado y pegajoso sonaba. Exactamente lo que le molestaba. Y él pensaba que Jungkook era quien se comportaba así.

Taehyung se alejó de la puerta, caminando de regreso a su habitación, con las manos temblando ligeramente. Fue hacia el teléfono que colgaba de la pared y se lo acercó a la oreja, marcando un número. El tono sonó unas cuantas veces, y luego escuchó un suave suspiro.

"¿Finalmente has decidido llamarme?" Dijo la voz de Veronica.

"Solo quería preguntar si tu madre ha mejorado" Dijo Taehyung, escuchando a alguien toser detrás de Veronica.

Hubo un pequeño silencio. "No lo ha hecho. Los médicos dicen que es terminal. Puede que tenga que quedarme más tiempo del que pensaba".

"Está bien." Dijo Taehyung. "Puedo ir, si quieres. Estoy seguro de que debe ser terrible ver a tu propia madre tan-"

"No necesito tu ayuda, Taehyung. No me tengas lástima." Veronica dijo, y Taehyung se congeló por una fracción de segundo, soltando después una risita fría. "Bien. Por supuesto. Adiós." murmuró, sin dejarla responder y cortó la llamada.

Taehyung caminó hacia su cama y se acostó, colocando el cigarrillo sin usar sobre la mesa. Sintió que su corazón se aceleraba, que su estómago se retorcía por dentro y la cabeza le daba vueltas. Se recostó, tomando un cojín para abrazarlo, respirando hondo y cerrando los ojos. Pensó en Jungkook.

Todo en lo que podía pensar era en lo molesto que se veía antes de irse. Taehyung cerró los ojos con más fuerza, deseando tener a Jungkook entre sus brazos.

*

A la mañana siguiente, Jungkook preparó el desayuno y té con leche para Rosie. Había regresado la noche anterior, pero ella no estaba despierta, asi que se despertó antes que ella y le preparó el desayuno. Se despertó a las 8 de la mañana, ya vestida para el trabajo, y se apresuró a ir a la cocina como todos los dias. Al ver a Jungkook ahi, se detuvo. "Oh, estás aquí hoy."

Jungkook se rió entre dientes. "Um, si. El trabajo con la firma de Taehyung terminó." Dijo y luego sonrió. "Te preparé el desayuno."

"O-oh. Eso es bastante dulce de tu parte, gracias." Rosie dijo en voz baja y Jungkook tomó una bandeja para llevarla a la mesa del comedor, colocándola ahi. Estaba a punto de servir el tében una taza pequeña, pero ella corrió hacia él.

"No necesitas hacer todo eso. Yo lo haré. Has hecho más que suficiente, ¡de verdad! Gracias." Rosie dijo, besando su mejilla. Jungkook gruñó.

"No te preocupes, Rosie. Yo solo-" comenzó a decir Jungkook, pero Rosie le quitó la taza de té de las manos. "¡Por favor! No hagas todo esto por mi, es vergonzoso". Rosie tartamudeó con honestidad y Jungkook soltó la tetera de sus manos, luciendo inseguro.

"Eres... eres un hombre, no debes hacer estas tareas domésticas. Yo podría haberlo hecho" Rosie dijo, y Jungkook frunció el ceño.

"Simplemente estoy cocinando para mi esposa. Podrías estar más agradecida por ello" murmuró y Rosie lo miró.

            
                    
"¿Por que? ¿No cocino bien? Oh, Dios mío, ¿No soy buena en la cocina? Sabía que ser enfermera era una mala idea. No he hecho una buena comida durante mucho tiempo, ¿Verdad?" Rosie continuó, asustada. Jungkook negó con la cabeza.

"No, no, yo-quise decir- solo lo hice para compensarte-"

"¿Compensarme? No he hecho nada. En todo caso, yo debería compensarte a ti". Rosie dijo, perpleja.

"Tú también trabajas ahora, Rosie. Te mereces una buena comida de vez en cuando" dijo
Jungkook despreocupado, dándole una pequeña sonrisa. Rosie todavía parecía un poco dubitativa.

"Mi padre nunca cocinó para mi madre" Rosie dijo en un tono amargo.

"Tu padre y yo somos personas diferentes" Dijo Jungkook, como si fuera obvio. Rosie asintió y se sentó. Jungkook dejó escapar un suspiro y se volvió para caminar hacia los sofás.

Vio una fotografía en la mesa de café y la levantó. "La envió mi hermana. Es de su nuevo hogar. ¿No es espléndido? Dice que vivir en Bristol es bastante agradable, en realidad"bRosie gorjeó.

Rosie tenía 3 hermanas. Dos mayores, una menor. Todas se casaron antes que ella. Jungkook miró la foto. Eran dos de las hermanas mayores de Rosie de pie frente a una chimenea, con sus maridos. 

Sus maridos eran hombres fornidos. Uno con cabello negro bien peinado y bigote, y el otro con cabello rubio y lacio. Eran la familia doméstica perfecta. Con casas grandes y esposas que no trabajaban. Una de las hermanas estaba embarazada. Uno de los maridos era policía y el otro mecánico. Ambos bastante exitosos en lo que hacían. Eran varoniles, mayores, fuertes, y ambos habían ido a la guerra cuando eran más jóvenes.

Jungkook miró a Rosie. "¿Desearías ser como tus hermanas a veces?"

"Muy a menudo" dijo Rosie en voz baja, y Jungkook tarareó, mirando hacia otro lado.

Mantuvo la fotografía abajo y luego, sin saberlo, se llevó los dedos a los labios. "¿Tienes bálsamo labial? Mis labios están bastante secos." Dijo Jungkook. Rosie se quedó inmóvil, mirándolo. El chico se giró para mirarla, viendo que ella le dedicaba una mirada extraña.

"Um. Si, hay uno en mi bolso." Rosie murmuró. Jungkook tomó su bolso que estaba en el sofá, lo rebuscó y encontró el bálsamo labial que tenía la forma de cualquier otro lápiz labial. Quitó la tapa y se miró en el pequeño espejo pegado a la pared al lado de la cocina.

Jungkook se aplicó el bálsamo labial lentamente, observando como se veía mientras se lo aplicaba en el labio inferior y luego se cubría suavemente el labio superior con él. Se detuvo y apretó los labios por un segundo, mirándose a si mismo, notando el ligero tinte rosado del bálsamo.

Jungkook aplicó otra capa, inclinando la cabeza y viendo el bonito color rosa brillante, y como contrastaba con su piel pálida. Se aplicó otra capa, el tinte volviéndose mas intenso, haciendo que sus labios se vieran más rosados. Jungkook estaba listo para aplicar otra, cuando;

"No creo que tengas que hacerlo tantas veces. Una es suficiente" Rosie dijo desde la mesa del comedor. Jungkook alejó la barra de su rostro y tarareó, cerrándolo con la tapa y luego colocándolo de vuelta en el bolso de Rosie.

Jungkook se peinó el cabello hacia un lado, sin dejar de mirar el espejo. Jugó con el diamante en su collar y pensó en Taehyung, y en lo triste que se veía cuando se fue. Sus ojos, que solían ser tan oscuros e intimidantes, parecían de un cachorro. Jungkook dejó escapar un pequeño suspiro, dejando de acariciar la gema entre sus dedos.

"¿No crees que la plata se ve-?" Jungkook se detuvo, viendo a Rosie levantarse y tomar su bolso, dirigiendose hacia la puerta. "¿Te vas tan rápido? Pensé que tu trabajo no comenzaba hasta las 9." Preguntó.

"He decidido irme temprano hoy" Rosie refunfuñó. Jungkook parecía confundido. Ella nunca se molestaba así.

"Rosie, ¿Está todo bien?" Preguntó Jungkook, y Rosie lo miró desde la puerta.

"¿Podrías ser como los otros hombres?" Rosie soltó enfadada, con las cejas fruncidas. Jungkook se quedó inmovil, sorprendido por esta repentina declaración.

Se paró junto al sofá y Rosie tragó saliva. "Acabo de... acabo de hablarte tan descaradamente y ni siquiera me alzas la voz. Sé que siempre has sido bastante callado, pero no... ¿No deseas ser mas varonil algunas veces?"

Jungkook se sintió ofendido por esas palabras. Nunca había sido varonil. Lo lo sabía. Lo sabía porque los chicos de su escuela siempre lo molestaban y lo insultaban por eso. Lo sabía porque sus compañeros siempre lo llamaban doncella o cobarde. Por supuesto que desearía poder ser varonil. Todo el tiempo.

Jungkook la miró. Parecía herido. Rosie dejó escapar un profundo suspiro. "Lo-lo siento." Rosie susurró, mirando hacia abajo, cerrando los ojos. "Lo siento de verdad. No quise decir todo eso. Es solo que no dormí muy bien anoche."

Jungkook asintió con la cabeza, con su mano subiendo inconscientemente para acariciar el pequeño diamante que colgaba de su cuello. Rosie lo miró. Jungkook estaba mirando hacia otro lado. "E-está bien. Deberías irte a tu trabajo, podría llover pronto." Dijo Jungkook con palabras suaves.

Rosie asintió y se dio la vuelta para salir. Jungkook se sentó en el sofá, las lágrimas amenazando con brotar de sus ojos marrones. Jungkook no creía que Rosie, quien lo conoció en la escuela y vió como otros chicos mayores se burlaban de él casi todos los dias, se atreviera a decir todo eso. Su perspectiva era valida, Jungkook lo entendía. Pero aun asi, le dolía.