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Odiaba las juntas familiares, no soportaba ver a mis tías hacer el típico chiste de que no tengo pantalones porque mi pantalón tiene agujeros o a los estúpidas de mis primas querer llamar la atención cada cinco segundos al novio de mi hermana.

Mi madre me matara cuando vea que me puse unos pantalones de jeans rotos de color negro con un top color azul en vez de su gran vestido color fucsia fosforescente

nunca en mi vida había visto un vestido tan feo en estos 17 años que llevo de vida

lo que daría por subir a mi cuarto en estos momentos y acostarme en mi cama mientras leo y me tomo un buen café caliente, sin duda eso sería mucho mejor a que estar aquí sentada y actuar de que todos en esta maldita casa me caen bien.

—Y como te a ido en el modelaje Amelia ? Veo que has engordado un poco en vacaciones de invierno eh —Dijo una de mi tías mientras se echaba a reír junto con los demás, en mi cara claramente se veía la indignación, estaba por contestarle pero mamá me echo una mirada de que si le faltaba el respeto me mataría

Si, modelaba. Mi mamá desde que tenía 10 años me empezó a preparar para ser alguien grande en la vida del modelaje. No era tan alta como para ser modelo de pasarela , solo soy de portadas, aún no voy a pasarelas y no creo que lo haga ya que mido 1,70, que  comparado a otras modelos si soy un poco baja

—Me ha ido bastante bien, varias empresas me han contactado para modelar para ellos —Alce mi cara con una gran sonrisa, estaba bastante feliz por lo que he logrado sin ayuda del nombre de mi familia

Los hidalgo somos una familia bastante importante para la sociedad, para todo el mundo, desde pequeña mi cara estaba en todas las revistas y lugares y apesar de haber nacido prácticamente con una cámara en mi cara, me cuesta manejar el tema de ser alguien reconocido

No me malinterpreten, amo trabajar  y ser modelo solo que a veces cansa que los paparazzi no te dejen tranquila en ningún momento

si me preguntaran mi mayor sueño definitivamente sería salir a la calle y no tener que preocuparme por que se malinterprete cada cosa que hago y digo

Además, no es nada bonito tener demasiado presión de parte de mi madre respecto a todo, a este mundo, que era lo que ella más amaba, la atención

—Seguramente te deben de llamar las empresas de los supermercados y ya te crees modelo  —habló con una sonrisa en su cara una de mi primas, quien se cree que es esta

—Eso crees? Entonces todo el reconocimiento que he estado ganando no es gracias a que afortunadamente he modelado para empresas que si las empiezo a nombrar me quedo aquí hasta mañana, Diles que me creo modelo a los paparazzi que están afuera para ver todo el odio que te llega por decir que una de las modelos más reconocida de todo Europa se cree modelo.

Me paro bruscamente del sofá, robándole la copa de las manos a mi hermana para después tomarmelo al seco y salir rápidamente de ese lugar. Me arrepiento en estos momentos de no haberle preguntado a mi hermana que tenía esa copa, odio el vino, pero al menos mi salida fue iconica, a eso me aferro.

Subo rápidamente a mi habitación, pero cuando abro la puerta de mi habitación veo como un bebé duerme en mi cama y al lado duerme una de mis primas que hace poco fue mamá.

Hay miles de habitaciones en esta mansión! Miles! Porque Justo en mi cuarto!

—Le dije que se viniera a tu cuarto un rato para que le diera de comer al bebé, estaba más cerca del salón en caso de que llore

Me doy la vuelta para encontrarme con mi madre quien luce un vestido azul marino apretado de la cintura y de ahí suelto para bajo, siempre he dicho que adoro el pelo de mi mamá. Es rubia al igual que yo, sedoso y largo

¿Destino o casualidad? - pedri González Donde viven las historias. Descúbrelo ahora