Estos tres dias habían sido una locura, debía de hacerme mil exámenes y pasaba con la fisioterapeuta para hacer ejercicios para facilitar mis movimientos de las piernas, ya que se me habían puesto débiles con el paso de las semanas en coma
me tiro al piso ya exhausta de hacer los ejercicios que me indicaban, veo como pedri esta en la puerta riéndose de mí
—Joder eres un pesado —le pongo los ojos en blanco y él se acerca a mi para cojer las muletas y pasármelas
—non scappare, non abbiamo ancora finito —me dice la fisioterapeuta que no me escape que aún no he terminado
—per favore lasciami andare, abbiamo già fatto molto oggi —yo le hago el gesto con las manos de ruego y ella solo niega con la cabeza, no me dejara que me vaya
—Se vuoi che le tue gambe non siano così deboli, dovresti fare gli esercizi, signorina Amelia.
en cierta parte tenía razón, debía de hacer los ejercicios si quería que mis piernas no estén tan débiles, quería dejar ya esas muletas
pedri me mira con una ceja alzada esperando a que le traduzca todo
—me debo de quedar a terminar los ejercicios, te busco más rato, vale?
—me quedo viéndote
yo le golpeo el hombro negando varias veces, no lo iba a dejar, que vergüenza que me viera toda sudada
bueno ya en realidad me había visto casi muriéndome así que no había mucho de lo qué preocuparme
—ya te he visto sudada rubia —el canario me guiña un ojo y yo esquivo su mirada al ponerme roja
para mi, habían pasado días después del accidente pero en realidad había pasado un mes, donde toda mi familia sufrió por mi
estar en coma es lo peor que me pudo haber pasado, el querer moverte pero no poder, no poder comunicarte aunque lo intentes con todas tus fuerzas, el cuerpo se convertía como en una cárcel, el coma es borroso y difuso
tenía sueños que no sabía si pasaban en la vida real o solo era invento de mi imaginado, mi mente trataba de encontrar sentido a lo que pasaba a mi alrededor mediante los sueños, se sentía como estar muerto pero el cerebro no se ha apagado, sigue funcionando
podía reconocer la voz de pedri apesar de que no sabía lo que él me decía, solo una vez puedo recordar lo que me dijo, cuando me pidió que no lo dejara aún que debíamos de crear muchos recuerdos más juntos
no nos demoramos tanto en terminar los ejercicios, la ayudante de la fisioterapeuta me lleva en silla de ruedas hasta mi habitación, que después de hacer los ejercicios ni ganas me dan de tocar las muletas
veo como pedri estaba sentado en el sofá con su celular, le agradezco a la chica antes de que ella se retire de la habitación
—te bañarás? —me pregunta pedri y yo asiento tratando de pararme de la silla de ruedas pero me tambaleo— venga, yo te ayudo
pedri me afirma de la cintura y la mano para llevarme al baño, en realidad podía llamar a una enfermera para que me ayudase a bañarme pero que pedri me ayude es mejor, tengo más confianza con el
me bañaría sola si no fuera porque no me puedo poner de pie si no es con muletas
—puedo llamar a una enfermera, no te preocupes canario —le digo levantando mis brazos mientras él me saca la camisa
—puedo ayudarte yo —Pedri me da una sonrisa tranquilizadora antes de ayudarme a quitarme la ropa
para mi sorpresa, en ningún momento ha soltado un comentario en segundo sentido, ni mucho menos su mirada reflejaba deseo, se veía muy concentrado en que no me cayera shampoo en los ojos y eso me causaba ternura
yo me rio al verle la cara y el me saca la lengua para después pasarme la mano con shampoo en la boca
—Pedri que puto asco—le digo yo limpiándome la boca con la mano mientras lo miraba mal, él solamente se reía mientras me enjabonaba el cuerpo
no nos demoramos tanto, con cuidado pedri me ayuda a salir de la ducha envolviendo mi cuerpo en una toalla, tratando de no lastimarme me ayuda a vestirme
—lista —me dice pedri dándome un beso en la frente, me ayuda llevándome hacia la cama
—porque tengo las pupilas más dilatadas de lo normal? —le preguntó a pedri después de haberme visto en el espejo del baño
—es normal por lo que me dijo la doctora, al igual que el dolor de cabeza que sentías ayer
ayer había sido de lo peor, la cabeza no me paraba de doler, cada vez que pensaba que se me quitaba volvía y empeoraba, no me dejo dormir en toda la noche, por lo que me dijo pedri hoy en la mañana me despertaba gritando del dolor que sentía
—agh ni lo nombres que no quiero que vuelva
habían varios efectos secundarios de mi lesión cerebral, como el dolor de cabeza, vomitos, aturdimiento, confusión, visión borrosa o ojos cansados, problemas con la memoria entre miles de cosas más, por lo que me dijo la doctora eso se me pasaría con las semanas
me darían de alta en una semana más, ansiaba con todas mis ganas poder ir a casa, a barcelona
•Pov Pedri
Me levanto apresurado al escuchar como Amelia gritaba, me siento a su lado tratando de tranquilizarla pero ella me empuja y en su cara lo único que veo es confusión
—tú quien eres? aléjate de mi, ayuda porfavor! que hago aquí! donde está mi hermano? quiero ir a casa
terror, eso es lo que sentí cuándo escuche el "tú quien eres", apreto el botón rojo para que lleguen las enfermeras
me alejo cuando varios enfermeros llegan y la a sujetan para poder inyectarle haciendo que Amelia caiga rendida en la cama otra vez
—que le ha pasado? no se acordaba de mi —le digo al enfermero y este me mira raro al ver como le hablo en español, gracias a dios una de las enfermeras si sabía y me respondió
—es normal lo que le pasa, puede a veces olvidar las cosas, tener problemas con la memoria, haciendo que se comporte con inquietud y confusión
—se pondrá bien? —le digo con miedo de que no me recuerde
—si, ya mañana amanecerá mejor, cualquier cosa que pase nos llama
yo le asiento antes de cerrar la puerta nuevamente, suspiro antes de ir al lado de Amelia y acostarme con ella
esto no iba a ser fácil, pero no la dejaría sola
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Nota<3 Gracias por los 3k de vistas, hoy creo que subiré otro capítulo mas 🫶🏻🫶🏻
