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Christopher admiraba el rostro tranquilo de WooJin durmiendo, después de haber estado por horas entre sus brazos, creía que era importante hablarle de él pues creía que WooJin, de alguna manera, solo le gustaba lo que hablaban de él.
Poco a poco el Alfa fue abriendo sus ojitos, Kim se sintió afortunado de que lo primero que vio al despertar fue la carita somnolienta de Christopher.
—Buenos días, cariño. —
La voz algo grave de WooJin exaltó a Christopher, quien se encontraba perdido en sus pensamientos mientras acariciaba el pecho del mayor. Bang elevó su mirada, notando que Woo le miraba con gran cariño y dulzura, le fue imposible no sonreír.
—Buenos días, hyung. —
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Ambos chicos se miraban el uno al otro fijamente, estaban sentados en la alfombra de la habitación del Omega y en medio de ellos estaban algunos peluches del mismo. WooJin lo miraba con algo de nervios, el omega se miraba tan serio que temía por un rechazo definitivo.
—WooJin, yo no soy quien tú crees. —
El mencionado ladeo su cabeza y soltó una suave carcajada pensando que el menor bromeaba, pero al ver que no le acompañaba en las risas volvió a ponerse serio.
—¿qué quieres decir? —
Christopher suspiró con pesadez, jamás había contado sobre si mismo a alguien, pues sus mejores amigos lo conocían por Felix, su primo, y él se había encargado de advertirles sobre su pasado.
—No soy el chico tierno y feliz que tú y los demás creen. La mayor parte del tiempo mis pensamientos son malos. —
Antes de continuar levantó su mirada del suelo hacia el mayor, pero se sintió tan cohibido que no pudo soportar la mirada intensa de Kim y volvió a bajar la vista.
—Mis padres me abandonaron en una playa cuando estaba pequeño, viví en más de una casa hogar la mayor parte de mi vida hasta que la familia de Felix me encontró. —
Su corazón comenzó a latir desenfrenado, sentía los ojos de Kim clavados en él y al parecer quería hablar, pero él no lo dejaría.
—No soy alguien alegre y fuerte, soy serio y torpe, muchas veces vuelvo a ser débil y —
Su voz temblorosa fue interrumpida por la del contrario.
—Está bien Chris, no tienes que seguir. —
WooJin no tardó en acomodarse a un lado de Christopher para abrazarlo con fuerza, dejando que el Omega se deshiciera en sollozos ocultándose en su pecho.
—Hemos avanzado mal, empezamos casi por el final y no me gusta. Quiero hacer las cosas bien contigo, Chris. —
El Alfa sintió como el Omega asentia a sus palabras.
—Tenemos toda una vida para conocernos, ¿si? y creo que es hora de comenzar con un "nosotros." ¿qué dices, Chris? ¿quieres comenzarlo? ¿quieres ser mi pareja?—
En ese instante el mundo del Omega dejó de avanzar, sus ojos estaban abiertos lo más que podía. Se esperaba de todo menos esa pregunta.
Poco a poco la felicidad comenzó a inundar su pequeño débil cuerpo, con rapidez levantó su cabeza y, sin pensarlo mucho, unió sus labios con los del Alfa.
¿Está de más decir que el Omega aceptó encantado?
Y es que, ¡mañana era el baile de san Valentín! ¿Lo mejor? ¡Iría con WooJin siendo ya pareja!
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