O9

183 27 8
                                    

El llanto de Doyoung no cesó hasta que pasó un buen rato. Johnny no sabía exactamente cuánto tiempo estuvieron allí pero lo único que quería era que acabara pronto. El cuerpo de Doyoung se sentía tan frágil y pequeño entre sus brazos, parecía tan fácil de romper. Recordó ese día en que lo había visto por primera vez. Había una gran diferencia entre ese entonces y el ahora. Johnny se sentía mucho más involucrado con Doyoung a pesar de las pocas veces y el poco tiempo que habían hablado, ya no podía simplemente irse y fingir que no lo había visto.

Acarició el cabello oscuro del chico buscando tranquilizarlo mientras los sollozos de Doyoung eran cada vez más apagados y cortos. Johnny tenía parte de su camisa húmeda pero realmente no podía importarle menos.

Cuando por fin Doyoung ya estaba mucho mas calmado fue que éste se alejó abruptamente del cuerpo de Johnny, limpiando los restos de humedad de su cara con la manga de su ropa. El más alto recordó que cargaba, un pañuelo en uno de los bolsillos de su blazer así que lo sacó y se lo entregó a Doyoung.

—¿Cómo te sientes? —tal vez no fue la pregunta más oportuna para un momento como ese, claramente Doyoung no se sentía bien y pudo confirmarlo cuando éste ni siquiera le respondió y, en cambio, se quedó observando hacia ningún punto en específico.

Un gran silencio se hizo luego. Johnny, incómodo, no tenía idea de qué hacer, Doyoung se veía perturbado, con la mirada perdida. Tenía los ojos hinchados, la punta de la nariz rosada y congestionada y Johnny tampoco pudo evitar notar la gran marca roja en una de sus mejillas como si hubiese sido golpeado en esa zona.

John llevó impulsivamente su mano para acariciar la piel con cuidado, tratando de entender cómo es que alguien podría lastimar a Doyoung de ésta manera. No había que pensar demasiado para darse cuenta que seguramente el responsable había sido el padre del chico.

Johnny sólo se sintió aún más impotente.

Doyoung se puso tenso al recibir el toque ajeno, reaccionó alejando la mano de Johnny con brusquedad.

Esto no hizo más que ocasionar que la incomodidad entre ambos aumentara. Johnny se sintió tonto y avergonzado por el rechazo.

—¿Por qué estás aquí? —fue lo que Doyoung le preguntó.

Johnny, que todo este tiempo estuvo hincado sobre sus rodillas, se sentó en el piso frente a Doyoung quien lo miraba atentamente.

—Supe lo que sucedió con tu padre.

Los ojos afilados del chico escrudiñaron a Johnny de una manera que le causó escalofríos. Doyoung tenía una mirada bastante intensa.

—¿De qué hablas exactamente?

Johnny pestañeó un par de veces, tenso.

—Sólo sé que discutieron y que él te eximió de la escuela.

Doyoung presionó el pañuelo de tela que aún tenía en sus manos mientras apartaba la mirada. Los chismes corrían muy rápido.

—¿Y qué con eso? ¿Aún así tuviste que venir a buscarme? Creí que habíamos quedado en que no volveríamos a hablar.

Johnny ni siquiera estaba sorprendido por la frialdad con la que Doyoung se dirigió hacia él. Soltó un risilla sarcástica.

—¿Entonces debería irme? —le preguntó en tanto Doyoung aún seguía sin mirarle.

—Sí —contestó.

—¿Estás seguro?

—Sí, quisiera estar solo.

Johnny no compraba ninguna de esas palabras, por supuesto que se dio cuenta de que Doyoung estaba mintiendo.

—O sea, que sólo me utilizaste como un pañuelo mientras llorabas y ahora quieres deshacerte de mí —habló Johnny con un deje divertido.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 03, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

prince || johndoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora