El Avatar y la Maestra Agua

CAP 38 - Planes Nuevos

El recorrido por el pueblo fué genial, era muy pintoresco, tenía comida deliciosa y muchas cosas impresionantes y hermosas. Aang seguía un poco confundido, no pudo encontrar al anciano por ningún lado, incluso preguntó y nadie había visto a un anciano con esas características.
Zetrik se enamoró de Toph, pero nada iba a ser posible ya que nunca se volverían a ver.
Llegaron a la casa al atardecer, bajaron tranquílamente de los bisontes, se metieron, dejaron todo la que habían comprado y empezaron a preparar la cena, después se fueron a dormir.
Los chicos fueron visitando muchas playas y pueblos muy hermosos.
Una semana después.

Los chicos habían llegado de haber visitado una playa muy hermosa, ya era noche y era la hora de la cena.

Katara: Oye Suki - dijo mientras picaba unas verduras

Suki: Dime Katara - sonrió

Katara: No, mejor olvidalo - se volteó

Suki: Ven, vamos a la sala - la tomó de la mano - chicos, que creen - les dijo

Aang: ¿Qué? - preguntó destraído

Suki: Qué las chicas estuvimos hablando y les toca preparar la cena - sonrió

Azula: ¿Nosotras decidimos eso? - preguntó

Suki: Sí, últimamente hemos estado haciendo la cena nosotras, y creemos que ya es hora de que ustedes la hagan - sonrió

Sokka: Pero nosotros hicimos el almuerzo - argumentó

Suki: Sí, y como les quedó delicioso también queremos que hagan la cena - dijo

Aang la volteó a ver un poco molesto desde el sillón

Aang: Pero ese es trabajo de chicas -

Suki: Claro que no, no seas machista - dijo mientras cruzaba los brazos

Zuko: Vamos Aang, además les podemos dar puro pan con té - le susurró lo último

Aang: Jajajaja, es cierto, no se preocupen chicas, nosotros nos encargamos - se levantó

Suki: Ahora sí, ven - jaló a Katara

Suki llevó a Katara a la sala, se sentó frente a ella y la miró atentamente.

Suki: Y bien, que sucede - sonrió amablemente

Katara: Bueno... Yo... -

Suki: Dilo sin miedo - la miró fijamente

Toph: Sí Katara, dilo sin miedo, que al cabo no está ni Azula ni el metiche de su hermano - entró

Katara: Toph ¿que haces aquí? - preguntó

Toph: Pues no me quiero perder como le vas a decir a Suki que te gusta su hermano - se rió

Katara empezó a temblar de los nervios, ¿porque rayos Toph era tan indiscreta? Suki sólo sonrió, ella realmente se lo esperaba.

Katara: Suki yo... - dijo nerviosa

Suki: Jajajajajaja, - se rió levemente

Katara se le quedó mirando sorprendida ¿porque se reía? Acaso no le daba coraje o algo por el estilo?

Katata: Qué pasó? - preguntó

Suki: Me alegra tanto que me tengas la suficiente confianza como para contarmelo - sonrió

Katara: ¿No estas molesta? - preguntó

Suki: Jajajaja, ¿porque habría de estarlo? - preguntó feliz

Katara: No lo sé - levantó los hombros y sonrió

Suki: Tranquila, no tienes que preocuparte por eso - sonrió