Bad Luck Ꮺ ࣪˖ Ziall

◟𓏲࣪O96

— ¿Qué le pasa? — preguntó Louis, su mirada estaba sobre Moon, Liam se había dormido apoyando su cabeza sobre la camilla, su mano aún tomaba la del mayor.

— Desde hace días que no quiere comer, al principio le decía que lo llevaría contigo y funcionaba, después... Dejó de hacerlo.

>> Y es la primera vez que cambia a su forma humana en días, Harry me dijo que hace eso cuando está muy triste.

Louis asintió, él también lo sabía.

— Kai me dijo que no intervenga y Zayn nos dio órdenes claras de no dejar que se comuniquen contigo.

Louis frunció el ceño con molestia, sabía que su amigo quería lo mejor para él, pero no era justo para los pequeños, él era lo único que conocían y era mucho más que un ex novio, era quien los había rescatado, era quien los cuidó y los hizo valorarse, era una figura paterna muchas veces y, antes que nada, siempre los iba a cuidar, y si estaban mal por no hablar con él, lo mínimo que podía hacer era llamarlos.

Le parecía raro que no lo hayan hecho ellos esos días, ahora sabía el por qué.

— Mis bebés... — murmuró Louis, suspiró de forma pesada, y tomó su teléfono, marcó el número de Harry, el tigre tardó un buen rato en atender.

— ¿En serio eres tú? — dijo Harry, al ver la foto de Louis en la llamada no se lo había creído — N-No creí que llamarías de nuevo...

— Soy yo, nene, estoy con Liam aquí — murmuró, dejó caricias en el cabello del dormido híbrido con cariño — Se ha dormido.

— Le cuesta dormir, Louis — murmuró el tigre — No sé cómo hacías, a mí no me sale, apenas logro que duerma cuando está demasiado cansado... Te extraña más que nadie.

Louis estaba triste de saber que todo lo que les ocurría era por su ausencia, no podía marcharse del hospital sin más, pero sí, aquello lo llenaba de ganas de llegar a casa y darles atención.

— Lo siento, lo sentimos — dijo Harry.

— Hazza, está bien — dijo Louis, por lo bajo — En serio, no es necesario.

Escuchó al tigre sorber su nariz.

— Y-Yo... Nosotros queremos estar bien contigo, Lou, y aunque no nos quieras de nuevo, nosotros sí, porque... No tenemos a nadie como tú en la vida y nunca lo tendremos.

— Harry...

— Siempre nos diste más de lo que podríamos devolver y entiendo que no te cuidamos... Al final no dimos lo que tú siempre diste, y lo sentimos por eso.

— Hazza, ya, para.

— ¿Podrías explicárselo tú a Leeyum? Él no sabe lo que significa "terminar" en realidad.

— Me di cuenta, sí... Intentaré hablar con él.

— Si... — Harry sorbio su nariz de nuevo — Gracias.

— ¿Tú cómo estás?

— N-No es la primera vez que me dejan... — murmuró — C-Creo que te dije algo de mi padre y cuando me dejó... Bueno, esto es igual, pero... No creí que pasaría de nuevo y-y tampoco quería que pasara contigo, Louis.

— Harry, no los voy a dejar como hizo tu padre, que te dejó en un circo y se fue, vas a estar en mi casa, porque mi casa es tu casa y te voy a cuidar igual... De cualquier forma, yo los adopté, ustedes no tuvieron la culpa de que yo los adoptara y tengo que ser responsable de ello, puedes estar tranquilos.

— En verdad... Te queremos mucho.

— Yo también los quiero, Hazza — murmuró, con una sonrisa — Haz que Liam se bañe, y péinalo, cuando vuelvan a casa, tú tampoco te descuides, y ten tu cuarto ordenado.

— Si, Lou.

— Iré a casa pronto.

— Eso espero.

— Adiós, Hazza.

— Adiós.

Cortó, sintiéndose mal por el tono tan melancólico de lo que en un momento fue un alegre, cómico y confundido tigre.

Conocía al chico lo suficiente para saber que estaba en un punto donde se había rendido, Harry varias veces le había dicho que poco y nada podía hacer él en verdad, y que no importara cuántas veces deseara algo, solía ponerse tan pesimista de pensar que esas cosas nunca pasarían, así que simplemente se rendía, era su forma de sentir las cosas.

Liam en cambio era diferente, él demostraba su sufrimiento, buscaba que alguien lo consolara y ayudara, él simplemente estaba perdido y necesitaba de alguien, era bastante dependiente de los demás.

Louis era el punto medio entre ambos, no los iba a abandonar, estaba en una Organización que cuidaba a los híbridos, sería un hipócrita y merecería una expulsó si los dejara, aunque nunca se le ocurriría, sabía que iba a ser difícil seguir sólo como su tutor responsable.

— Moon... No sé qué hacer — murmuró el ojiazul a la platinada, Louis tenía la mirada sobre el híbrido de conejo, que dormía con lágrimas en sus mejillas.

— Es decisión tuya, Louis... Pero yo creo que el corazón es quien quiere el mayor bien para uno mismo, al fin y al cabo, yo haría lo que el corazón me dijera.

Antes de que pudiera pensar las palabras, la puerta de la habitación se abrió, Zayn sonrió al entrar, pero su sonrisa se borró al ver a Liam, frunció el ceño y miró a Moon de forma acusadora.

— ¿Qué hace aquí? Te dije que no lo trajeras.

— Dijiste que no dejara que lo llame — se defendió la menor.

— ¡Está más que claro que sí no tiene que llamarlo menos puede venir!

Moon apretó la mandíbula para evitar gruñirle.

Los gritos del moreno despertaron al híbrido, quien frotó sus ojitos mientras enfocaba la vista en Zayn, sus ojos se abrieron de más, con miedo, al saber que se enojaría mucho, así que tomó la mano de Louis con fuerza.

— Zayn — Louis habló con tranquilidad — No tienes porqué gritar aquí, y tampoco eres alguien para ordenarle a otras personas.

— Es por tu bien — dijo Zayn, miró un momento a Liam antes de volver a su amigo — Te hace mal que estén aquí, te hace mal que hables con ellos.

— Ellos también están mal — dijo Louis.

— Pero tú eres mi amigo y voy a ponerte primero antes que ellos.

— Zayn, son niños — Louis habló más alto de lo normal — Y sí, por más que yo necesite un tiempo, ellos me necesitan, soy su padre, no tienen a nadie más que a mí y tú parece que los tienes bajo una monarquía autoritaria — Louis negó — No puedes tratarlos así.

Zayn no tenía palabras, sabía que su amigo tenía razón y su tono había sido muy contundente como para agregar algo.

— Li — llamó Moon, en sus manos, tenía el celular con los mensajes de Kaia — Me dicen que Hazza te necesita, está abrazando a su pelota mientras llora.

Liam asintió, levantándose de la silla, estaba más delgado que antes y Louis lo había notado, el híbrido miró sus manos unidas con cierta tristeza.

— Volverás si le haces caso a Moon — dijo el ojiazul, encontrando miradas con el conejo — Pórtate bien, Liam.

El híbrido asintió, dudó un momento hasta que finalmente soltó la mano del mayor y fue junto a la platinada para irse.

— Hasta pronto — dijo Louis, le sonrió, aunque tenía ganas de llorar.

— Hasta pronto — murmuró Liam, para retirarse de la habitación.

Antes que nada, Liam tiene 19, Harry 20, y Louis 23.

Ya a esta altura se sabe que los híbridos maduran tiempo después que los humanos, por lo que aún a esa edad, siguen siendo unos niños, más que nada Liam.