Mi turno al bate (Colt x Bibi)

Noche de chicos primera parte

Narra Sandy

Luego de que Brock se retirara me quede pasando el rato con Surge, al principio estaba algo cohibido, ya que no había tenido muchas oportunidades de hablar con el antes, pero mientras más hablábamos más a gusto me sentía

Eventualmente tuvimos que interrumpir nuestra caminata cuando llegamos a una tienda o más bien una licorería, instintivamente me puse un poco nervioso ya que era la primera vez que estaba en un lugar así; además, si Tara se enteraba recibiría un enorme y aburrido sermón

-Oye Surge

-¿Si?

-¿Estás seguro de esto?

-¿Seguro de que? ¿aún eres menor?

-No, me refiero a que eres el protector de Supercity, ¿no crees que sería un poco raro ver a un robot super héroe comprando alcohol?

-De hecho, entiendo tu punto

-¿Entonces que haremos?

-Simple, entraras tu y yo te esperaré en una esquina

-¡¿Qué?! Y-yo no puedo hacer eso

-Vamos viejo, ya tienes diecinueve años ¿Qué es lo peor que te podría pasar? ¿Qué la cajera se te insinué? ¿Qué tu hermana se entere y te dé un par de nalgadas?

-No es eso, es solo que…

-Vamos, nada malo va a pasar, yo te apoyo desde aquí, solo entra y compra cualquier cosa que te parezca apropiada

-B-bien, hagámoslo

Di un par de pasos, pero antes de tener la oportunidad de arrepentirme o poder decir algo, Surge me empujo dentro de la tienda y salió corriendo antes de que alguien lo reconociera

Una vez dentro, visualice todo el negocio; lo primero que llamo mi atención fue que el local era atendido por un hombre que aparentaba estar en mediados de sus cincuentas o tal vez un poco más, al darse cuenta de que lo estaba mirando el hombre frunció el ceño y me lanzo una mirada asesina que me aterró hasta el punto de tener que desviar la mirada y dar media vuelta para huir de esos ojos, que habiendo visto bien, se asemejaban a los de una serpiente ponzoñosa

Completamente aterrado por el viejo me dispuse a explorar los interiores de la tiende, buscando alguna bebida interesante lo primero que capto mi atención fue una botella de vodka con hojuelas doradas, pero al fijarme en su precio decidí ignorarlo; además parece algo que solo las chicas lo toman, luego vi una botella de Jack Daniels, pero esa es una bebida de posers, así que también dejé de lado esa bebida

Un par de pasos después vi una botella con forma de oso que contenía brandy de algodón de azúcar, por un momento pensé en ignorarla y seguir buscando, pero la tentación fue más fuerte que mi raciocinio y terminé tomando la botella

Apurado por mis nervios y la insoportable mirada asesina del viejo sobre mí, tome dos botellas de ron y vodka al azar y me acerque al mostrador donde se encontraba el viejo para pagar y salir de una vez

-Q-quiero todo esto p-por favor

Sin decir una palabra el hombre comenzó a escanear las botellas sin separar su mirada de mí, yo atiné a desviar la mirada para ocultar mi incomodidad y ahí fue cuando vi una de las cosas más extrañamente provocativas de mi vida

Se trataba de una botella de vino ¡con una serpiente adentro!

Motivado por la extraña atracción hacia la bebida, reuní el valor suficiente y le pregunté al dueño

-Oiga señor… ¿Qué es esa cosa del estante? – cuestione, tratando de fingir seguridad

-¿Eso?  - pregunto, obviamente refiriéndose a la botella que contenía a la serpiente