¿HETEROSEXUAL? MEWGULF ADAPTACIÓN FINALIZADA

Capítulo Nueve

Historia Original de LYSDijoElRM

GULF

—Lo primero que debes hacer para llamar su atención, es no llamarla para nada.

—Uh... ¿Qué?

—¿Quieres que ella te note?
Pues desaparece de su vista, no te hagas notar. Y cuando
ella vea que no estás ahí, ella
verá que no estás ahí.

—¿Quieres que use psicología
inversa con ella? –me dio
gracia.

—Su cabecita es inferior,
funcionará.

—Sí, no me agrada mucho que hables así de ella. Pero en sí, ¿cuál es el segundo paso?

—No hacer esto que hiciste.
Restale importancia a ella,
prestale más atención a
alguien más.

—¿Cómo?

EI desvío su mirada hacia
atrás nuestro, voltee también y ahí venían los otros dos.

—Sólo sígueme el juego –me
codeó.

—¡Chicos! Trajimos la comida
se pararon delante nuestro.

Ella me dió mi hamburguesa.

—Uh, Yaya, ¿Quieres sentarte? –me levanté y ella se iba a mover hacia mí, pero
Mew me jaló de nuevo al
asiento.

—No, quédate, estábamos
hablando. Mejor muévete
hasta la punta y les hacemos
lugar.

—Oh, bueno, también está
bien. –concedió Yaya. Así que, terminé en el borde, con Mew a mi lado, y luego estaban Yaya seguida de Mike.

—Bueno, yo voy a empezar.
–dijo Mike, impulsandose un
poco para acabar apoyando
su trasero en el respaldo sentándose ahí, con sus pies
sobre el asiento. Comenzó a abrir la envoltura de su
hamburguesa.

—Y yo también.  –ella imitó
todo su accionar.

Me los quedé viendo. Sí, la idea de Mew funcionaba, pues Yaya me ignoraba totalmente mientras que yo no podía dejar de notarla.

—Ah, esperen, tendría que haber sido al revés.

Al parecer, Mew notó como me sentía porque me distrajo rodeando mis hombros con su brazo.

—¿Gulfie, no vas a abrir eso?
Tengo hambre.

—Pero si te ofrecimos y no
quisiste –a pesar de no haber
estado mirándonos hace un
momento, ahora ella lo miraba con el ceño fruncido.

—Es porque quería comer con él. –aclaró.

—¿Ah, okey?

Abrí la envoltura y saqué la
hamburguesa de ahí.

Él no esperó ni que la
acomodara para agacharse
hacia ella y darle un gran
mordisco.

Al levantarse, me miró fijo y
con una sonrisa, comenzando
a masticar.

Bien, lo entendía, este chico
buscaba provocar.

—Come tú también. –movió
la mano con la que yo sostenía la comida y la llevó a mi boca.

Mordi.

—Wow, está rica.

—La pedí con extra queso
porque sé que te gusta así. –
escuché a Yaya, pero cuando iba a mirarla, Mew sostuvo mi mentón y me retuvo con él. Pasó su pulgar por mi comisura labial.

—Tienes un poco de sésamo
ahí. –la quitó y se llevó el
pulgar a su labio.

Okey, okey, okey, okey, okey,
Gulf, no es momento para un pánico gay, por favor, no temas, él sólo juega. Sólo sigue su juego como te lo dijo.

—Ni... Ni siquiera sé porqué le ponen esas semillas al
pan. –fue lo único que pude
comentar.

Él volvió a acercarse a mí y se apoyó sobre mi hombro llevando de nuevo  la hamburguesa a su boca.

Otra vez, mordió una gran
parte. Este chico tenía la boca
muy grande, terminaría por
dejarme sin nada.

Tragué saliva —¿Esto
realmente es necesario? –le
susurré.

Se acercó a mí oído y dijo: —
Ahora ve cuanta atención te
está prestando.

De reojo pude ver cómo su
mirada estaba en nosotros,
pero no parecía cómoda,
tampoco miraba con asco o
algo así, más bien era sería.

Incluso Mike nos miró por un momento y luego sólo rió,
continuando con su comida.

Pero ella seguía viéndonos.

Me miraba.

Al fin me miraba.