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Mike estaba tumbado en el piso mientras revisaba su celular. Su semana de exámenes había terminado, por suerte logró aprobar. Ahora se encontraba disfrutando de una semana de vacaciones, todo porque dos profesores generales se enfermeraron y tenían miedo de que contagiaran a los demás estudiantes.

Hasta en los antiguos días que Mike no tenía clases se la pasaba aburrido y Trollino aprovechaba esos días para trabajar, así que se quedaba solo la mayoría del tiempo.

— Joe que aburrido.. —Habló dejando el celular a un lado— ¡Ya sé! Han pasado días desde la última vez que jugamos.

Buscó entre sus contactos un nombre en específico y le mando un mensaje, necesitaba a alguien con quien divertirse y pasar un buen rato.

— ¡HE GANADO! —Aclamó Mike dando saltitos en la cama y al final tirándose sobre ella

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— ¡HE GANADO! —Aclamó Mike dando saltitos en la cama y al final tirándose sobre ella.

— ¡ME CAGO EN-! —Dijo notoriamente molesto el castaño con una sudadera roja, cruzado de brazos y sentado observando el tablero de Ludo en el suelo frente a él.

— Era obvio que ibas a perder si estabas contra ¡El severísimo Mike! —Aludió sentándose sobre la suave cama.

— Ajá lo que tu digas... Tramposo —Le mostró la lengua Raptor escuchando un gruñido del contrario.

— No se de que hablas ¡Mal perdedor! —Agarró entre sus manos la almohada más cercana que tenía y se la arrojó.

— ¡Seras de sucia! Me mandaste a traer agua, algunos dulces entre otras cosas distrayéndome durante el juego para que movieras tus fichas más adelante y las mías las retrasabas. Además ¿¡Cómo le haces para sacar seis a la primera que tiras el dado!? —Reclamó molesto Raptor, unos minutos más y se lanzaría sobre él.

Por supuesto, Raptor también era tramposo algunas veces. Pero si Mike no se daba cuenta no pasó nada y él ganó limpiamente.

— Oh, al fin te das cuenta inútil. —Sonrió travieso Mike al ser descubierto— Digamos que tras años de practicar magia aprendí muchos trucos.

— Ay Mike...a veces admiro a Trollino por soportar tanto tiempo contigo y no tirarse por la ventana... —Suspiro cansado revolviendo su cabello tratando de relajarse.

— Estaba a punto de hacerlo, pero lo detuve ¡Muajaja! Si él no está ¿Quién me cuidará? Trollino es el único calificado para ello. Aunque no me ame, yo si lo hago y eso jamás cambiará —Ante lo último no pudo evitar sonrojarse.

— Como digas, mejor vamos a jugar —Suspiro por lo bajo, que tontos y distraídos eran sus amigos.  Si tan solo supieran que ambos se atraían.

Después de unas rondas más que resultaron en un empate. Ya casi era de noche con ello Raptor se tuvo que ir, se despidió y se marchó.

Luego de una hora se escuchó el sonido de unas llaves y con ello la puerta abrirse. El menor sabía exactamente quien era.

— ¡Mikeee! ¡Ya llegué! —Avisó desde la entrada una voz familiar.

Mike se fue corriendo a la entrada, dispuesto a saltar sobre su Dueño y abrazarlo. Pero algo lo detuvo y se quedo estático frente a él. Trollino apenas notó la acción protegió a aquella cosa que tenía cargada y acurrucada entre sus brazos.

— ¿EH? ¿QUÉ HACE CON UN GATO? —Preguntó el castaño alejándose y poniéndose en posición de pelea un tanto extraña.

El azabache tenía entre sus brazos un pequeño gatito de color blanco con algunas manchas cafés.

— Me lo encargo un amigo, se quedará con nosotros unos días. —Dijo serio el azabache tomando asiento en el suelo, colocando al felino sobre su regazo.

El gato parecía bastante tranquilo, rápidamente se acomodó sobre las piernas del mayor. Mike no pudo evitar soltar un gruñido al verlo.

— Pero Dueño Trolli.. —Igualmente el castaño se sentó frente él, conforme estaba sentado parecía ¿un perrito?. Mientras miraba fijamente al intruso.

— Lo sé, no eres de llevarte bien con los gatos. ¿Podrías hacer una excepción? Le debía un favor y no me pude negar. —Trato de persuadirlo el azabache.

— Si fuera un perrito no habría problema...aunque creo que si. ¡Pero no serían tantos como los de un gato!.

— Yo me haré cargo de él, así que no veo el problema. Sabes que igual te daré atención —Sonrió mirándole cariñosamente— Ven aquí.

— Humm...S-sigo sin estar de acuerdo.

Resiste Mike, Resiste las tentaciones. pensó internamente.

— Entonces... —Se levantó con el felino en brazos— El gatito y yo tendremos que buscar un nuevo hogar para nosotros ¡Vámonos gatito!.

— E-espere...¿Me está abandonando?..

— Para nada, solo cambiaré de casa unos días. Ya que ALGUIEN rechaza a nuestro invitado.

— Joee ¡Esta bien! Que se quede esa bola de pelos aquí —Finalmente Mike aceptó y se fue resignado.

— Ven gatito, te mostraré tu momentáneo y nuevo hogar —Sonrió caminando por el pasillo.

Trollino sabía del pasado de Mike, por lo que conocía cuál era el tonto motivo que le impedía poder establecer una sana relación con los gatos;

También, era conciente que Mike no era un animal, pero en ocasiones parecía tener los instintos de uno. Más exactos de un perrito.

Era muy activo, ciertamente Trollino era prueba de ello. No entendía como Mike podría tener tanta energía durante todo el día. ¿Quizás se debía al chocolate? Quien sabe.

Se aceptan ideas de nombres para el gatito :D

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Se aceptan ideas de nombres para el gatito :D

❒ | 𝐌𝐢 𝐃𝐮𝐞𝐧̷̃𝐨 𝐩𝐞𝐫𝐯𝐞𝐫𝐭𝐢𝐝𝐨. [Mikellino]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora