- NISHINOYA ENAMORADO -

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Quién sabe cuántas horas pasaron metidos en el agua, peleando, jugando con una pelota de playa, hablando, lo único que sabemos es que el sol ya se estaba escondiendo. Los chicos empezaron a salir de a uno, el frío ya los estaba poniendo débiles y tanto nadar los había agotado.

— ¡Ay! — gritó Oikawa.

— ¿Qué pasó? — Akaashi llegó hasta él preocupado.

— Mirá mis manos, parezco una vieja. Por Dios ¡que horror! — Oikawa se miraba las manos horrorizado y Akaashi lo empujó por haberlo asustado soltando una sonrisa.

Los doce se juntaron en el lugar que habían proclamado como suyo y se sentaron mojados en la arena con los estómagos vacíos y rugiéndoles por el hambre.

— ¿Y si compramos unos churros? — Hinata tiró la primera piedra. Todos hicieron sonidos extraños de afirmación al mismo tiempo.

— Pff — Kageyama se burló. Hinata se dio vuelta confundido.

— ¿Qué pasa? — lo encaró. El resto miraba la escena expectante.

— Yo..eh, nada. — Kageyama no tenía palabras, no sabía porque se le había burlado, ya era costumbre, pero el pelinaranja ya no respondía con una sonrisa como antes, ahora era indiferencia y eso le dolió.

— Bueno, yo voy — Nishinoya se paró y abrió la mano para juntar los billetes. Algunos resoplaron.

—Te acompaño — Tanaka se paró a su lado y Noya le sonrió, nunca le fallaba.

Los dos amigos fueron a recorrer la playa en busca de una persona que vendiese churros. Ya era un poco tarde y no había mucha gente en la playa, así que no tardarían en encontrar a alguien. Caminaron alrededor de cinco minutos hasta que una persona apareció.

— ¡Ahí! El de gorro negro— dijo el pelado y los dos se acercaron corriendo a la persona que los vendía.

— Disculpe, nos— Nishinoya enmudeció al ver a la persona que se escondía tras la gorra. Una preciosa chica se dio media vuelta para prestarle atención a sus nuevos clientes. "wow, que hermosa" Nishinoya quedó embobado con tanta hermosura. La belleza que tenían en frente, con el pelo negro recogido y unos ojos verdes deslumbrantes les sonrió.

—¿Si? ¿qué quieren? — la chica posó los ojos en el más bajo de los dos, eran casi de la misma altura y se sintió satisfecha. Nishinoya se puso colorado como nunca antes, "me está mirando", el corazón le iba a mil y no podía pensar con claridad. Tanaka veía la escena confundido y molesto.

—Sí, dos docenas de churros por favor — pidió Tanaka entregándole el dinero. La chica de los ojos verdes se dio la vuelta para hacer su trabajo. 

Noya observaba cada movimiento en cámara lenta, solamente le faltaba la música melosa de fondo y podríamos decir que estaba en una película romántica. Para su decepción eso no duró mucho, la chica les entregó el pedido y los saludó mientras se alejaban.

— Vuelvan cuando quieran — "volver.." pensaba Nishinoya mientras no dejaba de mirarla. Casi tropezó con un nene que corría por ahí por estarla mirando desde lejos, la pelinegra vio la escena y empezó a reír haciendo que Nishinoya se pusiera aún más colorado, por la vergüenza de haber sido descubierto mirándola tan descaradamente y por casi haber atropellado a un nene chiquito.

— Me parece que el enano se acaba de enamorar — Tanaka cortó la tensión burlándose de él.

— ¿Qué? ¡No! ¿qué decís? — no dijeron más hasta que llegaron al lugar donde estaban todos.

— A que no saben qué pasó — Tanaka ya quería dar las buenas nuevas, tal vez para no ser el único que pueda burlarse de su amigo, le gustaba molestarlo, así era su relación.

— ¿Qué pasó? — preguntó Kenma en nombre de todos, el resto estaba muy ocupado en comer.

— Se nos enamoró el nene — dijo revolviendole el pelo a Noya. El teñido lo miró enojado y dijo:

— ¡Mentira!, es solo que... — enmudeció arrepentido y cabizbajo.

— ¡Es verdad! — soltó Hinata apuntándolo sorprendido. Los chicos empezaron a molestar a Noya, haciéndole caras y señas, le cantaron canciones tontas, y le hicieron jodas que solo los chicos de primaria hacían. 

Todos rieron pero al poco tiempo se olvidaron del tema, pasando a hablar sobre otra cosa. El único que no podía olvidarse de lo sucedido era Nishinoya, lo único en lo que podía pensar era en esa chica, y en volver a verla el día siguiente. 

MÁSCARAS [ bokuaka ][✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora