Love Songs - MewGulf

Luna

Luna, tu que lo ves, dile cuanto lo amo.

Porque no puedo dejar de pensar en él.

Luna, tu que lo ves, dile cuanto lo extraño.

Porque quisiera tenerlo a mi lado y abrazarlo.

Se que él te contempla igual que yo, ya que así lo conocí.

Ese tranquilo día que salí a ver la luna a la azotea del edificio y el estaba ahí, con su hermosa piel pálida siendo acariciada por los rayos de tu luz, su dulce aroma a chocolate me envolvió y a pesar de ser un alfa, no le tuve miedo.

Me dedico una tímida sonrisa y me dijo su nombre. El nombre que no puedo sacar de mi mente.

Mew. Mew. Mew.

Mi mente se dedica solo a pensar en él.

Así que seguí el camino que dictaba mi corazón. Pues sin decirlo pactamos vernos cada noche en la azotea a contemplarte.

Poco a poco nos fuimos acercando más, conversábamos y una noche cuando nuestras manos se tocaron lo supimos. Tu, la diosa Luna, nos había hecho destinados.

Esos 7 meses a su lado fueron los mejores. Nuestro primer beso fue bajo tu preciosa luz, un beso dulce y tierno, demostrándonos amor.

Fui la persona más feliz a su lado.

Así que luna, quiero a través de ti darle un beso, donde quiera que esté.

Porque se que tu sabes lo que es sentirse en soledad, justo como me siento yo desde que se mudo lejos, después de que sus padres lo obligaron a casarse con una linda omega, justo cuando nuestro amor comenzaba a florecer.

Quiero pedirte que le aconsejes dejar esa vida, dile que vuelva conmigo, te lo ruego.

Inevitablemente las lagrimas bañaron mis mejillas. Estaba ahí en la azotea, admirando tu hermosa luz, llorando por extrañar al hombre que más he amado.

Luna, tu que lo ves, dile cuanto es que sufro. Lloro su pérdida todos los días.

Dile que vuelva a mi lado, porque no puedo soportar el dolor en mi corazón.

Y a pesar de que ya pasaron dos meses desde que no esta a mi lado, yo sigo esperándolo, mientras contemplo la hermosa estrella enorme que eres, suplicándote que me lo devuelvas.

-Diosa Luna, yo se que tu sabes donde está el.- murmure viéndote brillar como siempre, aun a través de las nubes. -Acarícialo con mi infinito amor, dile que él es a quien mas quiero.- suplique llorando.

Mi alfa me fue arrebatado cuando más feliz era y estoy seguro de que él sufre tanto como yo, lo puedo sentir, porque aunque no nos unimos, el ser destinados sirvió para hacernos sentir lo que el otro siente.

-Yo se que tu sabes por dónde va, así que por favor ilumínalo con tu luz, porque no quiero que se vaya por un mal camino en su dolor.- no quería que mi alfa pasara por este inmenso dolor como yo. -Dile que lo quiero, que lo amo como a nadie.-

Sin poder evitarlo me derrumbé, me senté en el frío suelo de la azotea y llore, sentía una opresión en mi pecho, como si me apretaran el corazón con fuerza.

-Como desearía que él estuviera a mi lado.- solloce.

-Luna, por favor dile que vuelva, no puedo mas con esto.-

Y aunque quisiera decir que fue tan fácil como pedir eso, tristemente no lo fue.

Con el pasar de los días me sentía más deteriorado, me costaba subir los escalones para llegar a la azotea. Pero me había prometido ir a pedirte todos los días lo mismo hasta que se cumpliera y trajeras a mi hombre de regreso.