¿𝙼𝚎 𝚁𝚎𝚌𝚞𝚎𝚛𝚍𝚊𝚜? [𝙹𝚎𝚗𝚜𝚘𝚘 (𝙶!𝙿)]

⁵

Sus rostros estaban muy cerca y sus narices casi rozaban. Jisoo no solo la había abrazado en el momento en que Jennie aceptó, si no que acercó sus rostro peligrosamente.

—Jennie… Tú… yo… —intentó formular las palabras correctas para preguntarle si sería muy loco besarla en ese momento.

El fuerte golpeteo en la puerta hizo que ambas se apartarán con mucha vergüenza.

—Abre la puerta maldita perra, es el amor de tu vida llegando a tu casa —se escuchó una ruidosa voz fuera del departamento.

Jisoo frunció el ceño sintiéndose avergonzada de sí misma por haberse dejado llevar de esa manera por sus impulsos. Era posible que la castaña tuviera ya pareja.

—No puede ser… —suspiró Jennie—. Disculpa Jisoo, es mi mejor amiga.

—Oh, claro —se hizo a un lado para que la castaña pasara.

Mientras la castaña iba a abrir la puerta, la mirada de Jisoo accidentalmente cayó sobre la retaguardia de Jennie y el movimiento sutil de sus caderas al caminar.

«¿Cómo puede ser que alguien sea tan sensual con el simple hecho de solo existir?», se preguntó sin poder apartar la mirada de Jennie.

—¿Qué quieres Irene? Estoy ocupada.

—Hola a ti también —se metió al departamento como si fuera su casa—. No vas a creer quién te consiguió una posible cita con el guapísimo oficial del departamento de policía, Kwon Ji-yong.

A Jisoo se le hizo conocido el nombre de ese tal Ji-yong, pero solo le dejó una sensación amarga. Como si el sujeto le diera mala espina.

—Ahora no estoy para eso Irene. Ya te he dicho que no estoy interesada en nadie —rodó los ojos cansada de las mismas propuestas de su mejor amiga.

—Ya supera a tu ex, esa mujer seguro ya tiene pareja nueva. Te olvidó y ya, ahora te toca a ti buscar nueva felicidad.

—Estoy bien como estoy.

—Nena, no es por nada, pero literalmente conservas fotos viejas de tu ex en esa caja debajo de tu cama. Necesitas seguir y dejar el pasado.

—Lo siento, pero no me voy a deshacer de mi pasado. Así que deja de buscarme pareja y mejor enfócate en ti, que tú ya estás por los treinta y aún no avanzas en tu relación con Seulgi.

Su mejor amiga rodó los ojos, pero su mirada se posó en la piloto de motocross jugando adorablemente con el perrito de Jennie.

—¡AAAHHH! —chilló en cuanto la reconoció.

La piloto y el perro se sobresaltaron y se pusieron alertas ante el grito de la amiga de Jennie. Ambos se pusieron protectoramente delante de Jennie preocupados por el ruido.

—¿Estás bien? —miró a Jennie preocupada.

—S-Sí. Fue Irene quien gritó.

Jisoo asintió más tranquila, pero no se apartó ni un centímetro de ella, le gustaba la cercanía que tenía, le gustan sentir esa calidez reconfortante que le daba la castaña.

Kuma empezó a brincar y a jalar del pantalón de Jisoo para que se apartara de su dueña, claramente queriendo saber Jennie se encontraba bien.

—Oh, lo siento... —se tuvo que separar para tranquilizar al peludito preocupado.

Jennie asintió sonrojada y tímida. Luego ambas miraron hacia la loca amiga de la castaña que no paraba de chillar y gritar con fangirl.

—¡No lo puedo creer! —siguió gritando— ¡Kim Jisoo está en tu departamento!, ¡Auxilio, me desmayo!