¿𝙼𝚎 𝚁𝚎𝚌𝚞𝚎𝚛𝚍𝚊𝚜? [𝙹𝚎𝚗𝚜𝚘𝚘 (𝙶!𝙿)]

⁸

—¿Qué quieres decir? —Jisoo la miró confundida.

—Soy de las mejores abogadas que podrás encontrar en el mundo, así que te ayudaré a ganar, con la condición de que yo, sea la presidenta del club de fans de Jisoo.

—Tenlo por segu-

—¡No!, ¡Yo he sido la presidenta desde siempre y será así por el resto de mi vida! —protestó Chae.

Rosé e Irene se retaron con la mirada amenazantes, hasta que la abogando no pudo sostener más la mirada y terminó por ceder ante el título de presidenta del club de fans de Jisoo.

—Bien, pero al menos hazme vicepresidenta. Es mi última oferta.

La menor lo pensó durante unos solos segundos

—Hecho.

—Genial, está decidido. Impediremos la boda del año —vitoreó Irene.

—¡Si! —Chaeyoung también se unió a la abogada acompañada de la tailandesa.

Mientras que ellas platicaban sobre entradas épicas para arruinar la boda o sobre como podían anunciar la separación de la pareja, Jisoo miró tímida a la castaña y se acercó un poco nerviosa al verla tan seria.

—¿Me dejarás llevarte a salir?

—¿No estabas cansada? —preguntó en un tono frío.

Le había dolido tanto verla se besada por otra mujer y no poder ser capaz de hacer algo para impedirlo, que le era inevitable sentirse frustrada y molesta.

—Mentí —confesó con ojitos de cachorro, esperando que así la molestia de Jennie disminuyera—. No quería tener que pasar horas a su lado escuchándola hablar por horas.

—Debiste pensarlo antes de haber aceptado el compromiso con ella.

Jisoo la miró apenada. Estaba claro que Jennie no estaba de buen humor.

—Cuando conocí a Soojin me había parecido une increíble mujer, era hermosa, linda y agradable. Así que no me importó mucho que nuestros representantes se pusieran de acuerdo para comprometernos, además, en ese entonces yo no estaba interesada en nadie.

Jennie la miró sorprendida, pensando en que dijo: "estaba".

—Después de conocer cómo es realmente, quise anular el trato, pero mi representante se puso hablar por horas de las ventajas, ganancia y fama que obtendría si me casaba con ella, y bueno… no quise seguir escucharlo hablar, entonces lo dejé pasar. Pero luego ocurrió algo —se acercó lentamente a Jennie.

—¿Q-Qué? —retrocedió por reacción, pero Jisoo no dejó de acercarse.

—Tuve encuentros bastantes curiosos con una hermosa castaña que me hizo reflexionar en lo mucho que no puedo pasar mi vida a lado de una mujer que no amo ni en lo más mínimo —tomó sutilmente su mano.

La castaña tragó nerviosa.

—¿Por qué te haría reflexionar?

—Porque creo que me gustas —susurró sobre su oído—. Me gustas mucho.

La castaña negó y la apartó de un empujón.

—No, eso es imposible, me conoces hace unas semanas. Necesitas más tiempo para que eso pase.

—Fuimos amigas en el pasado y realmente no sé si fuimos algo más también, pero sé me conoces muy bien, por eso es que nos llevamos con tanta confianza y nuestras sonrisas salen tan naturales.

Jennie volvió a negar, pensando en que recuperar a Jisoo tal vez era una mala idea.

Tenía miedo de que Jisoo no se sintiera completamente enamorada como en el pasado. No quería ser un gusto y ya, quería volver a ser el amor de su vida como alguna vez dijo que lo fue.