EL AMOR LOLICON [YURI]

Una villana peculiar

"Achu". Estornude fuertemente llamando la atención de la mayoría de alumnos. Al parecer alguien estaba hablando de mi.

Bueno, como sea. Ayar Kuhiro estuvo tan violenta con sus ataques que me a puesto tan cachonda. Realmente quiero cogerla.

Aunque tambien está el problema de que me están espiando. Claramente les dije que no lo hicieran, no quiero que intenten matar a mis chicas.

Enserio, si uno de los generales demoníacos se aparece e intenta dañar a una mis chicas yo sola voy acabar con la guerra.

Y si es necesario me convertirse en la líder. Ése es el puesto que rechace hace miles de años y ahora me arrepiento.

Observé a Kuhiro, al parecer ella notó mi mirada ya que levantó su cabeza y al que era yo quien la observaba se sonrojo y rápidamente agachó su cabeza.

Sentí mi corazón golpear con fuerza en mi pecho, ésa reacción fue tan provocadora. Ahora mismo la quiero coger, la invitaré a mi casa. Si, eso haré, la llevaré a la cama.

"¡Señorita Sumire!". Reaccioné de inmediato volteando a ver a la vieja molesta. "Presté atención en clase y dejé de mirar las faldas de sus compañeras". Regañó con una mirada de repulsión hacía mi persona. "Yo miro lo que quiero vieja estúpida". Dije con molestia haciendo que la vieja se enojara. "¿¡Quieres que te envié a dirección!?". "por mi hágalo,si total salgo en tres minutos". Respondí sin tomarle demasiada importancia a los berrinches de la vieja. A lo mejor la tendría que matar para que no esté fastidiando.

Antes de que la vieja pudiera seguir gritándome, el timbre de receso se escuchó y felizmente me levanté y caminé hacia Kuhiro. Sentí la mirada de la vieja fulminando mi nuca y sin voltearme le saque el dedo del medio.

Por cierto, si quieres saber la apariencia de mi profesora.

Ella realmente no es vieja, tiene 28 años, su cabello es rubio con ondulaciones aparte de ser bastante largo, también sus ojos son celestes y su piel clara. Casi siempre viene vestida con camisa blanca que me daba una buena vista a sus grandes pechos, también traía falda gris algo apretada, así que también podía deleitar mi vista con su culo, y finalmente traía zapatos de tacón negro.

Enserio, si no fuera una perra molesta me la cogería sin pensarlo dos veces. Me la cogería toda la noche y no pararía hasta que sea medio día.

En fin, cuando llegue donde mi chica ella se tensó y me miró con un hermoso rubor. Revise que nadie estuviera mirando y al ver que nadie me prestaba atención me incliné y besé la mejilla de Kuhiro.

La chica se sonrojo enorme y evitó por completo el contacto visual. "Oye ¿Quieres dormir en mi casa hoy? Podemos hacer muchas cosas sucias". Susurré a su oído el cual luego lamí sacándole un pequeño chillido al tiempo que reaccionaba apartándose.

"Y-yo, n-no se, n-no nos conocemos bien y...". Puse mi dedo en su labio volví a susurrar. "Vamos, la otra lo disfrutaste, no parabas de gemir y poner ésas expresiones cachondas". Me burlé sonrojando aún más a la chica.

"Y-yo no lo se". Me enderece y coloque mi mano en su cabeza, acaricié cuidadosamente su pelo haciendo que se sonroje aún más. "Esperaré tu respuesta con ansias en la salida, hazme feliz y yo lo haré". Dije esa frase para dejar ver mi lado egoísta y tras eso me retiré a comprar algo de comer. Realmente estaba esperando poder coger con ella.

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Realmente, sumire era extraña, hoy fue realmente amable cuando me acarició la cabeza. Ahora mismo estoy en duda sobre su oferta y no se que hacer, por un lado quiero ir para poder hablar y ser su amiga y talvez... Hacer cosas como ella dijo. Pero realmente estoy nerviosa y me asusta la idea.

Tampoco quiero ser una molestia, aparte si algo llegará a ocurrir con mi deber de chica mágica, sería muy descortés irme así como así. Que hago.

"Kumiko". Me volte a un costado y vi a Hana y Nami caminar hacia mi, les sonreí, al parecer sus clases también habían terminado. Éso realmente me preocupaba, mientras más me acercaba a la salida mi corazón golpeaba más fuerte. Necesitaba pensar en que decirle.

"Kumiko, que tienes, tu cara se ve roja". Hana, la más pequeña de nosotras habló y no pude evitar ponerme nerviosa ¿Era buena idea decirles?".

"B-bueno, la persona que ne gusta me invitó a dormir a su casa". Comencé y ambas abrieron sus ojos como platos. Nami fue la primera en reaccionar y dibujo una sonrisa pícara. "Vaya, veo que te vas a divertir". Me sonroje furiosamente y rápido nege. "E-en realidad no sé si debería ir". Explique mi problema y ambas me miraron como si fuera estúpida. Bueno, talvez lo sea un poco.

"Tienes que ir, es una gran oportunidad". Hana habló y realmente no sabía que responder. "Es cierto, aprovecha la oportunidad y hazlo completamente tuyo". Nami dijo con una gran sonrisa.

"B-bien, iré". Dije determinada y me apresuré a la salida. Al parecer ellas se quedaron atrás.

Luego les agradeceré apropiadamente.

Al llegar donde sumire la vi apoyada contra una pared, su expresión era una tan calmada. Realmente era una persona atractiva, pero por que era tan pervertida.

"Sumire". Saludé sintiendo mis mejillas arder y mi corazón golpear fuertemente.

"Kumiko ¿Aceptas ir?". Me preguntó con calma y yo simplemente asentí. Ella me sonrió y en un acto repentino me atrajo a ella dándome un abrazo.

De alguna forma me sentí cálida y protegida, se sentía bien. Al final correspondi el abrazo y así nos quedamos un rato sin importarnos las miradas de los estudiantes que salían. Incluso creo que escuché la voz de mis amigas.

"Vamos". Dijo separándome de ella y tomándonos de la mano para poder ir a su casa. Me siento realmente feliz de poder estar con ella, lastimosamente soy una chica mágica y ella una persona ordinaria, si los demonios o ella descubren quien soy ella podría correr peligro.

...