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SIWON

Siempre tengo que pelear contigo por lo mismo papá, ya te dije que no quiero heredar tu empresa es una gran responsabilidad—

—Una responsabilidad que puedes cumplir si no andas distraído—     suelta un suspiro y camina de un lado a otro lentamente     —Cuando tu madre murió me pidió que mantenga el negocio y eso hice, y si mal no recuerdo le prometiste lo mismo. No dejaré que lo arruines Siwon cuando yo muera todo eso que alguna vez fue el esfuerzo de tu madre quedará para ti—

Pero no quiero esa vida, yo amo a Kyuhyun y...—    golpean la puerta, de seguro es Kyuhyun le prometí que saldríamos hoy

—Vete y piensa lo que vas a hacer Siwon—    asiento levemente y salgo de la casa, miro a Kyuhyun y este me sonríe    —Hola amor—    lo beso y el corresponde

—Hola! ¿Listo para pasar un lindo día juntos?—

Si, estoy listo—   agarro su mano y comenzamos a caminar en silencio. No es que no tenga ganas de hablar sino que tengo un lío en la cabeza  

—Won  ¿sucede algo?—   niego y beso su mejilla

—La misma pelea de siempre con mi padre, no es nada. Dime bebé, ¿qué planteaste hoy?—

Pues, conseguí dos horas en un Neko Café—

—¡No es cierto! ¿Cómo...—

—Pues, a veces hay que ofrecer todos los atributos que uno tiene—     lo miro seriamente, su chiste no me dio gracia     —Ay Won, preguntas lo obvio amor, lo reserve hace un tiempo—

—¿No era mejor responder eso?—

—Me gusta cuando te pones celoso—    me besa la mejilla y al poco tiempo llegamos al Neko Bar para relajarnos y pasar una linda tarde juntos. Mientras esperamos nuestro café Kyuhyun agarra un gatito blanco muy peludo    —Quiero uno así cuando vivamos juntos—

—¿Quién dijo que viviremos juntos?—    él hace un puchero y mira al gatito

—Así será, estoy seguro, pero si no quieres tener un gato el señor rico podrá traerme un pingüino—

—¿Y si no quiero vivir contigo?—

—Pues... Te daré miles de razones para que te quedes conmigo—    sonrío amplio y agarro sus mejillas para besarlo tiernamente

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Veo a Kyuhyun entrar al restaurante mientras habla por teléfono, parece estar algo cansado, sus ojeras lo delatan

—Lo sé mamá, pero a Suho no le gusta ese jarabe por favor comprale el que te digo no tendrás que correrlo por toda la casa—    sonríe y cuando me ve se sienta frente a mi   —Si, esta bien, no le des muchos dulces mañana, bien, nos vemos—    cuelga y me mira    —Hola... Siento el retraso—    baja un poco la mirada

—Estoy acostumbrado, no te disculpes—    cuando me vuelve a mirar sus ojos tienen un brillo especial

—Bueno, vamos a hablar de Suho—

—¿Quieres un café?—    él me regaña con la mirada    —Relajate, en serio quiero oír todo sobre mi hijo, pero por favor al menos dejame invitarte un café, quiero una charla tranquila—    le explico sutilmente ya que lo veo muy a la defensiva.

—Si, tienes razón—     suelta un suspiro y mueve su cabeza de un lado a otro tratando de relajarse     —Está bien, acepto el café—      sonrío y llamo a la mesera para hacer el pedido, una vez que traen nuestro café me enderezo un poco y nos miramos

—Bueno ¿sobre qué se supone debería hablarte? Sinceramente no creí que fueras a aparecer en algún momento—

—Bueno... Hablame de Suho, su forma de ser, sus gustos, sus pasatiempos, todo eso y luego vemos como se sigue desencadenando esto—

—Bien entonces... Suho es un niño alegre, muy extrovertido. Muchas veces suele tener un carácter fuerte cuando se enoja—     se queda pensando unos segundos    —Y bueno... Sus pasatiempos son dibujar, ver televisión, jugar, ama mucho los gatitos tiene muchos peluches de ellos—

—Deberías llevarlo a un Neko Bar—    su cara refleja algo de disgusto por lo que dije    —Fue solo una sugerencia no te lo tomes mal—    toma un poco de café y vuelve a mirarme

—No me gustan los Neko Bar—    me sorprende su respuesta, antes solía amarlos y disfrutaba de la compañía de los gatitos     —Siwon...—     él juega con sus manos     —Suho me pregunto por ti y solo quiero saber si estarás presente—

—Claro que lo haré, si hubiera sabido antes que estabas...—

—Siwon el pasado no me importa, ni me importa que hubieras hecho, estamos  hablando de lo vas a hacer ahora con Suho—    se ve enojado, y parece estar al borde de perder la paciencia     —Solo... Necesito que seas serio con lo que vayas a hacer no te permitiré que le des esperanzas a Suho y luego te vayas del país por cinco años—    cada palabra fue como sentir que me clavaron un puñal en el pecho

—No será así, lo prometo—    se le escapan algunas lágrimas pero las seca al instante

—Bien—    se pone de pie y saca dinero

—Yo invito—   me apresuro a decirle pero él deja el dinero en la mesa

—Yo por mi parte y tu por la tuya, Choi—

—¿Kyuhyun podrías al menos relajarte? Me odias, eso me lo dejaste muy claro pero quiero seguir hablando de Suho, siéntate y continuemos con la charla por favor—     me mira con el sueño fruncido y se sienta lentamente.
Si estoy tratando de estabilizar todo es porque aun no se cómo es que no me llegaron sus llamadas y mensajes, Kyuhyun no se da cuenta de que enterarme de esto fue como un balde de agua helada cayendo sobre mi. No estoy listo, no sé como ser un buen padre pero haré todo a mi alcance para poder disfrutar cada segundo con mi hijo. Y Kyuhyun... Solo espero poder ablandar su corazón

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Llego a la oficina de mi padre y él eleva la mirada al oír como la puerta se abrió bruscamente

—Hijo, ¿qué te trae por aquí?—

—Quiero respuestas sinceras, eres abuelo de un niño de cinco años—     su expresión cambia a una llena de sorpresa    —Kyuhyun intento contactarme y no pudo, misteriosamente yo tampoco pude hacerlo, ¿tuviste algo que ver en eso?—     baja la mirada y se queda en silencio    —Papá—

—Tal vez—     lo sabía, mi propio padre hizo que me perdiera los primeros cinco años de vida de Suho. Tomo aire profundamente y cierro los ojos tratando de no soltar algun insulto     —No me imagine que serias tan irresponsable—

—¿Irresponsable?—

—A menos que no sea tuyo y ese chico te haga creer que eres su padre, siempre te di mi humilde opinión sobre lo que pienso de Kyuhyun—

—Confío en Kyuhyun, si necesitas un ADN no lo tendrás porque confío ciegamente en su palabra y de ahora en adelante no te vas a entrometer en mis asuntos—    esto último se lo digo alzando la voz, así que antes de perder la cabeza salgo de su oficina y camino hasta mi auto.

Aún no proceso esto, hace unos días estaba seguro de que recuperaria a Kyuhyun, pero ahora me enteré de que soy padre y que la persona que más amo me odia.

𝓗𝓪𝓲 𝓼𝓱𝓲 𝓼𝓱𝓪𝓷 𝓶𝓮𝓷𝓰 ꕥWonkyuꕥDonde viven las historias. Descúbrelo ahora