Capítulo 2

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Esa lluvia y vientos dieron  como resultados otros sucesos desastrosos que acabaron con la estabilidad de prácticamente todo, muchas personas se debilitaban día tras día y básicamente nadie trabajaba y ¿Porque? Que había de esperarse pues la energía era inestable, los días se volvían tan largos que hubo mucha gente que se desquició y no salían de sus casas para nada.
Los anuncios en la TV se volvieron menos concurridos ya que del gran equipo de comunicaciones solo unos pocos salían y grababan algo. El tío George por su parte nunca más lo vimos salir de su querido vagón subterráneo y no es para menos, en casa se había vuelto todo más callado hasta Lucían mi hermano menor, redujo su nivel de energía.

Era como estar viendo una película una y otra vez, la misma rutina esperando que cambiarán las cosas o empeorarán, mamá pasaba largas horas en la cocina racionando todo cuanto teníamos ya que las ayudas dejaron de llegar, solo cuando mi hermana llamaba era que se paseaba por la casa hablando y en esas llamadas pude escuchar que Irene y mi cuñado Roy tenían planes de venir pues todo en las grandes ciudades se había vuelto un caos permanente, así que aseguraban llegar el próximo mes. Pero sería la última conexión que tendríamos con un teléfono u otro medio de comunicación, pues al siguiente día muy de mañana mi padre nos despertó a todos y lo que vimos al bajar las escaleras era solo oscuridad ya que se habia ido la luz y solo teníamos una linterna para guiarnos, al salir y toparnos con las ventanas no habia absolutamente nada solo neblina que lo cubría y oscurecía todo, ahora ya no habia calor, solo existía un fogaje muy extraño.

- Jonathan, ya miraste en el patio y el sótano- mi madre en esos momentos estaba tan angustiada que ni siquiera podía apartar la vista de la ventana, solo nos daba órdenes.

- Si, querida al levantarme lo primero que hice fue mirar todo alrededor pero nada, solo se veía todo en penumbras.

- ¿Pero, que estará pasando? Primero la calor, luego la máscaras, después las comunicaciones y ahora esta niebla, es para volver loco a cualquiera y las autoridades no se pronuncia en nada, ahora que podemos esperar eh.

Lo que decía lucían era la pura desesperación que estábamos compartiendo todos en ese momento, no sabíamos que realmente esperar de todo ese inesperado cambio climático, solo nos tocaba esperar a ver qué pasaría después, sentimos varios toques en la puerta de la cocina y no era necesario pensar mucho de quien se trataba pues sabíamos que era el tío George.

- Por favor serían tan amables de abrir, no quiero llegar a pascuas aquí- habia dicho desde el exterior.

Mi padre fue abrir la puerta en medio de tropiezos por toda la sala, normalmente no habia tardado demasiado como lo estaba haciendo en ese momento, y tío George hubiera abierto la puerta sin tener que tocar pero la niebla era demasiado para poder ver tan siquiera la manilla de la puerta.

- Aquí estamos sin una pisca de luz y sin una bendita comida durante toda la mañana.

- ¿Qué dices tío, pero que hora son? – habia dicho lucían ya que no se habían percatado de el tiempo trascurrido.

- Son las 11 pm, así es el sol no se ha asomado hoy, y a este paso no creo que lo veamos hoy.

Todos y en especial lucían que estaba demasiado disgustado en ese momento, nos sentimos realmente desequilibrados y con un temor abrazador, pero para ese momento se empezaban a ver algunas luces en las  ventanas de los vecinos alrededor de nosotros, así fue que mi papá corrió hacia la puerta y comenzaba a prender el foco, luego empezaron a vociferar.

- Jonathan, ¿están todos bien? – era Ralph uno de los pocos que habían decidido abandonar la zona.

- Si Ralph, todos lo estamos ¿teresa y tú están bien?

- Si, estamos así desde la madrugada con la niebla, Teresa se despertó primero ya sabes con la tos que no la deja- Ralph habia llegado hacia la casa bastante agotado y sudoroso. – sabes he estado intentando buscar a Lucas mi perro pero aún no lo encuentro. ¿qué loco todo esto, no?

- Si esto es desquiciado pero a Lucas, no lo hemos escuchado y los demás vecinos, ¿has hablado con ellos?

- Con pocos pero todos están consternados y esperando a que salga el sol, algunos para largarse de aquí, dice Leonard que el gobierno está llegando a las áreas de refugio y que allí si habrá luz, no se cuan cierto sea pero, teresa y yo estamos pensando en irnos también, claro con Lucas, pero ya me tengo que ir, mi esposa debe estar preocupada.

Y esa fue la última vez que supimos de Ralph y Teresa, porque el gobierno de cada zona habia mandado camiones para llevarlos a albergues clandestinos, ya que al comienzo de la gran ráfaga de calor se veía el hambre y la enfermedad por todas partes y se crearon puestos de control para brindar ayudas a los que perdieron todo. Fue así que todos en el vecindario habíamos comenzado a empacar, pues las raciones de comida y agua estaban disminuyendo, la atmosfera no cambiaba, y lo mas preocupante es que la luz del sol no se reflejaba constantemente solo por dos o tres horas al día, podíamos ver algunos pequeños destellos, pero nada más y se volvieron los días  turbios  ya que sin luz solar toda el sistema al que veníamos acostumbrado estaba cambiando.

Desierto y Niebla: El ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora