Desierto y Niebla: El Comienzo

Capítulo 13

Mientras esperaban alguna señal que los hiciera salir de ese estado de desosiego, llegaron a la conclusión de avanzar a otros refugios o albergues, para recolectar alguna información que los pudiera llevar hacia sus familias.

- Deberíamos irnos antes que las pocas provisiones se terminen, porque no creo que los de adentro sigan repartiendo como hasta ahora.- decía Luke mientras volvíamos al campamento improvisado que teníamos resguardaos por solo dos carpas que nos habían dado los soldados y la naturaleza de escudo contra cualquier animal de noche, mason quien cada vez estaba más centrado en hacer armas con palos y cualquier elemento que íbanos encontrando, puso un fuerte con lanzas y trampas alrededor de las carpas.

- Sí, pero ¿creen de verdad que en los demás refugios nos vallan a recibir? – hablo Mario- yo me quedo, no voy a moverme de aquí sin mi tía.

No habia una elección unánime del siguiente paso a seguir, así que decidimos esperar, racionando cada vez más las porciones de comida, pues cada vez eran muchas las personas que iban llegando al refugio y aunque les habláramos de los aulladores o las granjas no se decidían abandonar su lugar, pero mientras nosotros pasábamos días tras días esperando a que llegara algún indicio de ayuda o tan siquiera un atisbo de claridad en todo lo que pasaba en estos momentos, pero nada seguíamos tan desubicados y con tanta frustración. Cuando descansamos de lo que fuera un día de trabajo con Mason, haciendo estacas y vallas, escuchamos al otro lado del campamento de nosotros unos ruidos de balas, y lo que pareciera el peor sonido para nuestros oídos en estos momentos ... aullidos.

Salíamos de las carpas con las linternas viendo para todas partes, mientras agarrábamos las armas para defendernos, pero mientras esto ocurría sentimos como unos pasos grandes se aproximaban hasta donde estábamos, seguido vimos a uno de los aulladores se incrustaba en la valla que armamos no hacía mucho.

- Deberíamos irnos antes que los demás vengan- pero antes que luke volviera a hablar nos fijamos que venían más – Mario, lánzales más estacas – decía mientras él y Mason sostenían y aumentaban la resistencia de las vallas.

- Vamos muchachos, salgamos de aquí, ¿Por qué no han venido los soldados aun? – Daniela estaba dando vueltas lanzándoles cualquier objeto que encontraba, mientras que se escuchaban disparos y muchos gritos por parte de todas las personas que estaban en el refugio.

- ¿Pero a donde nos dirigimos? No podemos abandonar el refugio, y mucho menos quedarnos o ir hacia otro camino con esas cosas persiguiéndonos. – dije pasándole más estacas a Mario.

- Ya lo dijiste debemos acercarnos lo más que podamos al refugio y pedirle auxilio a los soldados. – por primera vez hablo Mason- estas cosas no se detendrán hasta que puedan llevarse algo.

- Pero ilumínanos, ¿Cómo pasamos a estos monstruos? Y debería de ser rápido antes que vengas más. Si luke, heriste a uno – grito Daniela lo último cundo luke se habia dado cuenta de que un aullador estada rodeando el campamento, lo hirió con una estaca en los ojos y salió huyendo.

- No lo sé – decía masón- pero sabemos que podemos herirlos en los ojos, hagamos algo con eso.

Sabíamos que en las partes del cuerpo no les haríamos el menor rasguño, pero en los ojos eran muy sensibles, mientras todos poníamos el empeño de herirlos, poco a poco retrocedían y así vimos la oportunidad de escaparnos hacia el refugio. Cuando llegamos nos encontramos con restos de aulladores y pocos que se retiraban, las personas que antes estaban allí, algunas estaban también tiradas sin vida en el suelo, los soldados eran muchos habia llegados de otras partes en tanques y armados hasta los dientes, uno que pasaba por allí nos vio e hizo señas para que nos acercáramos.

- ¿Quiénes son ustedes, y porque no estaban dentro del refugio?