Desierto y Niebla: El Comienzo

Capítulo 8

Esto no podía estar pasando, Kate y yo nos quedamos inmóviles con el corazón en la mano, quienes fueran esos hombres tenían mucha más ventaja que nosotros pues con solo unos cuantos palos y algunas navajas, seriamos presa fácil, ya que ellos llevaban armas.

- Estamos armados, así que no se acerquen- empezó a decir Nicolás – si se acercan será lo último que hagan.

¿Qué rayos está haciendo? – Decía en voz baja Kate - no ve que son peligrosos.

- Oh no, que pasara si hago esto – el hombre dio un paso adelante – no seas tonto muchacho más bien baja de allí antes que realmente, seas tú quien respires por última vez.

- Lo siento mucho, Scott, baja esa arma no ves que son unos chicos- salió de la nada una voz de mujer – no se asusten, ¿ustedes también están aquí por esos hombres? ¿cierto?

Inmediatamente Nicolás bajo del mirador y comenzó a decir todo lo que nos habia sucedió, también el hombre quien estaba parado desde que habíamos llegado salió lentamente y con una linterna nos observó diciendo:

- ¿Quiénes más están con ustedes?

- Solo somos siete los otros están vigilando no muy lejos de aquí

- Por casualidad han visto a una niña de lentes blancos y cabello rubio se llama Anita.- pregunto la mujer de antes.

- Lo lamento señora pero la verdad no hemos visto a los chicos que llegaron de otras partes, porque los tienen encerrados en otros lugares.

- Oh Anita ¿Dónde estás? - empezó a llorar la señora en el hombro de Scott .

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Empezaron a decirnos de donde llegaron, y que habían estado siguiendo a esa banda quien se encargaba de saquear los pueblos pequeños en busca de gente pero aun no sabían para que realmente las querían. Luego que la niebla nos envolviera a todos, muchas bandas se encargaron de poner el terror en las personas, pero luego que el gobierno se iba alejando, cuando no habia más que hacer, se turnaban varios grupos de guardias para mantener a salvo a todos los que estaban más lejos de la ciudad.

No pudieron seguir contándonos ya que se escuchaba mucho disturbio a lo lejos, Nicolás y robín corrieron a mirar desde lo alto, mientras nosotros asegurábamos las puertas.

- ¿Qué ven?

- Parece que la luz se está disipando demasiado rápido en las granjas, debo asegurarme si Bilma y Anita están bien, ustedes quédense aquí.- dijo bajando robín a toda prisa, bilma era la hermana de este y estaba mal de salud según lo que nos habían contado.

Pero luego de unos pocos minutos, los aullidos fueron bajando más y más hasta que se hizo el silencio, y lo que menos esperábamos paso, las luces también se apagaban muy rápidamente hasta que solo quedaron unas cuantas en los alrededores, así que ahora todos mirábamos con horror lo que siguió después.