The Reason Why [Michaeng]

14. Comprometidos

Para Mina era complicado analizar que habían pasado ya dos semanas desde aquel beso con Chaeyoung. Era el día de la esperada fiesta de compromiso, no quería confirmarle al pueblo de Suwon que ocurriría una boda. Sin embargo, la respuesta de la coreana a su carta fueron las simples palabras "Sé qué hacer, en la fiesta lo platicamos".

Para Chaeyoung había sido complicado poder enviar aquel mensaje, nuevamente tuvo que contar con la ayuda de Dahyun y Sana para que llegara a manos de la japonesa sin que su familia se diera cuenta. 

Mina debía confiar en las palabras de la coreana, estaba ansiosa por verla. Aunque hubiera preferido tener que evitar esa fiesta, pues cada vez se sentía más atrapada.

Toda la mansión Son estaba en movimiento las 24 horas del día, los preparativos para la celebración eran grandes, y no cesarían hasta el día de la boda. Pues ahora Chaeyoung había escuchado de la prueba del vestido de novia que se pondría Mina, el traje de Jinyoung ya estaba listo, la lista de invitados y el banquete también.

Si Mina todavía no había vuelto a pisar la mansión de su prometido, era porque el señor Son se había encargado de mantenerla lejos, todos los preparativos estaban siendo dirigidos por Nayeon.

Todo alrededor de Chaeyoung y Mina les recordaba que en un par de meses la japonesa podría convertirse en esposa del orgullo Son. Si lo que planeaba la coreana no funcionaba, no tenía idea qué podría pasar.

—Te ves hermosa —exclamó Bambam al ver a la japonesa con aquel vestido, lista para partir hacia la mansión.

—Siempre se ve hermosa, pero esta noche luce radiante —exclamó el señor Myoui mirando a su hija— Jinyoung es un hombre muy afortunado.

No había mentira, la japonesa lucía completamente bella, con un peinado recogido y un vestido blanco largo que dejaba ver su hermosa figura, la joyería combinaba perfectamente. Sin embargo, nada podía evitar que se notara su frágil mirada que en el fondo escondía miedo.

Por otro lado, la mansión ya se encontraba preparada para recibir a los invitados. Jinyoung estaba platicando con su padre en su oficina.

—No te atrevas a hacer algo imprudente hoy, Jinyoung, últimamente has abusado del alcohol —advirtió.

—Tu problema es que deberías confiar en mí.

—Hablo en serio, cualquier imprudencia podría arruinar todo.

—Mina se casará conmigo, su padre está quebrado, no tiene opción —exclamó sirviéndose vino.

—Sabes que no está del todo quebrado, pero si queremos aprovecharnos de él, tienes que casarte con ella. Una vez que sea tu esposa y su padre muera "accidentalmente", absorberemos su fábrica y todas las ganancias. Por el momento, tenemos que ahuyentar a Chaeyoung, sé cuidadoso.

—Le hiciste creer que con el matrimonio, al juntar ambas familias, eso nos convertiría en socios y las ganancias se dividirían a la mitad, ¿cierto? —preguntó el joven.

—Así es. El imbécil quiere que Mina herede la fábrica una vez que él muera, lo que será en pocos meses —rio— Pero cuando ella se quede sola tendrá que obedecer y cederte todo.

Jinyoung sólo respondió con una sonrisa sin empatía, mientras tomaba de la copa de cristal que sostenía en su mano derecha.

—Salgamos, tenemos que estar listos en la entrada —ordenó el hombre mayor.

Después de unos minutos habían llegado varios invitados, la familia Kim se presentó primero, un imponente Namjoon junto con un tímido Yugyeom ayudaban a su abuela a subir los escalones.