Ella es fuerte aunque no se lo crea. Le falta pensar que puede hacerlo. Nadie
puede mantenerla a la sombra, nadie la puede rebajar porque ella brilla con luz propia, pero, para las personas correctas. Que nadie le diga que no puede hacerlo, que nadie le ponga límites. Ella es la única que sabe lo que ha tenido que pasar, es la única que tiene la solución a sus problemas, que puede darse ánimos y seguir. Yo sé que puede, porque la he visto hacerlo, espero que no necesite mis empujones. Quiero que crezca, que siga riendo, quiero que la reconozcan por lo maravillosa que es, que tenga amigos sinceros, que confíe en ella. Necesito que no se agobie más y que deje de buscar la satisfacción en el placer efímero de los hombres que no le darán la seguridad que necesita y la pizca de amor propio que merece. Y aunque necesite un dichoso golpe de realidad para abrir los ojos, sé que puede continuar sola. Se levantará como
siempre, porque es más grande que el miedo a fracasar, ese miedo sordo de ser menos que el resto. Por ahora, valorarse y quererse está bien. Llegará ese que se tomará el tiempo de conocerla y enamorarse de ella por lo que es y no por lo que dejó de ser. No hay nada mejor que un día tras otro, en el mayor de los sentidos.
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De la cuarentena y sus secuelas [Disponible En Amazon]
Spiritual2020, una pandemia que azotó a la humanidad, una cuarentena que nos hizo replantearnos la vida que llevábamos, para bien o para mal. De ahí surgieron veinte escritos, el amor, la amistad, la soledad, personas que con sus actitudes inspiraron mi plum...