Jiang Cheng nació siendo un doncel, razón por la cual su madre decidió comprometerle con el segundo Jade de la Secta Lan. De esta manera la secta de Yunmeng tendría alianzas con dos de las cinco sectas más poderosas del mundo de la cultivación.
Pare...
El tiempo pasaba, su hermana solía mandarle bocadillos para él y Huaisang. Ambos hombres pasaban bastante tiempo juntos, y en algunas ocasiones Meng Yao o el Maestro Lan Qiren se les unían a sus charlas, este último siempre estaba al pendiente de ambos, le preocupaba que les pudiera pasar algún accidente o alguna otra situación que los pusiera en peligro.
Algunas ocasiones iba a donde los conejos y tomaba algunos para que estuvieran un momento en el Jingshi, donde su esposo permanecía inmóvil, usualmente en meditación o acostado, pero sanando lentamente, a Lan Zhan le hacía feliz ver a sus bolas de pelo blancas saltar por doquier, aunque al final siempre las regresaran a su lugar correspondiente, le hacía feliz saber que su pequeño Loto se preocupaba por él y buscaba siempre maneras de hacerlo feliz.
Aunque estaba lejos de su secta, contestaba cada carta proveniente de Yunmeng para estar informado de lo que acontecía, afortunadamente no había casi ningún problema grave o que requiriera su presencia.
Las tardes y noches usualmente escuchaba a Wangji tocar su guqin, al menos no era Inquiry, sino Song of Clarity que hacía que ambos se relajaran, el ambiente era agradable e incluso en algunas ocasiones podían sentir ambos el flujo de energía que su hijo manifestaba, una forma de expresar su amor hacía ellos, pensaba.
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La noche que Jiang Cheng entro en labor de parto se encontraban cenando en el Jingshi, Lan Zhan había pedido que su hermano y tío, junto con Huaisang, los acompañaran de vez en cuando, no quería alejar más a las personas que quería, por lo que esa noche todos se encontraban cenando en el pequeño jardín cercano a su habitación.
Originalmente el menor solo iría por una sábana a la habitación contigua, el frío del invierno le calaba un poco, pero al incorporarse un dolor agudo lo hizo arrodillar, alertando a los presentes, después soltó un alarido. Sin mediar palabra Lan Xichen tomó al joven entre sus brazos y se dirigió a paso veloz al pabellón médico.
Nie Huaisang junto con Qiren y el segundo Jade iban un poco más lento, el avanzado embarazo de Huaisang le impedía moverse muy rápido, siendo cuidado por Qiren, asimismo, Lan Zhan no podía moverse mucho por las heridas en su espalda.
El parto duró casi 6 horas, los gritos y maldiciones de Sandu Shengshou despertaron a todo el Receso de las Nubes, mientras su esposo estaba a su lado consolándolo y dándole su apoyo, cosa que hacía sentir seguro a su compañero. Los demás estaban afuera, no pudiendo alejarse mucho por temor a ser necesitados, a parte, querían ser los primeros en ver al nuevo integrante de su familia.
Un llanto llenó la habitación, no era muy estridente, pero si fuerte, su bebé resultó ser un niño muy sano, de enormes ojos grisáceos, con algunos mechones negros en su cabecita, una piel blanca y mejillas regordetas. Cuando los sanadores terminaron de limpiarlos (tanto al bebé como a Wanyin), el pequeño bulto fue entregado a su madre, Jiang Wanyin lloró de felicidad mientras era abrazado por Lan Zhan, ambos contemplaban a su primogénito con inmenso amor, el bebé se quedó dormido casi al instante de sentir el calor de su madre.
