funcking me

621 56 48
                                    

Hoy es mi cumpleaños, pero no lo quiero celebrar ni nada por el estilo. Solo deseo estar solo en mi habitación, oír las canciones de Luis Miguel y deslizarme hacia la locura. Maldita sea, Miguel me recomendó a este cantante ¿Como no lo iba oír si ambos se llaman igual y cantan hermoso?

— Hooo-laaa, mi querido chinito — dijo Marco nervioso, entrando como Pedro por su casa.

Al ser que aún estoy enojado con él, decido ignorar a ese mal amigo, traidor y mentiroso.

— Oh-h aún estás molesto — buscando templar la situación, Marco llega a mi cama y se acuesta a mi lado — ¡¡¡Perdóname!!! ¡¡¡Sé que debí decirte que tu amorcito se va!!! ¡¡¡Pero él sabe que te quiero mucho, mucho, mucho y pues no quiero que esté enojado conmigo!!! — diciendo lo último, se me tira encima y me da un gran abrazo bastante empalagoso.

Estoy seguro que está más idiota de lo normal. Tan joven y tan imbécil.

Solo respondo con un suspiro y trato de alejarlo de mí mientras que él sigue abrazándome sin respetar mi espacio personal ¿Por qué no me deja solo y triste en mi cumpleaños? ¿Qué tan difícil es?

— ¡Marco! ¡¿Qué diablos haces?! — grita Coco, ingresando a la habitación.

¿Es que ha pasado de moda tocar? ¿O es que ya nadie respeta mi espacio personal?

— Coco, quítame a tu hermano de encima — le pido al ver que sacarme al oji ámbar de encima es una misión imposible.

—Okey — sin ninguna delicadeza, levanta a su hermano y lo tira al piso.

Okey, eso sí fue gracioso.

— Perdónalo Hiro, está raro estos días —

— ¿Más de lo normal? —

— Sí, pero solo se vive una vez en la vida, y no quiero que pase un mal cumpleaños —

Bueno, al menos alguien está tratando de divertirse aquí.

— ¿Hoy no es tu fiesta de cumpleaños? ¿Por qué estás aquí como viejo amargado? —comenta, sacándome de mi habitación.

No quiero salir, ni hablar con gente o celebrar nada. Trato de no dejar mi cuarto con todas mis fuerzas e iniciamos una lucha en la que yo tengo ventaja, pero, para mí desgracia, llega tía Cass.

— ¡Me alegra que ya estés levantado, Hiro! ¡Vamos a tu fiesta de cumpleaños! — me toma de la mano emocionada y me arrastra hacia aquella sala adornada por mi día especial

¿Cuándo la decoraron? ¿Estaba tan medito en mi miseria que ni me dí cuenta? Simplemente ellos no ven que no quiero celebrar nada.

La verdad todo esto me da mala espina. Es ese tipo de presentimiento en el cual crees que algo malo va a pasar, pero aun así ya me rendí, por lo que me dejo llevar por la situación.

Debo de admitir que todo está muy bien decorado. Es algo simple y bonito. Justo mi estilo. Tadashi está ahí sonriéndome emocionado y veo que Gogo, Honey, Fred, Wasabi y hasta Karmi están aquí. Quien efectivamente no vino es Megan. Quizá no fue invitada o quizá no quiso ir. Da igual.

— Bueno Hiro, es hora de tu cumpleaños y vas a disfrutarlo — me digo a mí mismo, tratando de sonar lo más positivo posible.

Y así da inicio a la fiesta.

Me felicitan y abrazan todos de una forma muy empalagosa. Fred comienza a hacer chistes sobre cómo estoy más viejo y que ya no voy a ser un niño.

Gracias Fred, pero te salió mal porque encanta la idea de ser más mayor y estar más cerca de Miguel. Quien se va y nos deja...

¿HIRO IS GAY? (Higuel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora