dormir en la casa de lo Rivera

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Capitulo 12
Estaba en el medio de mi colapso nervioso cuando sentí como alguien me lanzaba en la cara una toalla, por supuesto que ese alguien era Marco.

- ¿Qué te pasa? ¿Por qué siempre me tiras cosas en la cara?-

-¿A mí? Nada, lo mismo va para ti. Tuviste una crisis por tener tu mente en pasar una noche con Miguel-

Ah ¿Komo lo zupo? Digo...

-Yo no estaba pensado en esas cochinadas, no soy como tú- refuté ofendido. Puede que si tenga una crisis, pero nada de pensamientos pervertidos . Acá el único mal pensado es Marco.

-Si claro, como sea. Usa esa toalla para báñate en el cuarto de invitados que se encuentra al fondo a la derecha, te traeré un cambio de ropa para que puedas dormir-dijo, restándole importancia a mi declaración.

Quise oponerme, pero no tenía una razón valida para hacerlo. Tampoco quería enfermarme, por lo que solo me quedaba ser obediente y bañarme.

Al salir pude ver un cambio de ropa reposando en la cama, se trataba de una pijama azul claro. No había ropa interior incluida y considerando que toda mi ropa estaba mojada a excepción de mi ropa interior, significaba que tendría que usarla, por muy antihigiénico que suene.

-Te queda bien, aunque me queda mejor a mí-dijo Marco. Estaba de pie con brazos cruzados en el umbral de la puerta con una mirada pícara, también tenía una pijama azul puesta.

-Si que te gusta el azul-comenté viendo el obvio patrón de colores.

- No tanto, en realidad-

-¿entonces por qué...

-Ante de que ustedes le regalaran esos lentes mágicos a mi Coquito, ella solo podía ver unos cuantos colores-me interrumpió de una forma tan calmada como, si ya le hubiera hecho la misma pregunta cientos de veces- el azul es uno de ellos-

Me tomó poco tiempo para entender lo que me quiso decir.

-Descubrimos su condición cuando quiso juntar un sobrero verde con el típico traje rojo de Miguel y ella no entendió cuál era la diferencia. De ahí ella perdió toda esperanza de dedicarse a la moda. Por eso visto de azul, ya que es un color que ella podía ver y combinar como le plazca, aunque ya no es necesario-dijo esto último de una forma algo melancólica y la mirada algo distante - pero ya me acostumbré - Dijo con una sonrisa asomándose en su boca.

Eso fue tan tierno ¿es ese mi Marco? No sabía que tenía un corazón tan puro, me muero de amor. Mi Marquito teniendo un amor tan dulce por su hermana, la neta es que estoy por llorar de ternura.

-si dices algo cursi, chino, te mataré-dijo de forma amenazante. No me importó, por supuesto que lo iba a hacer.

-claro que no, hermanito lindo. No podría hacer nada que haga entristecer a un alma tan pura y noble como la tuya-

Vi como lentamente se quitaba su sandalia y me lanzaba su mirada enojada. Con mi cerebro de genio, mis habilidades natas como líder, y mi profundo conocimiento de la cultura mexicana, por ende de Marco, concluí, a base de mi experiencia previa que lo mejor sería...

Correr.

Una persecución entre dos pubertos de casi 15 y 13 años donde el mayor huía por su vida y el menor le perseguía con intenciones asesinas. Parecíamos dos niños pequeños, sumándole las pijamas iguales. Esa estupidez duró un buen tiempo.

Nos veíamos ridículos y no me importó en lo más mínimo. Yo seguía haciendo comentarios que lo ponían cada vez más rojo, hasta dejé de mencionar a Coco, solo lo quería hacerlo enojar. Esto,amigos míos, se le conoce como venganza.

¿HIRO IS GAY? (Higuel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora