12

3.4K 228 37
                                    


19:00 p.m.

—Vístete...yo te llevaré a casa...o bien no sé si prefieras quedarte aqui...—

Dijo después de limpiarse un poco, esté estaba muy atento a celular parecía preocuparle algo, comenzó a quitarse la chamarra, el calor de su habitación era abrumador pude ver cómo incluso su cabello estaba levemente mojado.

Sin embargo a pesar de ser uno de los mejores encuentros sexuales que he tenido, Hawks no parecía estar del todo contento, yo simplemente creí que íbamos a hacer algo más, pero este solo comenzó a cambiarse con una ropa un poco más casual, mientras que yo solo lo miraba como tonta, este hombre definitivamente tiene el cuerpo de un dios griego.

—¿T/N?—

Preguntó confundido, pero yo estaba más confundida, hace un momento parecía que ambos nos queríamos comer vivos y ahora es frío y cortante.

—Yo...me quedo aquí—

¿QUE?

Estaba tan concentrada mirándolo que dije lo primero que pensé.

—¿Estás segura...? Bueno...yo tengo que irme hay comida en el refrigerador, ponte cómoda y duerme dónde gustes—

Dijo antes de darme un corto beso en los labios y salir por la ventana de su habitación, debo decir que me parecía un poco sospechosa su actitud además de que la ropa que usaba era muy oscura, trataba de ocultar su cabello rubio con una gorra y parte de su rostro con un cubrebocas.

Pero no le di muchas vueltas quizás tenía algo importante que hacer, todos saben que Hawks no es un héroe que permanezca en un solo lugar por mucho tiempo y al parecer tampoco permanecía en su casa todo el tiempo como algunos fans sospechaban.

Tomé un baño debo admitir que la casa de Keigo era bastante lujosa, era la primera vez que tomaba un baño "decente" mientras que en su refrigerador había demasiada comida congelada al parecer no tenía tiempo ni para hacerse algo de comer pero igual encontré unos cuántos ingredientes así que me prepare un poco de Takoyaki.

Mi uniforme no era del todo cómodo así que opte por tomar algo de su ropa, la cual aunque me quedaba un poco grande tanto por el tamaño de sus alas y por lo alto que es, aún así era cómoda.

Encendí la televisión que tenía en la sala y me dispuse a comer mientras veía algunas películas, cuánto menos sentí comenzaba a quedarme dormida y aunque no había tenido un día tan atareado por un momento sentí que podía dormir tranquila.

3:00 a.m.

Keigo había llegado, haciendo el más mínimo ruido puesto que te vio dormida en uno de los sillones a pesar de que se encontraba algo fastidiado y cansado al verte ahí dormida el sonrió mientras te cargaba hacia una de las habitaciones para que estuvieras más cómoda.

—Quedate conmigo...—

A pesar de que estabas medio dormida, lo tomaste del brazo para no dejarlo ir, el solo se limito a sonreír te obedeció pronto sentiste sus alas rojas cubriendo a ambos.

8:00 a.m.

—Buenos días linda...—

Pude escuchar la voz de Hawks cerca de mi oreja, mientras se asomaban los primeros rayos de sol por la ventana.

Ambos estábamos frente a frente, este tenía una delgada playera que parecía ser su pijama, aún me encontraba en sus alas eran bastante suaves.

—Buen día—

Dije sonriendo, debo decir que el dormir con el fue realmente cómodo, es tan cálido, su aroma y el como con un par de palabras puede alegrarme el día.

—Tenía planeado traerte el desayuno pero...te veias realmente hermosa entre mis alas que no quise despertarte—

Keigo tomo con delicadeza mi rostro y me dió un corto beso mientras acariciaba mi cabello, el momento no duró mucho puesto que el recibió una llamada, requerían su presencia en una junta y al ser su asistente también tenía que ir.

—Te traje algo de ropa, así que arréglate mientras que yo...—

¿Ropa?

—¿Entraste a mi casa?—

Claramente era la ropa que tenía en mi armario.

—Nena deberías de tener un poco más de seguridad en tu departamento y quizás...elegir ropa interior más sexy—

Keigo señaló unas panties de conejo, quiero aclarar que son de las pocas que tengo de ese tipo, eran de una colaboración con una de mis caricaturas favoritas, en mi cabeza era una buena idea (además de que estaban en descuento) pero al usarlas por primera vez supe que no eran las adecuadas para mi edad, aunque estás eran cómodas así que no ví ningún problema si las conservaba o bueno hasta ahora.

Solo me sonroje mientras que Keigo solo reía.

—Haré el desayuno linda, solo cámbiate—

Lo mire confundida, creí que no sabía cocinar al ver toda esa comida congelada me daba la impresión de que al estar tan ocupado no tenía tiempo para hacerse algo de comer.

—Tranquila...prometo que no haré explotar nada—

Dijo mientras dejaba un beso en mi mejilla.

Aún seguía algo avergonzada, al parecer tuvo tiempo ayer para fisgonear en mi casa pero seguía algo preocupada ayer llegó tarde, quiero preguntarle al respecto además de que pude ver cómo tenía un pequeño moretón en la espalda, más que un moretón parecía ser una quemadura.

¿Estará metido en algo ilegal?

Fue lo primero que pasó por mi cabeza.

Al ser un héroe, se supone que tienen que tener una buena reputación, algo de lo que Hawks carecía después del pequeño "show" que monto cuando lo nombraron el héroe número dos además de sus rumores que circulan por todo internet.

Termine de cambiarme y ahí está Keigo, este tenía un mandil rojo.

¿Hay algo que este hombre no haga bien?

El aroma de su cocina inundaba toda la casa, eran pancakes yo lo ayude un poco a acomodar la mesa, preparar un poco de té y picar algo de fruta para acompañarlos.

—Gracias por la comida—

Dije antes de iniciar a comer.

—Keigo...¿Me preguntaba ayer...?—

Tuve que tomar el valor para preguntar ni siquiera termine la pregunta cuando el ya me estaba mirando fijamente, como si lo que estuviera a punto de decir fuera algo malo.

—Nada importante yo solo tenía algunos asuntos que atender—

Eso era obvio pero quizás me lo hubiera dicho si no era "nada importante".

Algo me daba mala espina esa quemadura, estaba segura de que no lo tenía antes.

—Pero...en tu espalda...Keigo—

—No más preguntas, tenemos que irnos sube al auto yo iré en un momento—

Nunca me había respondido así de cortante y de forma tan seria, simplemente se limpio los restos de comida que tenía y me dejó ahí en la mesa, se dirigió a su habitación cerrando la misma de un portazo.

Keigo realmente se veía molesto, quizás no era nada y yo solo estaba siendo paranoica, hice lo que me ordeno y ambos permanecimos en silencio durante todo el trayecto a la agencia.

🌹⋆' 𝑀𝓎 𝐿𝒾𝓉𝓉𝓁𝑒 𝐵𝒾𝓇𝒹   '⋆🌹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora