Han pasado ya varios años desde la muerte de la líder del clan Lee, ahora, su único hijo varón ha sido dejado a cargo de su clan al ser el único que estaba en posesión de magia
Pero un día ... aquel poderoso mago llamado Shaoran Lee notó finalmente...
Al día siguiente Shaoran y Sakura se levantaban temprano, debían comenzar su entrenamiento de ataque ofensivo con magia y las 5 am era un gran hora ideal para comenzar el entrenamiento. Esto a Sakura no le parecía del todo lo mejor, deseaba dormir aún.
El chico fue hasta su habitación abriendo la puerta, la vio aun dormida y le dio un beso en la mejilla.
-Buenos días bella durmiente, es hora de iniciar tu entrenamiento mágico- la chica solo abrió un ojo para ver quien la despertaba, soltó una sonrisa y con su enorme fuerza tiró al chico a su cama en un abrazo.
-Hay que dormir otro poco- le dijo ella volviendo a entrar en una ensoñación.
-Sakura, el mocoso me pidió despertarte temprano- susurro Kero aún volando con cansancio viendo que el mocoso estaba apresado por Sakura en su cama. Este se transformó y soltó un rugido que bien pudo haber despertado a toda la casa y que por supuesto despertó a la chica de ojos verdes, lo peor, se despertó de mal humor con Kero y Shaoran.
-¡TE VOY A MATAR MOCOSO!- Si el león parecía atemorizante mas lo fue la cara de la chica que surgía detrás de ellos dos enfrascados en su pelea.
-¿Por que no dejan dormir?- Les dijo en un tono cada vez más molesto -¿Acaso piensan ir a recolectar hongos shitake?- Su cara ya se encontraba en una expresión horrorosa.
-Salgan de la habitación y déjenme vestirme en paz- Aquellos dos solo pudieron asentir de manera miedosa para quedarse fuera de la puerta.
-Eres un imbécil- le dijo Kero
-El único imbécil aquí eres tu- le respondió el otro calmado
-¡Al menos déjenme vestirme en santa paz!- Les gritó la otra desde su habitación pues evidentemente los había escuchado.
Se miraron el uno al otro furiosos por unos segundos y solo pudieron echarse a reír a carcajadas, en verdad peleaban por estupideces pero por el momento era mejor mantenerse unidos si no querían que la de ojos verdes los matara.
-Vámonos ya- les dijo saliendo vestida con su ropa deportiva - Kero, por favor corre a llamar Yue y nos vemos en el cuartel-. Kero fue rápidamente a la habitación de Yue sintiéndose algo incomodo pues temía molestar algo privado, pero antes de que este atinara si quiera a tocar la puerta el ser que se veía como humano salio de su habitación con cara de fastidio.
-Vámonos- articuló como si le hubieran interrumpido en algo sumamente importante.
-Vaya tu y Sakura si que se parecen en ese carácter horrible al despertar- le dijo Kero, por alguna extraña razón Yue sonrió y al león le pareció que hoy iba a ser un día muy muy raro.
-Callate- dijo volando.
Una vez que todos estuvieron reunidos en la sala de entrenamientos Shaoran comenzó a llevar a la sala donde entrenarían una especie de robots mecánicos. Los bañó de su magia y estos parecieron cobrar vida.
-Les doy la bienvenida a la clase de ataque y defensa mágica, el día de hoy y durante estos dos meses aprenderán a usar sus habilidades en equipo y a perfeccionar sus habilidades individuales- Todos se miraron entre si esperando a lo siguiente.
-Kero, Yue- dijo Shaoran - ¿Cual es su tiempo de transformación?-
-¿Tal vez unos 30 segundos?- respondió Kero. Yue solo asintió estando de acuerdo con el león
-Sakura, ¿En cuanto tiempo puedes abrir tu llave?-
-Tal vez un minuto- Respondió dudosa.
-Entendido- posó sus brazos uno al otro meditativo - Es importante que sepan que esto no es como antes que nos hemos enfrentado a las cartas, este enemigo ha hecho daño a varios sectores del país y ante un ataque no va a tener piedad con nosotros-
-Esa información es algo que ya sabemos mocoso- le dijo el león en un tono bastante engredo -Dinos algo que no sepamos ya-
-Los robots van a registrar sus habilidades y van a copiarlas, hoy trabajaremos en un ejercicio sencillo, practicaremos su velocidad de transformación y ataque-
-En español mocoso- Le dijo kero solo por la diversión de hacer enfurecer a Shaoran.
-Lo que quiero decir es que estarán transformándose una y otra vez para mejorar su tiempo de transformación, inmediatamente después de transformarse van a lanzar un ataque lo más rápido que puedan, esto es un ejercicio de resistencia mágica que será útil en todos los sentidos-
- Oooooh, ya veo- dijo Sakura meditabunda.
-Entonces, comiencen- dijo Shaoran, los robots comenzaron a moverse y ellos a transformarse, duraron en esa misma práctica al rededor de una hora o un poco más, hasta que supieron que era hora de ir a ducharse, desayunar e ir a clases.
En el desayuno como era costumbre todos hablaban de manera amena compartiendo sus experiencias. Yue se sentó al lado de Touya.
-¿Iras a la universidad?- le preguntó en forma de ángel, en esa casa no tenía por que ocultar su identidad.
-Eso creo, tengo que entregar algunos documentos para añadirme a las clases mañana-
-Ya veo- dijo el alado.
Shaoran y Sakura engulleron su desayuno en menos de cinco minutos, cosa que a los demás miembros de la habitación les pareció una habilidad bastante útil. Sakura tomó a Kero en su bolso y salieron a prisa hacia el auto que los llevaría a clases.
Una vez llegados a la escuela se despidieron para ir cada uno rumbo a su respectivo departamento universitario en donde Sakura tenía nuevamente su clase favorita: Bases de repostería. Para Kero esa clase era se llamaba cosas pastelosas que huelen bien y puedo comerme.
Despues de dos horas de la clase de cosas pastelosas, Sakura tuvo otras dos clases hasta su hora del almuerzo, en donde se encontró a Shaoran, juntos decidieron que tomarían el almuerzo a solas ya que Kero había ido con ellos ese día.
-Hoy las clases fueron más pesadas de lo normal- dijo Shaoran. -Pero me alegra que estamos juntos en el almuerzo y en las clases de baile- la chica le sonrió por lo dulce de su comentario.
-Que trajeron para el almuerzo, me siento hambriento- dijo Kero saliendo de su bolsa, pero al instante se quedó petrificado, como si alguien lo hubiese visto.
-Lee-san, haz olvidado tus apuntes de anatomía- dijo una chica que llegaba corriendo. Sakura la reconocía del día anterior por sus peculiares lentes redondos, era Wen-Gong, que una vez le dio sus apuntes a Shaoran se retiró rápido pues no deseaba interrumpir a los chicos.
-Que lindo osito de felpa estaba ahí tumbado dijo Wen-Gong, ojalá tuviera uno así- dijo siguiendo su camino.
El camino del enemigo se acercaba a Wen Gong, a Sakura, a Shaoran, a todos...
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Ya se vienen los ataques re directotes a nuestros magos, sintonicen la siguiente semana para más.Creo que la historia si va a tener más de treinta capítulos jeje.