2: Puesto Nuevo

431 46 0
                                    

Una vez dentro de las oficinas de la FBI de Virginia, me dirigí al mostrador principal, donde me recibió una mujer pelirroja, y muy bonita, unos años más grande que yo.
- Disculpe, buenos días. Mi nombre es Cate Vázquez, me contrataron recientemente para la UAC, pero es mi primera vez yendo al departamento y me temo que no sé  cómo llegar, ¿podría ayudarme? -. Le pregunté a la mujer, fijándome que su nombre era Genevive y en unos ojos verdes espectaculares.
- Sí, claro. Enseguida se lo comunico a alguien del departamento para que le dé el tour y la guíe -. Me dijo con una sonrisa y voz de lo más amable y servicial.

Unos minutos más tarde, llegó un hombre alto, vestido de traje, de cabello negro y ojos azules, con el ceño fruncido y muy serio, se dirigió a Genevive y le dijo:
- Hola, Gen, ¿me llamaste? - dijo el hombre mientras revisaba los papeles que Genevive, en cuanto lo vió, le entregó.
- Sí, hay una chica llamada Cate Vázquez esperándole. Dice que es su primer día aquí.
- Ah, claro. Vázquez. Se me olvidaba, ¿dónde se encuentra? -. Genevive volteó a mi dirección y me señaló con la cabeza.
El hombre se acerco a paso apresurado y yo me levanté de la silla en la que estaba sentada.
- Hola, soy el agente Aaron Hotchner. Me suelen llamar Hotch -. Se presentó a la vez que me acercaba la mano, la cual estreché. Y me presenté también:
- Mucho gusto. Cate Vázquez. Sé que es muy difícil conseguir puesto aquí, así que estoy muy agradecida.
- Eso es muy cierto. Pero alguien con un historial como el tuyo y recomendación especial de J.J. es difícil de ignorar. Sólo espero que seas igual de buena como me han dicho. - dijo Hotch, sin mostrarse a la defensiva o agresivo, más bien curioso por ver mis conocimientos en primer plano. - Ven, sígueme. Es por aquí.

Hotch caminaba de manera rápida y, debido a que era más alto que yo, me costaba seguirle el paso sin trotar cada 5 pasos, pero no me quedé atrás. Mientras caminabamos hacía las oficinas de la UAC, me explicaba cosas como mi horario de trabajo, asuntos del papeleo después de cada caso, el puesto que él tenía en la Unidad y cuál tendría yo a partir de hoy.
- Como ya sabes, J.J. forma parte del grupo, pero en seguida conoceras a los demás. No te preocupes, por lo que veo, no te costará encajar con nosotros. Y recuerda, en nuestro trabajo no hay lugar para la timidez, si quieres decir algo que crees aporta a algún caso, dilo. - me dijo Hotch mientras continuabamos caminando.
- No se preocupe, señor. Puedo ser muchas cosas, pero timidez, no es una de ellas. Así que no espere que me quede callada si tengo algo en mente. - le respondí, mientras observaba por donde íbamos para tratar de recordalo cuando me fuera una vez terminado mi trabajo y no perderme.

Cuando nos encontramos frente a un elevador. Hotch presionó el botón de arriba y sonó su celular del bolsillo interior de su traje.

- Hotchner, diga... Sí... Claro. En un momento estoy con usted. Cate, me temo que me tengo que ir, pero sube al elevador, presiona el piso 2 y te encontrarás justo en las oficinas -. Me dijo mientras detenía el elevador, que ya había llegado, con un brazo. - Reid, ella es Cate, hoy es su primer día aquí. Presentala con los demás cuando lleguen. Estaré con ustedes para hablar del nuevo caso en 10 minutos -. No había reparado en la figura que estaba al fondo del elevador, hasta que Hotch le mencionó y se dirigió a él.
- Claro, yo lo hago -. Dijo la figura y el elevador cerró sus puertas.

Mire con atención al sujeto y, debió él haber hecho lo mismo porque me observó por un momento y sentí cierta emoción cuando me di cuenta de quién era.

- Hey, eres el chico 'Guerra y Paz'. El de la cafetería -. Después de terminar esta frase, el chico se atimido un poco más y balbuceo:
- Sí, soy yo. El de la cafetería de esta mañana, el que estaba leyendo "Guerra y Paz"... Porque es un gran libro... - dijo tartamudeando. - Mi nombre es Reid. Spencer Reid -. Se presentó y me extendió la mano con la que no tenía sostenido un libro.
- Cate. Cate Vázquez. Mucho gusto -. Dije con otra sonrisa idéntica a la que le había dedicado en la cafetería. - ¿Qué libro que tienes allí? - le pregunté.
- Oh, este libro... Estem... Es Jane Austen. "Orgullo y Prejuicio". - dijo mientras jugueteaba y dejaba a la vista la novela. Me sorprendí y dije:
- Wow, Jane Austen. Perdón, pero no te tomo como el chico que lee ese tipo de libros.
- Y no lo soy, pero quería un poco de lectura ligera. Ya sabes, para acabar en unos minutos.
Al escuchar estas palabras, quedé más sorprendida todavía.
- ¿Tan rápido lees? Espera, J.J. me ha hablado de ti. Eres el que lee 20,000 palabras por minuto, el que tiene 187 de IQ, ¿no es cierto? -. Cuando terminé de hablar, parecía un tanto pensativo.
- ¿Recordaste los números exactos? -. Preguntó algo extrañado, con media sonrisa y el ceño un tanto fruncido.
- Claro que sí. Es increíble. Con lo que me fascina leer, me encantaría empezar y acabar libros completos a la hora del almuerzo. Ha de ser genial tener tanto conocimiento. -. Le respondí algo emocionada, a lo que él sonrió con la cabeza agachada.

El elevador paró y las puertas se abrieron. Spencer salió primero y sostuvo la puerta para que saliera yo.
- Sígueme, la sala de presentaciones es por aquí. Ya estará todo el equipo allí.

Perfect, for you. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora