Jessica caminaba por todo el vampisuper, especificamenre en la zona de dulces.
-¿Por qué es tan difícil escojer?- Renchinaba con desespero la cantidad de opciones de vampidulces.
-¿Puedo ayudarla en algo chica?- Unaujer que por la topa, indiciaba que era una empleada del lugar; se acercó a Jessica.
-¿Puedes recomendarme la mejor caja de vampidulces?- Jessica miro con duda a esa mujer.
-Claro, mira, estos chocolates traen relleno de sangre de muy buena calidad, cosecha de 1897- La mujer realmente tenía un aspecto amigable.
"De segufo solo era mi imaginación" Pensó Jessica, pues ella no era de confiar tan fácil en desconocidos.
-Perfecto, me los llevo, con estos si o si-Jessica sonrió en grande al tomar la caja de chocolates en sus manos.
Se dirigió a la caja registradora para pagar los dulce y poder volver a la superficie. Delange de ella habian 3 vampiros más.
-Por Drácula, más rapido es una cucaracha- Maldijo en voz baja.
-¿Jessica?- Alguien detrás de ella la llamó.
-¿Eh?- Volteó y se sorprendio al ver quién era. -Temo, hola, ¿Q-qué haces aquí?-
-Comprando algunas cosas, ¿Y tú?-
-
-Ehm...¿Yo?- Jessica trataba de esconder la caja de dulces detrás suyo.
-¡Siguiente!- Gritó la encargada.
Jessica temía pner la caja para pagarla, pues si Temo lo veía le iba hacer miles de pregunta, aunque sea inmortal no tenía tiempo para eso.
Pero de todo modos tenía que pagar los dulces para poder irse rápido al mundo mortal.
Suspiro ligeramente y se preparo para las miles de preguntas.
-Jess, ¿Para quién son esos vampidulces?- Preguntó con curiosidad.
-Son para mi papá, si, él me mando a comprarle una caja de vampidulces- Contesto con rapidez.
—Jessi...a tu papá no le gustan los vampidulces—
Jessica comenzo a mirar de un lado a otro, la intensa mirada de Temo la ponía bastante nerviosa.
—Perdón Temo, pero prometí no abrir laboca por ahora, y un vampiro siempre cumle su palabra— Dijp poniendose firme.
Pago los dulces y se fue volando rápidamente al mundo humano.
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—Costo mucho, pero ya terminamos el letrero, quedó perfecto— Isabella miro con una sonrisa aquél letrero.
—Espero y valga la pena saltarnos las primeras clases y a la regañiza que nos dará papá— Exclamó Laura.
—Valdrá la pena Lau, ¿Y a todo este a ti desde cuando te importa faltar a una clase?— Isa miró seriamente a su hermana.
—¿Todo listo niñas?— Daniel llegó interrumpiendo el interrogatorio de Isabella.
—Sip, nuestra parte está hecha, bueno la primera parte— Contesto Laura. —¿Y tú? ¿Lista la canción?—
—Cuando tienes buenas inspirscio escribir una canción es cosa de niños— Dijo con una sonrisa y mostrando una memoria. —En eata memoria está el instrumental, ls canción la cantare normal—
