Daniel regresaba del parqué con la mirada .baja.
—Ya llegué.— Aviso a sus padres quiénes estaban en la sala.
—Bueno, ¡Tu comida esta en el refri!.— Gritó su padre Temo, desde la sala.
Con un simple "Bien" se dirigió a la cocina.
Ya en la cocina, sacó su comida del refrigerador para calentarla en el microondas.
Se encontraba comiendo su comida cuando una chica de pelienegra y dr ojos color café, entró por la ventanaa de la cocina.
—¿Jessica? ¿Qué haces aquí?.— Preguntó con la respiración acelerada por el susto.
—Pue quería visitar a mi único amigo mortal.—Decía la chica mientras acomodaba su cabrllo.
Jessica Carvajal, una chica delegada, de pelo negro y ojos café. Vampira adolescente, cuenta con la apariencia de una joven 17 años, pero su edad real es de 257 años.
Conoce a Daniel desde que él era chiquito, la familia Córcea López es muy cercana a la família de Jessica.
—Pues venga, tu nueva casa es linda.— Elogió la chica.
—Pues gracias, pero quisiera volver a mi antigua casa.— Contesto mientras terminaba su comida.
—No creo que sea tan malo, conocerás a más personas, a otros adolescentes normales.— Lo último lo dijo con algo de tristeza, a pesar de llevar años siendo vampira ella desearía ser una chica normal.
—Y con familias normales, yo no soy tan normal. — Contestó con la mirada baja. —Hubiera querido que mi familia fuera normal.—
—Deberías sentirte especial, no todos tienen unos padres vampiros, los tendrás para toda la eternidad.— Exclamó la chica con una sonrisa. —Aparte que recuerda que el próximo cumples los 18 y tú decides si quieres seguir siendo un simple mortal o convertirte en vampiro.—
—Yo ya tengo en claro lo que quiero, quiero seguir siendo un mortal.— Afirmó el ojimiel, muy seguro de su decisión.
—Ay chiquis, esperemos a un año, estoy segura que cambiarlas de decisión.— La chica soltó una burlona sonrisa. —Ser vampiro no es tan malo, y más cuando descubres tu poder.—
La chica volteó a la ventana por donde había entrado, fijó su mirada seguramente en la ventana y de un momento rayos rojos salieron de sus ojos havuendo un gran círculo en la ventana.
—No manches, apenas llegamos hoy y ya hiciste daños, Jess.— Exclamó el afolescente.
—Rayos láser, amo mi poder.— Exclamó la chica con un baile bastante raro.
—¿Pero qué pasó aquí?.— Temo llego rápido a la cocina al escuchar el ruido.
—Terrible noche señor.— Saludó la chica al mayor.
—Terrible noche, Jessica.— Devolvió el saludo para luego retirarse.
—Ya debo irme a dormir, buemo, todavía es muy temprano, pero esto de la mudanza me dejo cansado. Terrible noche Jessica.— Bostezo un poco.
—Cierto, tú si duermes.— Jessica rodó los ojos y se subió a la ventana para salir vilabdo por ahí. —Terrible noche, Daniel.—
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Aristóteles y Temo se encontraban ya en su habitación.
—Tahi, Jessica t Daniel estaban en la cocina y...— Temo calló por un momento. —Jessica le decidía a Daniel que ya el próximo año él cumple los 18, y tendrá que elegir si seguir siendo mortal o volverse un vampiro y aseguró de lo que dijo, quiere seguir siendo un humano, ¿Tú que opinas?.—
