˗ˏˋ • 𝕭𝖊𝖇𝖎𝖙𝖆 ࿔*:･ﾟ🎀

Cuando el no está.

~18~

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- ¿A donde vas? - Pregunté tapando la mitad de mi rostro.

- No puedes saber - terminó de colocarse el pantalón el cual le quedaba... bastante bien.

- ¿Qué vas a hacer?

- No puedes saber - Repitió colocándose la camisa negra la cual le ajustada un poco en los... brazos - Ven un momento.

Me moví lentamente en la cama mientras me quejaba. De una pequeña caja sacó una llave y fue hacia el armario, al salir tenía algo en su mano, se colocó esa cosa que parecía ser un saco sin mangas... era un corset, un corset masculino, en el momento en el que lo ajustó estoy completamente segura, de que veía la perfección en persona, claro, físicamente. Sentí como mi boca se abrió lentamente al momento en el que se giró hacia mi, aquel corset con apariencia de saco sin mangas era de un color blanco con negro.

- ¿Vas a venir? - Me preguntó dirigiéndose al armario nuevamente.

Sin pensarlo mucho más salí de la cama y me acerqué a el. Se veía como uno de esos hombre sofisticados de familias adineradas, el cabello y sus ojos le daban el toque... lo más fascinante. Se giró hacia mi con aparentemente otro corset en su mano.

- Arriba los brazos - Levanté los brazos dejando que sacara la camiseta que me puso hace unos minutos.

Este era femenino, de color rosado con detalles blancos lo terminó de abrochar y al verme por el espejo noté que los pequeños diamantes en mis clavículas combinaban con el corset.

- ¿Te gusta? - Ajustó el corset. Realmente me apretaba un poco pero no tanto como para no poder respirar, mi cintura se veía más pequeña lo cual anchaba mis caderas y mis pechos - Una muñequita.

- M... me gusta - Le dije lentamente.

- Perfecto - Al cabo de unos segundos volvía a quitarme el corset y a ponerme mi camiseta.

- ¿Papi, puedo volver a la cama? - El me miró algo confundido - ¿puedo?

- Claro - Me dirigí a la cama mientras el guardaba el corset.

Me volví a meter debajo de las sábanas y cerré mis ojos tratando de volver a dormirme apesar de estar casi una hora despierta. Parte de la sábana fue retirada de mi rostro.

- Dale un beso a papi - Me ordenó acercándose. Giré mi rostro pero me tomó de las mejillas y me acercó a el.

- No - Me pude soltar de su agarre y me volví a meter rápidamente debajo de las sábanas - Se lo puedes pedir a... - en ese momento cerré la boca.

- ¿A quién, Rose? - Volvió a mover la sábana - Bebé... - Me moví acomodandome - Bien, espero que me digas cuando vuelva.

Ay... no se que hice. Escuché la puerta cerrarse, y segundos después se escuchó la puerta principal.

Me puse de pie y salí de la habitación, me acerqué a las escaleras viendo que la puerta estaba cerrada. Bajé las escaleras y me acerqué a la cocina, ví una silueta femenina antes de entrar a la cocina.