AIMER￤ADRIEN AGRESTE.

୨ 4.

──── ❝ AIMER ❞ ────

four.￤nathaniel

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          TODA LA CLASE, o al menos los que había elegido esa clase, se encontraban en el laboratorio. Ya habían pasado alrededor de mes y medio desde la sesión de fotos de Amelié y Adrien. La chica hbaía estado recibiendo muchas ofertas de trabajo, pero había estado rechazando la mayoría porque no le parecían conveniente por la ganancia o no le veía mucha vericidad a la propuesta. 

  —¡Nathaniel! ¿Qué estás dibujando? —preguntó la profesora en dirección al chico que antes tenía su atención en su cuaderno. —Es por estos dibujitos que repruebas ciencias. 

  —Lo lamento.

  —Ve a la oficina del director y muéstrale esos garabatos. Ahí sí lo lamentaras.

Nathaniel iba en camino hacia la oficina, abrazado a su mochila, pero se tropezó con la mochila de Marinette, terminando cara contra el suelo y con su libreta a un metro suyo, abierta exactamente en el último dibujo. 

  —Mira, Sabrina —dijo Chloé que había tomado el cuaderno para verlo. —, es él como superhéroe. Mira a quién está salvando. Es Amelié. —la chica se sorprendió. —Está enamoradísimo de ti, Amelié.

  —¡Suficiente! ¡Nathaniel, ve! 

Amelié volteó hacia Adrien, que se había sentado junto a ella gracias a que Nino había faltado. ¿Por qué? Simple, porque había escuchado un gruñido extraño de parte de él apenas Chloé dijo las últimas palabras.

  —¿Estás bien, rubio?

  —Estoy perfecto. —respondió cortante antes de volver su atención al pizarrón.

  —El siguiente grupo de física de partículas es Amelié, Alya y Adrien. —anunció la profesora y Amelié quiso sonreírle a Adrien pero él seguía sin mirarla, lo cual la llevó a mirar a Alya detrás suya que sólo pudo atinar a encogerse de hombros. —Y luego Sabrina, Chloé y Marinette.

A la tarde, todos los grupos se juntaron en la biblioteca para comenzar sus proyectos, pero mientras Amelié buscaba sus libros, Chloé se había acercado a ella diciendole que debía renunciar a su grupo para que ella pudiera trabajar con Adrien.

Amelié ya estaba cansada, y estaba a punto de gritarle todo lo que se ocurriera a Chloé cuando un secador de cabello gigante apareció y comenzó a perseguir a Chloé sorprendiendo a Amelié.

Ladybug y Cat Noir salvaron a Chloé y la habían llevado a su casa, Alya había desaparecido también por alguna razón por lo que Amelié decidió volver a su casa.

Estaba pasando a limpio unas notas de clase cuando escuchó unos pasos en su ventana, que la llevaron a voltearse, justo para ver cómo dicha ventana se borraba de a poco para dar paso al culpable del desastre en la biblioteca.

  —Eres tú... el de la biblioteca, ¿qué haces aquí? —preguntó ella tratando de ocultar el miedo que estaba sintiendo.

  —Sólo quería verte.

  —Está bien. Pero, ¿por qué atacaste a Chloé?

  —Porque es cruel y egoísta. 

  —Eso no lo puedo discutir. —respondió Amelié acomodandose en su asiento y mirando al chico frente a ella con curiosidad. —¿Vas a lastimarme?