──── ❝ AIMER ❞ ────
eight.¦glaciator
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EL DÍA ESCOLAR había llegado a su fin y Amelié se encontraba guardando las cosas que llevaría a casa por el fin de semana de su casillero.
Marinette no era ninguna tonta, se había dado cuenta del extraño actuar que su hermana había tenido desde unos días atrás. Antes solía ser extrovertida, amigable y le sonreía a todos, pero esos últimos días había estado sin hablar mucho, pasaba de todo lo que viera que no era importante y se la pasaba con sus auriculares. Además de que había comenzado a volver a casa sola, sin esperarla.
—¿Lié? —escuchó Amelié y se quitó los auriculares para voltear hacia la persona que la había llamado, arrepintiéndose de inmediato. —Hola. —saludó Adrien y ella bajó la mirada antes de elevarla a su hermana que observaba todo con el ceño fruncido.
—Hola, Adrien. —respondió ella sonriendo un poco, pero volviendo a voltear a seguir con lo suyo.
—Escucha yo... quería saber si... bueno —murmuró él nervioso y Amelié le miró extrañada por sus nervios. —¿te gustaría cenar conmigo esta noche en una azotea?
Amelié pudo jurar sentir su corazón palpitar con fuerza, y escucharlo en sus oídos, a la misma vez que en su voz había dos voces diciendo "dile que sí, sabes que lo quieres" y "no seas una mala hermana, dile que no".
—Bueno... yo de hecho tenía pensado ir con los chicos a por un helado de André. —era mentira, ella no lo tenía pensado pero si eso funcionaba para no tener esa cena, iría.
—Entiendo —susurró él antes de sonreír hacia ella. —, si terminan antes de tiempo y sigues con un poco de hambre, ve a verme, te enviaré la dirección.
Le dejó un beso en la mejilla antes de alejarse, dejándola a ella con los ojos cerrados y una expresión de angustia en el rostro.
Cerró su casillero con fuerza y se comenzó a alejar de la escuela, sin mirar atrás. Ni siquiera cuando escuchó los gritos de su hermana llamándola.
—¡Amelié! —escuchó el llamado de su hermana cuando ambas se encontraban dentro de la casa, y Lié subía las escaleras para subir al cuarto. —¡Amelié, sé que puedes oírme!
—Nunca dije que no pudiera, Mari. —respondió Amelié volteando hacia ella un segundo antes de seguir su camino.
—¿Qué demonios te está pasando? —preguntó Marinette cuando Amelié se dejó caer en su cama con los ojos cerrados. —Haz estado actuando extraño como por dos semanas y de chiste hablas con mamá, papá y Adrien.
Amelié soltó un suspiro antes de sentarse. ¿Qué se supone que iba a decirle? Estaba sintiendo cosas por el chico que se juró no sentir nada, porque su hermana estaba obsesionadísima con él.
—No es nada de lo que debas preocuparte, se me va a pasar pronto, descuida. —aseguró ella aunque ni se lo creía. —¿Hoy nos toca preparar la cena, cierto?
Así fue cómo Amelié manipuló la mente de Marinette para que olvidara el tema: fingiendo que nada había pasado y que todos estaba perfectamente bien. Durante el resto de la tarde, las dos pasaron un buen rato preparando la cena, para luego disfrutarla con sus padres.
Los habían interrumpido un poco cuando aparecieron con el postre y ellas se acordaron de la salida con sus amigos.
Al encontrarse, Marinette se llevó una decepción al enterarse de que Adrien no iría, mientras que Amelié se sintió mal porque sabía dónde se encontraba el rubio. Todos juntos entraron en una búsqueda por el heladero, hasta encontrarlo en uno de los puentes.
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AIMER¦ADRIEN AGRESTE.
Fanfiction──── ❝ AIMER ❞ ──── Amelié Dupain-Cheng es feliz con su vida; tiene una hermana con la que tiene una relación envidiable, dos padres que la aman y amigos por toda su escuela. Pero todo se descolocará cuando Adrien Agreste aparezca, cambiando tod...