"Reencuentro"

Cap.7{Malos recuerdos y un vagabundo}

El chico tomó asiento en la silla delante del escritorio mientras respiraba hondo -Lisa ésto no es una buena idea. . .- dijo preocupado -¿Te sientes incómodo por qué soy mujer?- interrogó la menor -En una instancia, si. . . Soy un varón, pero creo que lo más avergonzante es que seas mi hermana y me siento algo avergonzado hablando de mi pasado contigo. . .- dijo el peliblanco totalmente disgustado por la idea de que su hermana conociera su pasado y sus secretos -Soy una profesional Lincoln, sea tu hermana o una desconocida respetaré tu privacidad y te trataré como un paciente que requiere de sutil atención- La menor trataba de "Calmar las aguas" pues notaba el nerviosismo de su hermano.

Sacó del cajón de su escritorio una pequeña libreta, de su bata un bolígrafo y comenzó con la sesión –Supongo que debo empezar desde. . . Ése día. . .– dijo algo incómoda, quizá su hermano tenía razón –Yo. . . No recuerdo muy bien muchas cosas, pero nunca olvidare ese día, nunca– Habló con pesadez, respiraba agitado y sus manos temblaban –Era mi cumpleaños. . . Hicimos una gran fiesta con todas las personas que conocimos,  muchas personas que habíamos conocido estaban ahí, era el mejor día de mi corta vida, todos éran felices. . .– su actitud no era diferente a la de cualquier adicto sin su droga habitual, estaba muy nervioso, prácticamente era una gelatina humana –La fiesta estaba en su máximo apogeo. . . Y fué ahí cuando sucedió. . .– su garganta se cerró e impidió que siguiera hablando, lágrimas comenzaron a salir. . . –Yo. . . Había invitado a Ronnie Anne, solo era para terminar bien. . . Sin rencores, pero ella no lo vió así, ella en Medio de la fiesta, mientras todos miraban, me besó. . .– sostuvo la silla con todas sus fuerzas e incluso sus uñas desgarraron un poco el cuero de ésta –No supe cómo reaccionar, ella y yo habíamos terminado, fué cuando todo se fue al carajo, las personas miraron cómo Lynn saltó de la nada y comenzó a golpearla. . .– Su rostro se llenó de lágrimas recordando cada segundo de ése momento –Lynn fue demasiado lejos, trate de hablar con ella pero sólo seguía golpeándola, entre todos tuvimos que detenerla,  Ronnie. . . Ronnie Anne acabó en el hospital– un silencio se apoderó de aquella sala, Lisa seguía escribiendo –Fué entonces cuándo mamá y papá descubrieron tu relación con nuestras hermanas. . .– Lincoln asintió levemente –Mamá se volvió irracional, me acusó de muchas cosas, que a día de hoy no puedo olvidar, ésa mirada. . . Esa mirada llena de odio. . .– su piel se volvió pálida y sus ojos no paraba de soltar lágrimas, con cierta torpeza tomó de nuevo el frasco para tomar un par de las pastillas enormes que contenían sin agua, solamente las tragó –Mamá insistió en llevarme a un reformatorio después de enterarse de lo que estábamos haciendo, me culpó a mi, y las demás. . .  Sólo callaron, al final lo último que supe de ustedes es que mamá se divorcio de papá poco después de que me llevarán a mi al reformatorio– Lisa miraba con tristeza a su hermano, ¿Cómo pudo su madre dejar de lado a un hijo? –Fueron años muy largos para mí ahí dentro, tan pronto entré. . . Los chicos de adentro me golpearon hasta el hartazgo, los guardias fueron peor y ni hablar de los profesores, esos eran los peores, me castigaban cruelmente con azotes y llegaron a quemarme con algúna clase de hierro. . .– Lisa miró horrorizada por lo que contaba su hermano con tanta naturalidad, ¿era por eso que aún a pesar de ser atravesado por un bolígrafo seguía en ese estado?  –Pero ¿Cuál era la razón por la cuál. . . – preguntó Lisa, Lincoln miró directamente a su hermana –Todos odian a los violadores. . . Mamá me había enviado con ése antecedente– Contestó fríamente.

Tras varios segundos de silencio incómodo Lisa volvió a cuestionar –¿Cómo era un día normal ahí dentro?– Lincoln pensó durante unos segundos –Mi día comenzaba con una balde de agua fría para despertar y asearme, después me formaba para comer algo, nos enviaban a clases para no perder la escolaridad, dónde por supuesto los profesores eran más estrictos que los guardias, odiaban a todos los chicos, golpeaban con una regla las puntas de los dedos, ni siquiera podías defenderte pues era considerado "rebeldía" y era castigado con aislamiento, ¡DIOS! Cómo odiaba esa maldita caja de metal– gritó   –Después nos llevaban al comedor de nuevo, la comida era asquerosa, e incluso de vez en cuando podías encontrarte con insectos y desechos de animales en ella, iugh– dijo sacudiendo su cuerpo recordando ese sentimiento de asco por la comida y un escalofrío en su espalda –Al terminar salíamos afuera la mayoría del tiempo, unos con trabajos forzados para castigos y otros por qué no tenían nada que hacer, había desde carpintería, hasta el aprendizaje con computadoras. . . Yo solo elegí un poco de todo para no aburrirme, después de ese tiempo repasaban la lista en cada habitación para asegurar que nadie haya escapado y quién se hubiera atrevido a tal cosa lo azotaban en un poste al mediodía, todos miraban estupefactos ese tipo de eventos– detuvo la historia para tomar de nuevo otro par de pastillas de aquel frasco marrón –¿Algúna vez intentaste escapar?– preguntó Lisa mostrando preocupación –Más veces de lo que nadie intentó. . .– tocó inconcientemente su espalda –Bien. . . Supongo, que eso estará bien por hoy quizá debamos dejar el resto para mañana– dijo cerrando la libreta y limpiando un par de lágrimas de sus ojos –Gracias hermana. . . De verdad te agradezco que hagas esto por mí, no tengo mucho con quien hablar de ésto– dijo volviendo en sí.