Capítulo-10

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No se olviden de dar estrellita y comentar 🤗💜.

—Amiga, de verdad te ves terriblemente mal. -Admite la co-capitana de las animadoras, la cual se encontraba colocandole un paño con agua fría en la frente, intentando bajarle la fiebre.

¡Solo a su amiga se le ocurre vagar bajo la lluvia!.

—Ni me lo recuerdes... -La corredora pasa su mano por su rostro al sentir las gotas de agua bajar por su frente.

Estaba rodeada por retazos de papel higiénico arrugados. ¡Esa gripe es horrible!; Tiene la nariz aguada y mocosa, su cuerpo está débil, está ardiendo terriblemente, tose y estornuda a cada momento, ¡Por esa razón tiene la nariz roja e irritada!, y no tiene hambre. ¡Eso es una pesadilla!.

Su amiga trajo pizza y no ha podido comer ni siquiera un peperoni.

—Toma. -La pelirroja le entrega una botella de refresco para que se le pase un poco el malestar.

—Gracias. -La castaña toma de a pocos tragos aquella bebida, pone la botella entre sus piernas y mira a su amiga.

Se preguntaran; ¿Y su padres y hermanos?. Pues fácil, su padre, trabajando, sus hermanos estudiando, su padre no les permitió quedarse sabiendo que era una excusa para faltar a clases.

Su padre iba a quedarse con ella, pero la linda amiga de la corredora se ofreció a cuidarla, porque según el progenitor de los Rollins; "Alana es buena influencia". Lo cual no es del todo cierto.

La pelirroja se levantó y camino alrededor de la habitación, fijando su vista en una chaqueta deportiva de hombre, colgada en la puerta del closet.

—¿Uh?. Rebeca, ¿Que haces con la chaqueta de Blackmoon?. -Pregunta frunciendo el ceño, volteandose, agarrando el gancho que sostenía la chaqueta.

—Pues, me la prestó. -La corredora se alza de hombros restándole importancia al asunto. —¿Ahora es que la notas?. Lleva en ese lugar desde la mañana.

—Ya eh visto tanto tu habitación que ya no me esfuerzo por notar cosas nuevas. -Dejo la chaqueta en aquel lugar y volvió a sentarse junto a su amiga y le quitó el paño de la frente.

                                     ........

Jueves 7:00 A.M.

Dos días, ¡Dos miseros días!. La pobre corredora tuvo que mantenerse encerrada en su cuarto. Aislada de la humanidad, viendo películas románticas cliché las cuales eran traídas por su amiga, ¡Ella odia las películas románticas!.

Ver a los protagonistas besarse y tener una linda historia de amor, para luego sentirse mal porque nunca tendrás algo así, definitivamente, eso no es bonito. Cuando ella se consiga una hermosa pareja, ¡Bienvenidas sean esas películas en su televisor!.

Hasta entonces, prefiere tenerlas lejos... Muy, muy, lejos.

—Ya pueden bajar. -Dice Ryan al por fin estacionarse perfectamente, apagando el motor de la camioneta.

—¿Cuando manejare yo?. -Pregunta la corredora, acercándose a los asientos de adelante, mirando a sus hermanos mayores.

—Mirala, Ry. Ganó sólo un partido y ahora se cree corredora de carreras profesional. -Dice el corredor con dejes de burla, provocando que los demás hermanos se rían y la chica frunza el ceño. —Que te quede claro que el siguiente en manejar este vehículo seré yo, Rebeca.

—Estas estupido, Royce. Se nota a leguas que Ryan dejara de manejar esta camioneta al irse a la universidad, el siguiente año. Y tú te irás con Ryan porque tienen la misma edad.

Ganar tu corazón  [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora