Mal de Amores [Karmaland ]

CAPITULO 5 - UN MOMENTO ESPECIAL

Fargan se despierta temprano, acomoda la cobija en el sofá, camina hacia la cocina y saca algunas cosas de la nevera para comenzar a preparar algo para el desayuno. Como le dijo a Willy hace unos días, el no sabe cocinar pero por ese chico haría hasta lo imposible. Unos minutos después Willy hace presencia en la cocina.

- Buenos días, ¿qué tal dormiste? - pregunta Fargan 

- Buenos días - responde el albino sonriente - Dormí bien, ¿y tu?

- Igual eh dormido bien, gracias 

Willy se sonroja al ver a aquel chico en su cocina, con su ropa puesta y preparándole el desayuno. Si cualquier otra persona los viera pensaría que son pareja, pero lastimosamente no es así. 

- ¿Te ayudo en algo? - pregunta el albino 

- No, hoy cocino yo - responde Fargan - Tu siéntate a esperar mi deliciosa creación

El chico no insiste mas, se aleja de la cocina y se acomoda en una silla. Después de un rato se acerca el castaño con los platos de comida, los coloca en la mesa para comienzan a comer. 

- Que bien sabe esto Fargan - dice Willy

- Soy todo un Chef - ríe - cuando quieras puedo cocinar para ti

El chico lo mira, y nuevamente se sonroja ante los agradables comentarios de su amigo, es tan lindo con el. Tanto que siente que el tiene todo lo que busca en un chico, solo que Fargan no puede ser para el porque ellos son amigos y no piensa cometer ese error de nuevo. No quiere perderlo, pero esta tan confundido.

- ¿Tienes algo que hacer hoy? - pregunta tímidamente el chico

- No - responde rápidamente el castaño - ¿Porqué?

- ¿Te gustaría salir conmigo a dar un paseo?... Pero como amigos claro, una salida de amigos - dice el chico nervioso y remarcando mucho la palabra amigos

- Claro, me encantaría salir contigo - responde Fargan mientras le guiña un ojo - y más tarde podemos ir a la conferencia juntos 

Willy solo asiente, mientras continua comiendo, trata de disimular su sonrojes y los nervios que el chico le provoca. Ese chico puede hacerlo muy feliz solo con sonreír, y eso le preocupa. Una hora mas tarde, después de terminar el desayuno y tener una agradable conversación, los chicos salen de casa de Willy para dirigirse a la de Fargan. El chico debe cambiarse de ropa antes de dar el paseo prometido.

 - Adelante - dice el castaño al abrir la puerta - siéntete como en casa 

Willy accede a la casa, se acerca a la hermosa sala que tiene el castaño, y se sienta en el sofá.

- Iré a ponerme algo rápido - dice Fargan - No tardare

El castaño sale del cuarto dejando solo al chico, quien con la mirada observa todo el lugar. Son amigos ya varios años, y a pesar de eso el nunca había estado en su casa. Siente que este es un momento importante, el conocer por primera vez la casa de su amigo. Unos minutos después, tocan la puerta de la entrada muy fuerte. Willy no intenta abrir, ya que le parece de mala educación hacerlo si no es su casa.

- Ratón, llama alguien en la puerta - dice acercándose a las escaleras que daban a su cuarto

Fargan sale detrás de una pared acomodándose su camisa que aun lleva desabotonada. El albino se pone muy nervioso y colorado al verlo. 

- ¿Podrías abrir por mi? - pregunta tiernamente el castaño, quien se ha dado cuenta del sonrojo del chico

Willy sin decir mas, se aleja de las escaleras y camina hacia la puerta. Cuando la abre se lleva una gran sorpresa al ver quien estaba tras la puerta.