Peter en estos momentos estaba sorprendido y no era pa menos, para que la diosa de la muerte Nórdica te de una visita es por que o llamaste su atención o tienes algo que le interese.
— Hela diosa de la muerte Nórdica, a que debo el honor de su visita — dijo un poco más calmado, pero sin bajar la guardia al igual que sus hijos.
— O no es nada solo que quiero que vengas a mi reino, hay algo que te interesara — dijo con una sonrisa.
— Mmm que interesante, donde está la trampa.
— No hay trampa, solo serán unos minutos, te muestro lo que tengo, te ago una pregunta y después te vas — dijo con su sonrisa.
— ok va...
— Papá — dijo la pequeña peli-blaca que estaba despertando.
— Hija.
— Quién es ella — dijo señalando a Hela.
— Ella...
— Yo soy la gran diosa de la muerte, puedes llamarme Hela preciosa — dijo con una sonrisa acariciando su mejilla.
— Hija ve a recoger tus cosas — dijo serio.
— Si Papi — dijo para irse.
Una vez que Mayday se fue Hela miro a al castaño.
— Parece que no perdiste el tiempo, es muy parecida a ti, antes de tu cambio aún me gusta este nuevo tu — dijo de forma seductora.
— Si le llegas a hacer al a mi hija, no me importara que ceas una diosa, te mataré — dijo serio.
— Jajaja ok no te preocupes.
— Lista Papi, a donde iremos.
— Ya lo verás.
Una vez terminada la conversación, atravesaron el portal para ir a los reinos de la muerte, mientras caminaban, varios muertos, espectros y caídos se quedaban mirando a Peter por el poder oscuro que desprendía, en eso uno de los espectros se lanzó a atacar e intentar absorber el poder de Peter, pero este sin mirar, desenfundó su espada y lo decapitó y con la misma velocidad la guardo sin que su hija se diera cuenta excepto la diosa que se sorprendió por lo que vio.
— Espero que aceptes nuestra propuesta — Pensó mientras sonreía y veía al castaño con su hija.
Después de una hora y media, llegaron al castillo de Hela donde al entrar, estaba ni nada más ni nada menos que la misma muerte.
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SpiderMan: amo de las sombras
Fanfictionfuria, ira, y deseos de venganza, eso es lo que se necesita para que un héroe caiga y algo mucho peor nazca.