Entre páginas (Frerard)

Fotografías (IV)

Habían pasado 3 días desde aquel encuentro con Frank en la tienda de cómics. Gerard estaba en su casa de Los Ángeles, miraba por la ventana de la cocina a la par que sorbía su café y pensaba en él, en Frank.

Lindsey entró en la sala y le abrazó por la espalda, lo que sorprendió a Gerard que estaba ensimismado en sus pensamientos.

- Vamos a echarte de menos, aunque solo nos vayamos un par de días. - Le dijo ella al oído.

-Yo más a vosotras, ya lo sabéis. - Dijo Gerard dándose la vuelta para besarla.

Lindsey iba a ir con su hija Bandit a pasar el fin de semana a casa de sus padres. Gerard iba a quedarse en casa para trabajar, o eso le dijo a su mujer, por que en realidad no iba a hacer nada útil, su plan era leer viejos tebeos, simplemente, después de lo de Frank, no le apetecía nada tener que ir a ver a la familia.

Lindsey ya había subido a por las maletas y Gerard fue a preparar a Bandit. La encontró en su habitación, viendo un viejo álbum de fotos.

-¿Que es eso, hija? - Le preguntó.

- Es uno de los viejos álbunes, lo vi en la estantería y me apeteció cogerlo.

- ¿Me lo enseñas? - Preguntó Gerard mientras se sentaba junto a Bandit.

Aquel álbum tenía mínimo 15 años. Había fotos variadas, de distintos momentos de su vida, pero la mayoría eran de My Chemical Romance.

- Mira, la cara del tío Mikey en esta foto. - Le dijo Bandit señalando una foto que hizo el propio Gerard en New Jersey.

Gerard se rió y señaló otra de su amigo Ray en la que salía con los ojos cerrados por el sol.

- Mira que careto. - Le dijo a su hija, burlándose.

- ¡Pues mírate tú en ésta! .- Le contestó ella riendo.

Estuvieron así un rato, señalando una u otra foto para ver cual era más graciosa, o más bonita o en cuál Gerard iba peor vestido. Pasaron por fotos de vacaciones, fotos de Lindsey y su banda (Mindless Self Indulgence), fotos de giras con MCR, fotos de Halloween, de Navidades, de Pascua...

- ¿Nos vamos ya? - Dijo Lindsey que estaba cruzada de brazos en la puerta de la habitación y llevaba un rato observando a su hija y su marido.

Bandit cerró el álbum de fotos y lo dejó sobre el regazo de su padre, le dio un beso en la mejilla y salió hacia la calle mientras su madre se despedía de él.

Gerard se quedó solo y volvió a abrir el álbum, en casi todas las fotos estaba presente la sonrisa de Frank. En una de las fotos salían Frank y Mikey en la cocina de la casa de Gerard, él mismo había hecho esa foto, era en un cumpleaños de Bandit. En otra de las fotos salían Gerard, Frank y Lindsey, era 31 de Octubre, Halloween y el cumpleaños de Frankie, que iba disfrazado de Frankestein, Gerard iba de Batman y Lindsey de vampiro. Gerard echaba de menos aquel tiempo en el que Frank siempre estaba en casa, por una cosa o por otra, era cómo uno más de la familia... y él había arruinado esa relación.

Pasó la página y vió una foto con la que no pudo evitar sonreír, salía con Matt, el primer batería de mychem, por aquel entonces ni siquiera conocía a Frankie. Gerard llevaba mucho sin hablar ni saber nada de Matt, al igual que con el resto de bateristas que habían pasado por la banda en sus doce años de existencia. Gerard suspiró, cerró el álbum y lo devolvió a la estantería de la que Bandit lo había sacado.

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Gerard estaba sentado en el sofá, acababa de pedir una pizza vegetal, esa nocha le daba pereza cocinar. Entró en twitter comenzó a mirar las novedades de sus amigos, nada interesante.
No pudo evitar la tentación de entrar en el perfil de Frank, para ver si había publicado algo, pero su último tweet era de hacía una semana y era sobre un concierto, iba dedicado a las fans, lo que desilusionó un poco a Gerard, que esperaba alguna indirecta o algo relacionado con su encuentro en la tienda de tebeos.

Fue entonces cuando sonó el timbre y Gerard cogió su monedero para poder pagar por su pizza, pero cuando abrió la puerta no encontró ni pizza ni pizzero, se quedó con cara de tonto y el monedero en la mano, mirando a la persona que había llamado a su puerta. Era Frank.

Una emoción inmensa recorrió el cuerpo de Gerard de pies a cabeza.
- Puedo... - Comenzó a decir Frank. Pero Gerard no le dejó acabar la frase, tiró de él y lo besó, Frank no se lo impidió, Gerard cerró la puerta y acorraló a Frank entre su cuerpo y la pared.
- Gee... - Suspiró éste.
- Frankie, te quiero. - Respondió su amigo, acercándose a besarlo, sus lenguas empezaron a entrelazarse,
Frank se aferró a la camisa de Gerard, que estaba descontrolado, quería sentir a su amante lo más cerca posible, pero, aunque cada pedazo de su cuerpo estuviese en contacto, no le parecía suficiente.
Frank le empujó hacia el sofá, dando a entender que, con la actitud que tenía Gerard, estaban solos en casa.

Gerard desabrochó la chaqueta de Frank y la dejó caer al suelo. Frank sonreía, parecía realmente feliz.
Subieron las escaleras con pasos torpes, entre beso y beso, pronto estaban en el piso de arriba, en la habitación de Gerard, y una vez más, Frank ocupaba el lado de la cama de Lindsey.

El timbre sonaba en la entrada, pero a Gerard ya no le importaba su pizza. Comenzaron a desvestirse, entre besos y caricias mientras se sumergían bajo las sábanas. Gerard se agarraba al cuerpo de Frank mientras gemía, no quería que ese momento terminase nunca, quería sentir el peso de Frank sobre su cintura eternamente.