˚⋆.* ◞ 𝟬𝟬𝟐┊ ❪ 𝐂𝐀𝐑𝐏𝐄 𝐃𝐈𝐄𝐌 ━ 𝒉.𝒑𝒐𝒕𝒕𝒆𝒓 ❫ ·˚ ༘𖤐 🦊
⤷ ❝ celeste andrómeda black tiene un deseo de muerte ❞
▍·˚ ༘ミen donde reyna y regulus dejan atrás otro recuerdo
de ellos...
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▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃▃ CARPE DIEM ── ◦'𖥸'◦ ── ACTO UNO ↳ ❛ ¡los gemelos weasley y ron al rescate! ❜︎ capítulo uno ╱ ╱ 🏛🧺 ˚◞𑁍ﾟ
₊˚ 𖤐₊ ⁀➷ SEGUNDO AÑO ✩ mundo muggle
Desde que Celeste Black volvió a casa para las vacaciones de verano, Arabella Figg ha acogido con ilusión a su hija adoptiva en Little Whinging, lo cual es un alivio porque según su mejor amigo Harry, Vernon Dursley le ha estado tratando como si fuera una bomba a punto de estallar.
Harry Potter y Celeste Black no eran personas normales. No eran niños normales que salían a pasear en bicicleta o que iban al Arcade después del colegio a divertirse.
En cambio, su definición de normalidad es montar en escobas y tener palos mágicos llamados varitas.
Ambos eran magos, dos niños que no tenían ni idea del mundo mágico hasta que fueron invitados a aprender en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Han vivido en Privet Drive toda su vida.
Famosos desde que eran niños por haber derrotado al Señor Oscuro. La fama y la gloria les llegó desde que pusieron un pie en el mundo mágico. Sin embargo, a los dos no les gustaba tanto la atención que recibían por ser quienes eran.
En todo caso, sólo era un recordatorio de que sus padres estaban muertos.
Celeste echaba de menos Hogwarts. Echaba de menos los fantasmas, los profesores, los castillos y las clases. Excepto al profesor Snape, por supuesto. El maestro de Pociones del colegio al que le encantaba hacer de la vida del Potter y la Black un infierno.
La chica Black siempre pensó en él como un imbécil asqueroso que siempre metía su nariz anormalmente larga y puntiaguda en los asuntos de la gente.
El año pasado fue una aventura que Celeste nunca podrá olvidar. Se hizo amiga de las personas adecuadas y juntos encontraron la Piedra Filosofal.
Han pasado meses desde que Celeste se enteró de dónde venía, y quiénes eran sus padres.
Hija de una poderosa Hechicera llamada Reyna De Martel y de Regulus Arcturus Black, un rumoreado Mortífago que fue proclamado como desaparecido/muerto.
( hasta el día de hoy seguía sin conocerse su paradero ).
No mucha gente sabía lo de su padre. No había pruebas sobre él, por lo tanto no fue arrojado a Azkaban.
( ya que la gente tenía sentimientos encontrados por él, o apenas lo conocían ).
Sin embargo, su madre era una verdadera As en el Ministerio. La razón por la que había tantos criminales en Azkaban era por Reyna De Martel. Sin embargo, se vio obligada a esconderse debido a los tiempos oscuros durante la primera guerra mágica.
Una Slytherin de sangre pura con una personalidad fuerte e ingeniosa, pero pura de corazón. Siempre impulsada por sus sentimientos y su mente más que por lo que piensen los demás de ella.
Regulus Black era el alumno estrella del colegio de magia. Callado y reservado, pero muy bueno en Quidditch. Tal vez esa sea la razón por la que es tan bueno volando. Era un asombroso buscador del equipo de Slytherin.
Cuando muchos oyen su nombre, se encogen de miedo o murmuran algo agrio sobre él. En cualquier caso, nadie conocía la historia de Regulus Black. ¿Era bueno o malo?
Nunca lo sabrán.
Así que Celeste no tenía ni idea de si su padre estaba vivo o muerto.
La cicatriz en el cuello de Celeste era muy inusual, incluso para una bruja.
Era un recordatorio constante de lo que había sucedido once años atrás. Con un año de edad, Celeste y Harry sobrevivieron de alguna manera a la maldición asesina lanzada por el mago más oscuro de todos los tiempos Lord Voldemort.
Los padres de Harry, Lily y James Potter, y la madre de Celeste, Reyna, murieron en el ataque de Voldemort, pero de alguna manera ambos niños vivieron ese día.
Nadie supo del por qué o la razón que había detrás de esa tragedia.
El sonido de un ulular llamó su atención. Su lechuza negra llamada "Leo" tenía una carta. Ansiosa, Celeste se acercó y le entregó a Leo unos trozos de pan antes de coger la carta.
Rasgó con avidez el sobre de la carta para ver su contenido.
Querida Celeste,
Espero que te llegue esta carta. Por alguna razón, Harry no ha respondido a nuestras cartas. Estoy preocupada por él. ¡Esos Dursley deben ser gente horrible! Ni siquiera lo dejan salir. Vives enfrente de él, ¿no puedes hablar con él? ¡Está bien si no puedes!
¡Gracias por los libros y los discos de música que me has enviado! Diría que The Outsiders tiene que ser mi favorito. Tienes un gusto maravilloso para la música. Mi padre también está obsesionado con los discos. Creo que ustedes dos se llevarían bien.
Mis padres y yo iremos al Callejón Diagon dentro dos días. Espero verte allí.
Tu amiga, Hermione Granger.
Celeste dobló la carta y sonrió brillantemente. Un golpeteo en la puerta sacó a la Black de sus pensamientos.
Arabella Figgs estaba en la puerta, sonriendo a su hija adoptiva.
—Hola, cariño. He hecho algo de pasta alfredo, tu favorita. Pensé que estaría bien hacer una comida casera ya que te irás a Hogwarts en unos días.
—¡Gracias, tía Figgs!
Arabella Figgs crió a Celeste como si fuera su propia hija. Aunque fuera una Squib y fuera repudiada, seguía conociendo los principios básicos del Mundo Mágico.
Más tarde esa noche, Celeste se acostó en su cama tratando de dormir. Pero unos golpes en la ventana sobresaltaron a la bruja de pelo cobrizo.
Abrió las persianas esperando ver los vastos cielos oscuros y el brillo de las estrellas de la noche, sólo para encontrar un coche volador con cuatro pasajeros montados en él.
Los gemelos Weasley, Ron y Harry Potter sonrieron a la Black a través de la ventana de cristal.
—Empaca tus cosas, nos vamos de este sitio —dijo Harry y la Black no dudó en coger su equipaje.
—No me lo digas dos veces.
Quiere mucho a Arabella Figgs, pero ir de paseo en un coche volador era una oportunidad que Celeste Andrómeda Regula Black no podía perder.
