Amor soñado.

6

Otro día de clase más, otro día más para  intentar ser alguien en la vida.
¿Que seríamos sin estudio? Nada, por como está el mundo ahora ya nada, sin trabajo no sos nadie, sin una profesion no sos nadie, sin un centavo ¿que sos? Nadie.

Todo el mundo te desprecia por ser de clase baja. Por eso, por eso hay que estudiar, al menos si no quieres ser la burla o sentirte nada, lo debes hacer. Pero yo no lo hago por eso, yo lo hago para superar al mundo, para desmostrar que yo si puedo, que yo no lo haré para complacer a los demás, lo haré para mí propia felicidad.

Pero ya. Pasemos a lo siguiente, como les decía... Otra clase más, a si. Bueno... Iba de camino a la escuela junto a Sav, y Sav no se que le pasó, pero si levanto con uno de los mejores humores. Le va sonriendo a medio mundo, cada que mira a alguien le sonríe, hace unos minutos una pareja iban caminando de la mano y Sav, Sav les sonrió pero la novia del chico lo mal interpreto todo, y tuvimos un pequeño problema.... Recordemos:

—¿Que es lo que te pasa que sonríes tanto?

—Nada en especial, solo que me levanté con ganas de vivir la vida. ¿Que tiene de malo eso?

—Nada, nada, pero viniendo de tí es... Es muy raro — Rei.

—Oye, mira esa pareja, se ven tan bonitos juntos. ¿Que se sentira tener una pareja, formal?, pero cuando hablo de formal lo digo en serio —Bramo con un tonito curioso mientras miraba a la pareja, muy sonriente.

—¿Por qué le sonríes a mi novio, zorr#? —Miro a su novio— Con esa zorr# me estás engañando — Espeto enojada.

—¿Q-que? No, no amor, yo no te eh engañado, menos con ella, ni la conozco.

—Oh, oh, Sav... — Mire a Sav.

—Menos con ella... ¡¿Menos con ella, o sea que me engañaría pero no con ella?!

—¡Que no, no te eh engañado desde la vez que peleamos, joder!

—Uhhhh — Abucheamos Sav y yo.

— Te metiste con otra mujer el día de nuestro aniversario, gilipollas. Me engañaste y no me lo dijiste, me lo ocultaste, eres una mierda, que te jodan.

—¡Ese día ni siquiera seguíamos juntos!

—Si que lo estábamos, cabrón. Ese día no habíamos terminado, habíamos peleado. Te odio, pedazo de mierda — Le propinó una cachetada.

—¡Y tú!— La chica se acercó a Sav.

—Oye, oye, cálmate. Yo no salgo con esa mierda de novio que tienes, yo solo les sonreía a ambos, me mal intepretaste todo, tía, cálmate.

La joven se detuvo en secó.

— ¿Y como se que no me mientes?— Pregunta ya un poco más relajada.

—Ya es tu problema si no me crees, no el mío.

—Joder niña, una disculpa... Yo solo no quería que el me engañaba o algo por el estilo.

—Ya, está bien. Mira el lado bueno, se puso nervioso y soltó toda la sopa — Rio

Ambas se despidieron y seguimos con nuestra caminata hacia la escuela.

—Mira, una kiosco móvil— Señaló Sav mientras se acercaba.

—Oh no, no que llegaremos tarde a clases, ya vamos varios minutos de retraso.

—Oh vamos, Saia, yo sé que tú también quieres.

—Agh, está bien.

—Señor, ¿me podría dar cuatro bolsas de garrapiñadas y dos paletas?— Pidió al vendedor.