Lunes por la mañana.
Sojin abría con pesadez sus ojos.
Había sido una noche maravillosa.
Sojin se incorporó de golpe al recordar que había sucedido la noche anterior.
– Dormí con Jin– pensó Sojin y sus mejillas se tornaron rojas.
Al girar su rostro logró observar el de Jin.
Aún dormía y estaba tranquilo.
– Jin–
Con mucho cuidado, Sojin se acercó al rostro de Jin.
Con el dorso de su mano, lo acarició desde la sien hasta el cuello.
Jin respiraba profundamente, con cada caricia suspiraba y con cada suspiro Sojin se acercaba más a su rostro.
Justo cuando sus labios rosaron los del joven Kim, la joven se dio cuenta de lo que estaba haciendo y dio un brinco retrocediendo.
Con el movimiento brusco de Sojin, Jin se despertó.
– ¿Sojin? – pregunto confundido y adormilado.
Jin dio un gran bostezo y se estiro.
– ¿Qué sucede? –
– Ehmm… nada Jin. Es hora de levantarse– dijo Sojin mientras se incorporaba torpemente y se dirigió hacia su propio cuarto.
Ya en su habitación, Sojin recuperó la respiración.
Estaba con el corazón acelerado.
– Casi lo beso– susurro Sojin tocándose los labios con la yema de los dedos.
Despejo su cabeza y abrió su armario.
Tomó su uniforme y se metió a bañar.
Después de la ducha caliente Sojin se vistió y salió del baño.
Dejo entrar a Jin, quién seguía medio dormido.
Mientras el joven Kim se duchaba, Sojin preparaba el desayuno.
– ¿Qué querrá Jin de desayunar? – se preguntó Sojin.
Decidió cocinar arroz, huevo frito y algunas verduras hervidas para acompañar.
Puso la mesa, dejo listo el desayuno y se sentó a esperar a Jin.
Cuando el joven Kim salió del baño, pudo percibir el olor de la comida recién preparada.
Siguió la esencia que hacia rugir su estómago.
Cuando llego al comedor, pudo ver a Sojin esperándolo con una gran sonrisa.
– Sojin, no era necesario– dijo Jin apenado.
– Claro que sí Jin. Quería agradecerte por… lo de… anoche– dijo Sojin con un leve rubor.
– Eso… no fue nada–
– Gracias Jin. Que disfrutes el desayuno– dijo Sojin sonriendo.
– Sí. – exclamó Jin comenzando a desayunar.
Ambos jóvenes desayunar tranquilamente.
Después de todo estar juntos no era tan malo.
– ¡Seolhyun! – gritó Amy.
Llevaba esperando en la entrada del instituto a Seolhyun durante diez minutos.
– ¿Amy? – pregunto confundida Seolhyun, quien se acercaba a la entrada con V detrás.
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Hermoso error [BTS]
FanficEllos pensaron que habían cometido un error... Después de 9 meses ¿Lo seguirá siendo?