Vicealmirante Monkey

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Desde hace tiempo Fujitora no depende de su vista para percatarse del mundo que lo rodea, por eso mismo sabe perfectamente que esa chica de actitud tranquila se encuentra perturbada.

Cuando la conoció fue una experiencia interesante, ambos pudieron sentir fácilmente la fuerza del otro y sus ideales llegaron a coincidir, ahora Fujitora se encuentra en un dilema, sabe que ya es tiempo de mostrar al mundo el poder que han adquirido y hacerse de cierta fama, pero hacerlo mediante "ese" problema es algo que no lo convence.

-Ciertamente es un buen momento — dice con su típica voz ronca y tranquila — sin embargo somos marines y enemigos de los piratas.

-Será una masacre — la albina ha participando en tantas misiones que casi siente el olor a sangre de imaginar la pelea.

-Tú intención es proteger los números de la marina o dejar todo y cambiar de bando? — a Fujitora no le gusta andar por las ramas cuando habla con ella, desde el comienzo su trato fue honesto.

Por un momento se siente la tensión entre ambos, Akira respira hondo sumergiéndose en sus pensamientos, dejar todo lo que construyó en estos años no es fácil.

-Esa no es mi intención — se esforzó mucho para llegar donde está, además esto es más grande que ella misma — pero... — porque siempre hay un pero — no puedo dejarlo — nunca se lo perdonaría.

-Shirohige no se quedará de brazos cruzados — es mejor dejarle al Yonko el asunto y evitarse problemas.

-Entiendo tu punto Fujitora-san, es bastante arriesgado y un pequeño error puede hacharlo a perder todo — como una torre de naipes — aún así, sabes que lo que dire.

No la convencerá, venirse a enterar que el reo más famoso hasta el momento, es parte de su familia fue una gran impresión, siente la determinación y la firmeza de su espíritu al hablar.

Fujitora a perdido tanto a lo largo de su vida que tiene que evaluar cuidadosamente cada detalle, quien diría que esa chica misteriosa que conoció hace unos años lo arrastraría a las puertas de la justicia y hasta el momento no lo ha defraudado, aunque sabe que le esconde más cosas fue su decisión seguirla y apostar por ella.

-Haré los preparativos — acepta tratando de no arrepentirse.

-Apenas lo necesario, si algo sucede quedarás al mando y tendrás el completo control de la unidad — siempre es bueno tener un plan de contingencia — asegúrate que los chicos entiendan las consecuencias de seguirme en esta misión — no llevará a nadie en contra de su voluntad.

-Sabes bien que ellos te seguirían hasta el infierno — es impresionante el sentido de lealtad que despertó.

-Nunca está demás recordárselos — está orgullosa de ellos y siente pena de arrástralos a sus problemas.

De ahora en adelante tiene que ser cuidadosa, si Sengoku sospecha de sus movimientos hará lo imposible por bloquearle el paso, le debe mucho a Garp por infórmale a pesar de la prohibición del almirante.

Aunque puede decide no contactarse con Shirohige, si conoce al hombre sabe lo que hará, por algo estaba a la misma altura que Roger, prefiere asegurarse con otra de sus cartas fuertes.

El denden-mushi que ocultó celosamente logra contactarse, una estupida sonrisa la recibe del otro lado de la línea.

-Tenia el presentimiento que llamarías — le dice con voz profunda.

-Si... — necesita toda la ayuda posible — puedo contar contigo?

-Siempre — una ligera sonrisa aparece en su rostro.

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