Novena parte: La verdad. (𝙑𝙠𝙤𝙤𝙠)

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— A mí tampoco me contesta las llamada

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— A mí tampoco me contesta las llamada. — Negó Jimin, mostrándose igual de preocupado que Jungkook.

No importaba cuantas veces le preguntara sobre el chico de sonrisa cuadrada. Nadie sabía nada de él. La única pista que tenía de esto, era esa llamada que logró que Taehyung se fuera escandalizado. Esa llamada era la causa de todo, pero... lo único que podía recordar de ella, era los gritos de Taehyung.

Había sido un tonto por pensar que su vida era perfecta.

¿Cómo pudo ser tan tonto?

Pensaba que se llevaban bien, que habían formado una bonita relación de amigos. Pensaba que ambos empezaban a sentir algo por el otro. Pero ahora se daba cuenta, que nunca puso de su parte para conocer al verdadero Taehyung.

A duras penas logró que Jimin le hablara de ello.

Kim Taehyung era un chico amable, que se preocupaba por sus seres queridos, pero que la vida le pagaba con malos tratos.

"Su padre" Ese hombre tenía que ver con todo esto seguro.

Jimin estaba muy preocupado por eso mismo, y le contagiaba esa preocupación. Ambos sabían, que la llamada que Taehyung tuvo ese día, estaba relacionada con su padre también. Porque Taehyung nunca se habría mostrado tan desesperado si no hubiera sido algo grave, él era una persona muy fuerte que no caía tan fácilmente. Ahora entendía porque era malo en los estudios, este no tenía nadie que le enseñara. No tenía esperanza por su futuro.

Jungkook se sentía como un verdadero tonto.

Creyendo que Taehyung era un chico despreocupado con una vida fácil, resultó ser todo lo contrario. Sus problemas se quedaban cortos ante los de él.

Las semanas pasaron tan dolorosamente lentas.

No fue hasta que una llamada en su móvil sonó, con el nombre que tanto deseó ver, que pudo sentirse aliviado.

— ¡Taehyung! — Casi gritó, apretando el móvil contra su oreja.

— Jungkook...

Un tono muy diferente al contrario, que sonó muy bajo y sin energías.

— ¿Estás bien? ¿Te encuentras bien?

— ¿Puedo ir a tu casa?

Jungkook asintió rápidamente con su cabeza.

— A-ah. ¡Sí! — Afirmando con su voz cuando notó que él no podía verlo.

Quiso preguntar más cosas, pero la llamada se cortó, dejándolo con unos nervios casi matadores.

Sus uñas ya no eran uñas. En las horas que tardó el timbre en sonar, estuvo comiendo una a una mientras se movía de un lado a otro.

— Jungkook, Taetae ha ven...

No dejó que su madre siguiera hablando, bajó las escaleras casi cayéndose.

Mirando con sus ojos culpables y húmedos al chico de mirada cansada su corazón se sintió pesado al ver el rostro demacrado del mayor.

¿Qué tanto tuvo que pasar para estar así? Esa sonrisa tan bonita que solía tener, no estaba ya.

— H-hola. — Se mostró nervioso, Taehyung solo pudo suspirar y Jungkook entendió que este quería hablar a solas con él.

Ambos subieron a su habitación en un silencio incómodo. No obstante, esa incomodidad tardó poco en irse, siendo sustituida por la sorpresa y la ansiedad.

— Me iré de Seúl.

— ...

Jungkook no supo si había oído bien, su garganta se secó y sus manos temblaron.

— ¿Q-qué?

— Yo... siento no haberte contado nunca de mí. Hablé con Jimin y él... me dijo que te lo contó todo.

Taehyung se sentó al lado del menor, manteniendo su mirada baja. No podía mirarlo a los ojos.

— Mi padre... fue llevado a juicio y... ahora está en la cárcel. Y mi madre... está en el hospital con heridas y depresión. Yo...

No importaba cuantas veces intentara lo mismo. Siempre que contaba esto a alguien, sus ojos se llenaban de lágrimas. Le pasó con Jimin, y ahora le pasaba con Jungkook. Se sentía más avergonzado de mostrarse así frente a la persona de quien había comenzado a tener sentimientos y aún más avergonzado se sentía por ser consolado por este.

Jungkook lo atrajo en un cálido abrazo. Ese aroma a galletas y miel que siempre tenía el menor con él, le hizo llorar más sabiendo que tanto iba a extrañarlo. Habían sido meses lo que habían convivido juntos, unos simples meses que no comenzaron de la mejor manera, pero que habían acabado con unos fuertes sentimientos. Ni siquiera le dolió tanto cuando se tuvo que separar de Hoseok.

¿Por qué le dolía tanto pensar que no podría ver cada día a Jungkook?

Su corazón casi acababa de desmoronarse por sentir al más pequeño llorar en su hombro. No pudo contenerse más, necesitaba expresar estos sentimientos que sentía. Sus manos se apoyaron en ambas mejillas de Jungkook, y sus labios se juntaron en un húmedo y salado beso.

Fue un beso doloroso. Un beso torpe entre sollozos, pero un beso cálido y luminoso. Porque Jungkook para él, era como una luz en mitad de su oscuridad. Y para Jungkook, Taehyung era una luz que buscaba estar entre los suyos.

— Me enamoré de ti, Jungkook. Y... lo siento, lo siento mucho por decirte ahora que yo me iré, pero...

Sus labios fueron tapados por el menor, que negó entre lágrimas.

— No digas más. Está bien. Tú... eres mi primer amor. Ni siquiera pudimos expresarlo bien, pero...

Hizo una pausa, tomando aire con dificultad.

— No te culpo. — Continuó. — No sé ni cuando comencé a sentirme así. Solo sé que me enamoré de tu sonrisa. Tal vez tarde poco en olvidarte o tarde mucho. Pero... si algún día nos volvemos a ver... ¿me darías una oportunidad?

— Yo... no cometeré el mismo error. Me iré, pero no te olvidaré, Jungkook. No te prometo si volveré, porque no lo sé. Pero... quiero darnos una oportunidad. Cuando nos volvamos a ver... ¿Serías mi novio?

Jungkook río entre lágrimas, asintiendo, aunque a ambos le dolieran en el alma tener que separarse. Este no era el final.

Taehyung sabía que su vida llena de dolor estaba finalizando, pero... ahora tenía una nueva oportunidad de hacer su futuro más feliz.

Jungkook era quien le daba una nueva esperanza. Una esperanza de volverse una mejor persona para cuando se volvieran a ver. Definitivamente, tenía que volver porque él... le ayudó, compartió sonrisas a su lado, y lloró junto con él. Ambos eran las luces del otro y sus futuros ya estaban decididos. Tomarían el camino iluminado tomados de la mano.

"Gracias, Jeon Jungkook."

𝕰𝖓𝖋𝖊𝖗𝖒𝖊𝖉𝖆𝖉 𝕮𝖔𝖗𝖗𝖔𝖘𝖎𝖛𝖆 (𝐁𝐓𝐒)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora