Capítulo 9

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Me pongo de pie —¿a que te refieres? ¿Que otras creaturas existen?—

Pone las manos sobre su rostro y suspira — no lo se Asuna, solo estoy… Buscando darle sentido a todo esto, y si lo pensamos un poco, bueno, hay mas criaturas en el océano además de nosotras. —se sienta de nuevo —Existen los tritones. La mayoría de ellos sirven como guardias que protegen el reino marino o lo que queda de el. Ellos son los guerreros más fuertes de todos nosotros. Criaturas viciosas y letales, tu los viste antes. ¿Los recuerdas? —

Aaiento —si, son bastante aterradores —

Resopla — no tienes ni edea de cuanto, pero también tenemos a las  nereidas, sus contrapartes, espero que nunca tengas la mala suerte de ver a una. Pero volviendo a los tritones. A diferencia de las sirenas, no tienen conexión con la humanidad. Las sirenas nos parecemos a los humanos, así que una parte de nosotras está conectada a ustedes. —me explica con paciencia, pero la interrumpo confunadida. — ¿Tieze porqué me cuetas eso?—

—deja que termine, tengo un punto lo prometo.—me mira insistente.

—lo siento, esta bien te escucho. —Me quedo en silencio y la dejo continuar.

—bien, nuestra naturaleza es mitad acuática y mitad humana. Los tritones no tienen este problema. Fueron creados más parte del océano que cualquiera de nosotras, hechos con las mezclas más mortíferas de peces con colas de tiburones y monstruos marinos. No desean interactuar con la tierra, ni siquiera con fines bélicos. Así que podemos eliminarlos como sospechosos. Ellos existen, siempre, bajo el mar, donde son solitarios y disciplinados soldados de la guardia, o desenfrenadas criaturas que llevan una vida salvaje en los límites del océano.—

Sigo sin entender.

—¿a donde quieres llegar con eso?.—me siento a su lado— Dijiste que eran quienes reinaban ahora. Son los malos aquí ¿no? Las obligan a tener sus bebés—me estremezco de solo pensarlo.

Suspira. —intento explicarte que hay mas criaturas por ahí con quien el capitán  pudo hacer algún trato y por lo que vinos no necesariamente pude ser de este mundo al igual que este otro Eugeo, podría ser alguien de otro lugar — cierra sus ojos con fuerza. — además exagere un poco sobre los tritones—

Ladeo mi cabeza — ¿a que te refietes?—

Aparta su mirda. —bajo la orden de la Reina del Mar. —juega nerviosa con sus manos —son las criaturas con las que nos apareamos. Antes de ser arrojada a esta nueva vida, yo estaba comprometida con uno. el Asesino. Los tritones no tienen tiempo para nombres y otras tonterías, así que los llamamos por lo que son: Espectro, Desollador, Asesino—

—wow espera, ¡¿que?!— detengo su palabrería. — ¡comprometida! ¿Con una de esas cosas?—

—si, de hecho también en esta vida. Me he estado escondiendo de él desde que recuperé mis recuerdos — murmura cabizbaja.

No tengo palabras. Mi rostro debe reflejar mi asombro y terror ya que Tieze continua hablando: —Son nuestras parejas Asuna, así es como nacemos las sirenas. Mientras que las nereidas son peces por los cuatro costados, y ponen huevos para que sean fertilizados fuera de sus cuerpos, las sirenas no somos tan afortunadas. Debemos aparearnos. —dice suavemente como si estuviera avergonzada.

—p-pero… ¿que hay de los humamos? ¿que no los llamaban para eso?—

Su mirada distante se dirige al océano —cuando Quinella reinaba, los llamábamos cuando se acercaban mucho a nuestras costas, debíamos ahogarlos cantando nuestras canciones. Pero ahora— suspira. —son nuestra vía de escape—

Nunca pensé en Tieze realmente. Lo único que me importaba era que las cosas salieran bien para mi. Jamás vi a las sirenas como algo mas que las villanas. Las lagrimas amenazan con salir de mis ojos pero parpadeo alejándolas. Las sirenas han sufrido también, después de todo una vez fueron humanas. ¿Dónde están las diosas ahora, porque no arreglan este desastre? Les dieron una corona. Que gran solución, resoplo, les hubieran de vuelto su vida. Y mas aterrador aún…—los tritones, sus parejas, ¡pero son monstruos! —digo recordando a las terribles criaturas mitad tiburón mitad… Quien sabe que.

A Twist Of FateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora