Capitulo 30 - ¿Cuál es tu historia?

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[Sigue narrando Riley]

Estábamos en el auto dirigiéndonos a la 'sorpresa' de que tenía preparada Brandon, pero mientras, yo estaba hablando como un perico por lo emocionada que estaba, si lo sé, la emoción llego un poco tarde, pero fue porque estaba en un estado paralizado.
Riley: ¡Dios! ¿Te imaginas? Yo no sé cambiar de pañal a un bebé, tal vez pueda alimentarlo y dormirlo, ¿Qué se supone que come un bebé? ¡Seré una terrible madre! ¿Qué tal si se me cae? O... si se va en su carro de juguete, pero tamb... -Brandon me interrumpió
Brandon: Serás una madre grandiosa -dijo -No para nada están esas platicas de cómo se cuida a un bebé Riley -menciono esto en tono obvio.
Riley: ¿Pero si no me quiere? -dije
Brandon: Esta más que claro que va a adorar a su madre... un poco más a su padre -dijo susurrando lo ultimo
Riley: ¡Oh no! - mencione y soltamos una risa.
De ahí en más, mencionamos las fechas en las que se podría hacer la boda, ya que no me quería casar pareciendo una ballena, y posibles nombres por si es niña o niño. Brandon se estaciono en frente de una casa muy grande, pero no me daba pistas de lo que podría ser la sorpresa, bajamos del carro y Brandon se recargo en el, haciéndome una seña que fuera junto a él, así lo hice, y el poso sus manos en mi vientre.
Brandon: ¿Te gusta? -dijo, yo lo mire confundida.
Riley: ¿Me gusta qué? - dije frunciendo un poco el ceño
Brandon: Tu sorpresa es esa casa -la señalo.
Riley: ¡Dios! ¿En serio? No me la creo -reí - ¿En serio? - él asintió -¿Pero cómo?
Brandon: Vendí mi otra casa y he comprado esta para nosotros dos... mejor dicho tres -dijo volviendo a poner sus manos en mi vientre, sonreí. Él me acompaño a ver la casa, tenia 4 habitaciones, pienso yo que son muchas pero él me dijo que algún día las íbamos a necesitar, 2 baños, 1 jardín, el cual me gusto mucho, el bebé podría salir a jugar, cocina, sala, en definitiva me encanto la casa. Ahora estoy en mi casa, Brandon iría con los chicos a sabe dónde, y yo iría a visitar a mi prima, ella tiene 20 y su nombre es Samantha, me junto con ella la mayoría de las veces, pero en definitiva me gusta pasar más tiempo con los chicos. Fui hasta su casa y toque tres veces la puerta, hasta que una chica me abrió y grito como loca.
Samantha: ¡Estas aquí! ¿Cuánto que no me visitas? ¡Qué genial! - le tape la boca con la mano, era de mi soportarla más tiempo, pero se ha vuelto increíblemente mas gritona de lo que era.
Riley: Sí, estoy aquí, creo ya bastante tiempo que no venia -dije recordando el tiempo
Samantha: ¿Y cómo sigues? - pregunto haciéndose a un lado para que yo pudiera pasar
Riley: ¿De qué?
Samantha: ¿No recuerdas? Ese día que tuve que ir por ti, te habías perdido, estabas sangrando -la interrumpí
Riley: Sí, ya recordé -Tenia 17
*Flash back*

Estaba saliendo del instituto, estaba lloviendo, mis padres siempre pasaban por mí, ya no es así. Gire la vista viendo mi carro, tendría que irme sola, tendría que acostumbrarme pues lo haría el resto de mi vida. Subí y empecé a manejar, pero sin rumbo a mi casa, ahora estaba manejando sin ninguna dirección y yendo muy rápido, llegue a una carretera no había nadie, estaba distraída pensando en esos momentos en donde mi vida era perfecta, tanto que choque con un árbol ¡No me paso nada!, para mi desgracia. Baje del auto inundada de la culpa, tristeza y el enojo, corrí, hasta adentrarme en ese bosque, corría más rápido a medida de que los recuerdos llegaban, mis piernas reclamaban un descanso, tanto que por lo agotada que estaba caí al suelo haciendo un ruido bastante fuerte, que solo yo pude escuchar, las gotas caían en mi cara, grite y grite, hasta el punto de querer hacer mi garganta sangrar, las lagrimas salieron como impulso de lo que no hice cuando mis padres estaban aquí, reclame a Dios él porque mi vida era una mierda, mi cabeza quería explotar por el dolor de mi cuerpo, reí sin pista alguna de algo gracioso, me senté acurrucándome en un árbol llorando sin parar, nuevamente la rabia regreso a mi haciendo mis manos en puños y golpeé el suelo, los arboles, marcando mis manos que ya tenían algunas heridas, otra vez, me caí, esta vez no tenía fuerza para nada, de mi bolsillo saque mi celular y marque a mi prima.
Riley: Te necesito -solloce - ven por mí... por favor -dicho esto colgué.
*Fin flash back*

Samantha: ¡Hey! ¡Riley! -me saco de mis pensamientos.
Riley: Perdón, solo recordaba cosas
Samantha: Ok...-dijo con tono dudoso - Entonces... ¿Cuál es el motivo de tu visita?
Riley: No te has separado de Keaton ¿Verdad?
Samantha: ¡Claro que no! -Dijo ella dirigiendo la mirada hacia arriba - ¿A qué va eso?
Riley: Quiero que ustedes sean los padrinos de mí bebe -sí, fui directamente al grano.
Samantha: Espera ¿¡que!? -Carcajeo -¿Me estas tomando el pelo? -Negué -¿Y dónde está el bebé? espera... ¿Dónde está el padre?
Riley: Bueno el bebé esta aquí -apunte a mí estomago y ella abrió sus ojos como platos - Y el padre está con los chicos.
Samantha: ¿Sigues juntándote con ellos? -Asentí -Tú jamás cambias -Ni creas, pensé. Samantha acepto ser la madrina del bebé, me diría que llamaría a todos mis compañeros de carrera para que mi fiesta no estuviera tan "sola" según ella, mis compañeros... ah mis dulces e hipócritas compañeros, tengo que dejar de pensar eso.

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